Research Article

¿INTEGRACIÓN O REMESAS? DETERMINANTES DE LAS TRANSFERENCIAS MONETARIAS DE LOS MIGRANTES LATINOAMERICANOS EN ESPAÑA

INTEGRATION OR REMITTANCES? DETERMINANTS OF MONETARY TRANSFERS OF LATIN AMERICAN MIGRANTS IN SPAIN

Rafael Grande
Universidad de Málaga, España

¿INTEGRACIÓN O REMESAS? DETERMINANTES DE LAS TRANSFERENCIAS MONETARIAS DE LOS MIGRANTES LATINOAMERICANOS EN ESPAÑA

Desarrollo y Sociedad, núm. 80, pp. 155-187, 2018

Universidad de Los Andes

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Recepción: 20 Junio 2017

Aprobación: 16 Noviembre 2017

Resumen: El objetivo de este artículo es examinar qué factores determinan la cantidad de remesas enviadas por los migrantes latinoamericanos y caribeños en España. Los microdatos de la Encuesta Nacional de Inmigrantes del 2007 se utilizan para estimar modelos de regresión lineal y modelos censurados por el acto de remitir para analizar conjuntamente la probabilidad y la cantidad de dinero transferida por los migrantes a sus países de origen. Los resultados muestran, primero, que la cantidad de remesas enviadas está determinada por el grado de asentamiento familiar y por el éxito en la inserción laboral, lo que se refleja también en la mayor cantidad enviada a medida que aumentan los años de residencia tras la llegada. En segundo término, se encuentra que las remesas están influidas en gran medida por la existencia de acuerdos con los familiares en el país de origen o el interés del migrante de cara a preparar un posible retorno.

Palabras clave: remesas, integración social, migración internacional, familia, mercado de trabajo.

Abstract: The aim of this paper is to examine what factors determine the level of remittances sent by Latin American and Caribbean immigrants in Spain. Microdata from the 2007 Spanish National Survey on Immigration are used to estimate linear regression models and censored models by the act of remittance to analyse both the probability of remitting and the amount of the money sent to the home country. The results show, first, that the level of remittances is determined by family settlements and labor market integration. This is also shown in the higher level sent when increasing the years of residence in the host country. Second, remittances are determined by the existence of agreements with the family at origin or self-interest with the proposed to prepare the possible return.

Keywords: remittances, social integration, international migration, family, labor market.

INTRODUCCIÓN

Frente a otros aspectos de la integración de los inmigrantes en la sociedad de destino, el papel que desempeña el envío de remesas en las trayectorias de los migrantes ha sido abordado en menor medida por la literatura, especialmente, para el caso español. El envío de dinero de los migrantes a sus familiares en origen es un buen indicador a la hora de estudiar el dilema entre la integración en el país de destino o, por el contrario, el retorno, en la medida que las remesas definen los proyectos migratorios (De Haas y Fokkema, 2011; Grande y Del Rey, 2012). El objetivo de este artículo es analizar los determinantes de la cantidad o cuantía de esas transferencias monetarias de los migrantes latinoamericanos y caribeños en España utilizando la Encuesta Nacional de Inmigrantes del 2007 (ENI-2007) elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La cantidad de remesas enviadas hace referencia a la intensidad de los vínculos monetarios, por lo que se pretende conocer el grado de implicación transnacional y categorizar la transferencia desde el punto de vista del proyecto migratorio, puesto que más o menos recursos pueden suponer la construcción o no de un “proyecto” de retorno y definir el compromiso con la familia de origen, a la vez que es un indicador de las pautas de integración familiar y laboral en destino.

Precisamente, una de las consecuencias económicas más notables de la reciente inmigración en España durante la conocida como “década prodigiosa” fue el incremento vertiginoso de las remesas enviadas por los migrantes a sus países de procedencia, como se aprecia en la figura 1. Los pagos en concepto de remesas enviadas al exterior desde España aumentaron en paralelo al incremento de la población inmigrante, siendo el propio stock de inmigrantes un primer factor explicativo de la evolución de las remesas (Ayala-Cañón y Pérez-Barrasa, 2010; Freund y Spatafora, 2008). Las transferencias de renta al exterior en concepto de remesas de trabajadores pasaron de 634 millones de euros en 1998, a un máximo de 8.448 millones de euros en el 2007 a precios corrientes, según los datos de la balanza de pagos española. Esta relación directa entre stock y remesas se conforma al observar la evolución de las remesas en los principales países latinoamericanos destino de las remesas enviadas desde España (figura 1). La fortaleza del euro incentivó también el envío de remesas por parte de los inmigrantes al verse favorecidos por el tipo de cambio al ocasionar un menor coste de envío desde los países del sur de Europa (Comisión Europea, 2006). Desde la literatura sobre migraciones y desarrollo (Portes, 2008) se ha subrayado el importante impacto de las remesas monetarias en las reservas internacionales y las balanzas de pagos de los países de origen de la migración, en el caso latinoamericano este efecto es especialmente intenso en algunos países de Centroamérica y El Caribe.

A partir del 2008, como consecuencia del estallido de la crisis económica en España, la tendencia creciente de las remesas de trabajadores se truncó. Por un lado, la reducción de los ingresos y la falta de oportunidades de empleo (Esteban, 2011; Grande, Paniagua y Del Rey, 2016) provocó que los inmigrantes se plantearan tanto la permanencia en el país destino, como la posibilidad de seguir remitiendo fondos o al menos la necesidad de reducir las cantidades enviadas. Por otro lado, la migración de retorno no se produjo de forma masiva, pero la disminución paulatina del stock de inmigrantes y el fin del efecto llegada (Cerrutti y Maguid, 2016) provocaron una disminución de las remesas enviadas por los inmigrantes. Las remesas de trabajadores al exterior desde España disminuyeron un 28% en el periodo 2007-2013, llegando en el 2013 a ser de nuevo superiores las remesas recibidas que las enviadas según datos del Banco de España. La figura 1 muestra también como la leve recuperación que experimenta la economía española desde el 2014 se traduce de nuevo en un ligero aumento de las transferencias de remesas al exterior. En el caso de los principales países latinoamericanos de destino de las remesas desde España (Colombia, Ecuador y Bolivia) el mayor movimiento de retorