ACADÉMICAS
La formación del arquitecto como agente de cambio en la ciudad del siglo XXI
The Formation of the Architect as an Agent of Change in the City of the XXI Century
La formación del arquitecto como agente de cambio en la ciudad del siglo XXI
Arquitectura y Urbanismo, vol. XXXIX, núm. 2, pp. 108-116, 2018
Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría
Recepción: 23 Marzo 2018
Aprobación: 30 Abril 2018
RESUMEN: La ciudad actual como fenómeno de alta complejidad es objeto de estudio constante. La Nueva Agenda Urbana establece como compromiso que todas las ciudades deben asumir el reto de alcanzar la sostenibilidad urbana y garantizar la calidad de vida adecuada para sus habitantes. En este trabajo se presenta un proceso de enseñanza- aprendizaje utilizado para la formación de los profesionales del futuro que deben garantizar el crecimiento y desarrollo urbanístico, necesario en la ciudad del siglo XXI. Como resultado se expone la experiencia obtenida con estudiantes de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Tecnológica Equinoccial de Quito, Ecuador. Las propuestas trascendieron los límites físicos de la Universidad, al integrar los intereses de las instituciones metropolitanas, la academia (estudiantes y profesores), y la población residente, en un trabajo complejo e importante.
Palabras Claves: Enseñanza del urbanismo, agentes de cambio, ciudad.
ABSTRACT: The current city, as a phenomenon of high complexity, is constantly studied. The New Urban Agenda establishes as a commitment that all cities must assume the challenge of achieving urban sustainability and ensure the quality of life of its inhabitants. This paper presents a teaching - learning process used to train the future professionals who must guarantee the growth and urban development necessary in the city of the XXI century. As a result, it is exposed the experience obtained with students of the School of Architecture and Urbanism of the Universidad Tecnológica Equinoccial de Quito, Ecuador. The proposals transcended the physical limits of the University, since they integrate the interests of the metropolitan institutions, the academia (students and teachers) and the resident population, in a complex and important work.
Keywords: Urban education, agents of change, city.
INTRODUCCIÓN
La ciudad actual es motivo de preocupación de los profesionales y de los ciudadanos en general, es un fenómeno de alta complejidad, colectivo, diverso, con historia y cultura propia [1]. "La ciudad es el mayor hecho cultural, el más masivo y perdurable y también el más inclusivo, porque incorpora a todos los sectores de la población y a todas las generaciones que nos antecedieron”. [2]. En su justa dimensión es un reflejo de cada cultura, vivido y sentido según los ciudadanos, de ahí la necesidad de planificar lugares pensando en la gente que lo va a utilizar, que se hagan reconocibles por sobre otros, oportunos para fomentar las relaciones sociales, que invite a permanecer en ellos e integrados a un entorno social, cultural y ambiental. [3]
Desarrollar procesos de enseñanza- aprendizaje es un aspecto que incide en la formación de los futuros arquitectos urbanistas como agentes de cambio, capaces de propiciar las transformaciones necesarias hacia el desarrollo sostenible de las áreas urbanas. Son ineludibles los cambios en las concepciones metodológicas, didácticas y de aplicación práctica en la educación superior, un aprendizaje de calidad en el siglo XXI, para preparar al arquitecto capaz de construir un mundo mejor.
El presente trabajo expone una experiencia desarrollada con más de 300 estudiantes de la carrera de Arquitectura en la Universidad Tecnológica Equinoccial (UTE), que cursan el séptimo y octavo niveles1, en la asignatura de Teoría y Taller Arquitectónico IV, la cual se configura con carácter de Taller Integral para fusionar estudiantes de dos niveles diferentes, que abordarán el tema urbano en la escala de planeación y diseño urbano. El urbanismo se inicia a partir del cuarto semestre con la asignatura introductoria sobre ciudad y paisaje, le sigue teoría del urbanismo, en sexto nivel se imparte planeación urbana, y termina con este taller que reúne los conocimientos impartidos.
La firma de un convenio de trabajo con el Instituto Metropolitano de Planeación Urbana (IMPU) del Distrito Metropolitano de Quito, institución encargada de elaborar la Visión de Quito Metropolitano al 2040, en cuanto a su desarrollo territorial y urbano, ha permitido que durante tres años la universidad realice estudios que contribuyen a la elaboración de los documentos definitorios del desarrollo de la ciudad en los próximos años. El trabajo realizado permitió participar en el evento Mundial Hábitat III, Conferencia de las Naciones Unidas sobre Vivienda y Desarrollo Urbano Sostenible. En el mismo se presentó la Propuesta de Plan Urbano para la Parroquia Urbana de Calderón, situada al norte de Quito. Un año después, durante las celebraciones del primer aniversario del evento mundial, convocado para revisar qué se había realizado en respuesta a la Nueva Agenda Urbana, se presentó otro resultado: el Plan Urbano para la parroquia urbana de San Antonio de Pichincha. En ambos eventos se evidenció el avance académico, demostrándose que es posible una nueva forma de hacer ciudad en la ciudad existente.
Es un deber convertir las aulas y los contenidos impartidos en el espacio idóneo donde se formen arquitectos proactivos, capaces de generar propuestas que respondan a las complejas problemáticas urbanas. Dicho proceso de enseñanza contribuye a mejorar los planes y programas de estudio y a conferirle una dimensión más acabada en relación a la interrogante de ¿cómo contribuir desde la academia a enfrentar los problemas urbanos actuales y preparar la ciudad del futuro?
La ciudad latinoamericana actual ha tenido un proceso de urbanización en extremo acelerado, con modelos urbanos de poca o ninguna planificación, regidos por la especulación de suelo y los proyectos inmobiliarios. Nuevos tejidos urbanos se apoderan de la ciudad: conjuntos habitacionales cerrados, centros comerciales y un crecimiento desordenado hacia las periferias. América Latina es la región más urbanizada del planeta, las áreas urbanas ocupan el espacio físico a mayor velocidad que el crecimiento poblacional. Según el documento de ONU-Hábitat sobre el estado de las ciudades en América Latina [4] “Casi el 80% de su población vive actualmente en ciudades, una proporción superior incluso a la del grupo de países más desarrollados. Muchas de sus ciudades han conocido una transformación urbana traumática y a veces violenta por su celeridad, marcada por el deterioro del entorno y, sobre todo, por una profunda desigualdad social. El número de ciudades se ha multiplicado por seis en cincuenta años.”
El uso y ocupación del suelo se presenta con muy bajas densidades, un proceso de urbanización conducido al crecimiento periférico de la ciudad. Ecuador es un ejemplo de este comportamiento en el contexto latinoamericano y específicamente en la ciudad de Quito, se puede apreciar el aumento de su área metropolitana, un fuerte distanciamiento entre centralidades urbanas y áreas residenciales y se acentúan las contradicciones físicas y sociales. Se ha generado caos en la ciudad incentivado por la falta de planeación del crecimiento. En el siglo XXI, la tendencia dominante ha sido la reafirmación de una ciudad dual y desigual. (Figura 1)
Materiales y métodos
En este trabajo se muestra el proceso de enseñanza aprendizaje del urbanismo utilizado y se explicita como una experiencia exitosa, que maneja la relación del urbanismo como disciplina y sus instrumentos: la planeación y el diseño urbano, para analizar la ciudad, modificar su entorno en beneficio de sus pobladores y contribuir a su desarrollo más equitativo y eficiente.
El urbanismo y sus instrumentos
Según plantea Palacios Barra, es tradición original del urbanismo integrar la configuración de la forma urbana dentro del diseño espacial de la sociedad que planifica [5]. El siglo XXI reafirma y consolida el significado de la disciplina para atender los problemas de las ciudades, y la Nueva Agenda Urbana plantea de forma consensuada, cómo actuar para alcanzar el desarrollo sostenible. Por otro lado la base instrumental y operacional como recurso esencial para la acción- implementación de los planes, continúa teniendo problemas en expresar con claridad las acciones necesarias y pertinentes, desprejuiciadas de posturas y condicionamientos como instrumento transformador y gestor del desarrollo desde las manos de las autoridades, instituciones y la población.
Se requiere un adecuado proceso de enseñanza del urbanismo para que el arquitecto resultante sea capaz de diseñar espacios de intensidad y calidad que faciliten las relaciones sociales, se constituyan en áreas con fuerza mezcladora de grupos y comportamientos, y capacidad de estimular la identificación simbólica, la expresión y la integración de culturas.
Proceso de enseñanza aprendizaje
La enseñanza del urbanismo que lleva a cabo la Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU), de la UTE en Quito, ha permitido trabajar en el campo formativo de los futuros arquitectos y la transformación integral permanente de docentes y de estudiantes, en relación directa con las autoridades locales y la población residente de lugares específicos en el Ecuador. Se asumen temas actuales, se propicia la cohesión de criterios en la elaboración del análisis situacional del lugar y se generan propuestas atemperadas a las condiciones culturales e identidad de la comunidad.
Para establecer este proceso se revisaron otras experiencias llevadas a cabo en diferentes universidades de Quito y que poseen en común, el pertenecer a la Red de Estudios de Ciudad. En las mismas el énfasis se pone en la realización de proyectos urbanos en diferentes zonas de la ciudad, donde el diseño urbano asume el papel protagónico. Sin embargo la FAU-UTE se enfoca en la planeación y en la interrelación de escalas (plan general, plan parcial, plan especial y estudios de paisaje), lo que favorece positivamente el ámbito del aprendizaje.
El siguiente gráfico expresa el proceso seguido, basado en el vínculo de teoría y práctica para entender y planificar la ciudad del siglo XXI, qué enseñar y cómo dotar las capacidades necesarias para estrechar los vínculos entre la academia y los contextos reales. Dicho proceso coloca el análisis urbano al mismo nivel del valor alcanzado por el proyecto del objeto arquitectónico. (Figura 2)
El procedimiento se estructura en cuatro fases:
Fase 1. Fundamentación teórica y conceptual: se expresa a través de clases interactivas con aprendizajes en dos direcciones, soporte teórico que conduce a la reflexión. Se imparten los contenidos, los alcances, las escalas de intervención, y se exponen experiencias y casos de estudio.
Fase 2. Trabajo en talleres: se aplican los instrumentos de planeación y diseño en zonas de interés de la ciudad. Se conforman los grupos, donde los estudiantes asumen diferentes roles. Se implementa la metodología para la comprensión de la zona de estudio, se elaboran diagnósticos detallados, y la propuesta de desarrollo urbano a futuro.
Fase 3. Socialización y visibilidad: el análisis sale del taller para ser expuesto, entendido, aprobado por otros actores involucrados. Se realiza en contacto directo con las instituciones y las comunidades para retroalimentar el resultado y también se presenta en eventos y congresos afines al tema.
Fase 4. Proceso participativo: es una fase transversal que se manifiesta a lo largo de todo el proceso. Se generan los convenios entre la academia y las instituciones. Se establecen vínculos con instituciones para la recopilación de datos. Se realiza el trabajo con los habitantes para los levantamientos de información, y para conocer sus opiniones y aspiraciones.
La integración de actuaciones y niveles, permite aunar esfuerzos y saberes en pos de influir de forma positiva en el análisis del espacio urbano. El proceso se sustenta en aspectos de carácter técnico, administrativo- logístico y participativo de manera tal, que se involucren los diferentes sectores: la academia, la población, las instituciones y la autoridad local, todo ello encaminado a la obtención de múltiples visiones de los problemas en la escala urbana que puedan revertirse positivamente en soluciones consensuadas y coherentes con las condicionantes del contexto. El punto de partida es reconocer adecuadamente el lugar en que se desea intervenir, por ello la FAU-UTE ha actuado en diferentes contextos urbanos del Ecuador. En este sentido, se articulan los contenidos y alcances de las asignaturas con problemas y lugares reales. Hasta el momento se han generado importantes aportes en pueblos como: Salango, Saquisilí, Nanegalito y las parroquias urbanas de Calderón y San Antonio de Pichincha, dentro del Distrito Metropolitano de Quito.
El proceso seguido relaciona un sólido trabajo de participación y una metodología de planeación urbanística que evidencia la estructura investigativa. Posee una visión disciplinar basada en la comprensión del lugar, su comportamiento, y elementos culturales de mucha fuerza, como la cosmovisión andina y la interculturalidad. Es un proceso de aprendizaje multidireccional donde todas las partes se han fortalecido.
El trabajo grupal permite establecer un espacio de discusión y análisis para corregir colectivamente las fallas inevitables de comprensión o aplicación. En el grupo, todos los participantes son iguales, pueden poner en juego su saber, asumiendo una actitud interesada y activa que facilita el aprendizaje. Cada grupo se compone de cuatro a cinco estudiantes cuya selección se realiza por afinidad. Los integrantes se reparten el trabajo, analizan los temas, identifican las prioridades, y proponen soluciones, para luego elaborar láminas y maquetas y por último realizar la defensa oral. (Figuras 3 y 4)
El uso de las TIC. Las condiciones actuales favorecen la transferencia y asimilación de nuevas tecnologías y conocimientos técnicos, donde la Internet, los sistemas de información geográficos, los software libres, y el uso de datos publicados, facilitan los estudios y también la socialización de los resultados. Se aprende además a movilizar el apoyo gubernamental, un actor clave del desarrollo urbano sostenible, al demostrar el valor del estudio, la rigurosidad del análisis, así como la visión de futuro de la propuesta [6].
Los métodos participativos. La enseñanza de métodos tales como: talleres barriales, entrevistas, levantamiento de información, dinámicas de grupos, visualización y socialización de información, entre otros, ha sido muy importante para la obtención de resultados integrales que atañen directamente a las localidades y permiten lograr compromisos verdaderamente multidisciplinarios. Su aplicación convierte este proceso de enseñanza en algo Innovador, que expresa la importancia de la formación de los futuros arquitectos con una mentalidad que conciba el desarrollo de las ciudades y el medio ambiente como dos partes inseparables de un todo que es la sostenibilidad urbana. (Figuras 5 y 6)
Resultados
Durante los años 2015- 2017, la asignatura de Taller Integral ha formado a estudiantes y docentes, para asumir estudios urbanos desde diferentes escalas como: el desarrollo de uso y ocupación de suelo a futuro, el paisaje, y el diseño urbano de espacios públicos. Se han estrechado los lazos de trabajo participativo, multidisciplinario e interinstitucional con gobiernos descentralizados autónomos, juntas parroquiales, e instituciones relacionadas con el ordenamiento territorial. También se establece un vínculo de aprendizaje inter y proactivo entre estudiantes y pobladores, a través de actividades prácticas que permiten la comprensión de la realidad a partir de las propias experiencias, y la constatación de la existencia de problemas comunes, para desde su propia identidad y cultura, buscar soluciones a los problemas identificados.
La aplicación por tres años evidencia resultados tangibles y productos que son reconocidos por las instituciones competentes y la comunidad. Se pueden destacar:
Cambios en el pensamiento de los estudiantes y en la forma en que perciben el entorno urbano: Los estudiantes comprenden los contextos, sus singularidades y similitudes con otros, se hacen parte de la realidad de los lugares y reconocen dificultades existentes, encontrando los vacíos, e identificando las aspiraciones de los habitantes. Entienden el porqué de las formas de ocupación y utilización del suelo, los espacios aceptados, los espacios olvidados, no aprovechados; el funcionamiento de las centralidades, y los espacios públicos como elementos estructurantes de la ciudad.
El trabajo en talleres constituye un valioso ámbito de trabajo donde se perfilan los análisis y propuestas y a su vez defienden el trabajo realizado, se apoyan en una fundamentación conceptual, para demostrar que sus propuestas son sostenibles. Se utilizan múltiples herramientas; la representación en planos, las maquetas y presentaciones en 3D, y la expresión oral ajustados a tiempos, escalas y formatos. Es un momento clave del proceso donde se perfila el trabajo en grupos y se conjugan puntos de vistas para proponer la solución más pertinente. (Figura 7)
La Casa Abierta, evento al interior de la propia facultad, se constituye en un momento singular que le permite al estudiante mostrar su desempeño y compararse con otros niveles de la carrera. Se produce un aprendizaje colaborativo y comparativo que eleva el nivel competitivo del estudiante sin necesidad de asignar una nota en específico. Además es también un reconocimiento a los mejores trabajos y a los esfuerzos realizados durante un semestre. (Figura 8)
Socialización de los resultados y vínculos institucionales: La universidad y específicamente la facultad es reconocida por su trabajo en el ámbito urbano y trabaja en estrecho vínculo con el Instituto Metropolitano de Planeación Urbana, para apoyar la labor que se realiza en la definición de la Visión de Quito al 2040. Mediante el trabajo realizado con los estudiantes en esta asignatura, se abrió un espacio de participación en el evento de Hábitat III, una experiencia real y casi única de probar que trabajan según políticas y lineamientos globales y locales para alcanzar el desarrollo urbano sostenible. (Figuras 9a y 9b)
Conclusiones
Comprender la complejidad urbana requiere diseñar cada paso, transitar por ellos con meticulosidad y rigor para poder manejar escenarios de incertidumbre, trazar líneas de desarrollo que aseguren las dinámicas de crecimiento y funcionamiento urbanístico. Constituye un logro del proceso de enseñanza- aprendizaje de la FAU-UTE el trascender con su trabajo los límites físicos de la Universidad y lograr integrar los intereses de Instituciones, academia y población residente en un trabajo complejo, como contribución a la formación de los profesionales del futuro que garantizarán el desarrollo urbanístico, que requiere la ciudad del siglo XXI.
El enfoque del proceso de enseñanza enfatiza en el análisis basado en el diseño de factores determinantes de la urbanización actual, transformar lo existente mediante intervenciones sostenibles y estratégicas, definir prioridades en cuanto a problemas identificados y en la actuación para obtener resultados a corto plazo pero con visión de largo plazo.
El proceso de enseñanza aprendizaje implementado provee el conocimiento necesario para comprender el contexto de actuación, entender el hecho urbano como un todo y no la sumatoria de partes. Es importante identificar dentro de la visión holística del urbanismo, qué es local, qué lo diferencia de lo global, qué tienen en común, qué se puede replicar y qué no, cada entorno posee sus particularidades. Convierte al estudiante en observador crítico, analista responsable, un planificador con visión de largo plazo e implementación en el corto y mediano plazo, capaz de articular las escalas territorio-ciudad-lugar.
Referencias bibliográficas
[1] Cruz Cabrera M, Rocchio D, Freire L, Martínez JC, Porreca R, Jácome W. Hacer Ciudad. Calderón 2040. Quito: Universidad Tecnológica Equinoccial de Quito; 2016.
[2] Paneque Brizuela A. La ciudad, el mayor hecho cultural. Entrevista realizada a Mario Coyula Cowley. Granma. Viernes 17 de noviembre de 2000.
[3] Cruz Cabrera M. El desafío de hacer ciudad en el siglo XXI. EIDOS. 2016;(9):4-14.
[4] ONU-Hábitat. Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos. Estado de las ciudades de América Latina y El Caribe. Rumbo a una nueva transición urbana. ONU Hábitat; 2012. [consultado 12 de diciembre 2017]. Disponible en: Disponible en: https://www.zaragoza.es/contenidos/medioambiente/onu//newsletter12/887_spa.pdf.
[5] Palacios Barra A. Un nuevo constructo en la enseñanza del urbanismo. Urbano. 2014;17(29):11-20.
[6] Cruz Cabrera M. Adecuación del planeamiento físico espacial ante los cambios demográficos en ciudades principales [Doctoral]. Santa Clara: Universidad Central Marta Abreu de Las Villas; 2011.
Notas
Notas de autor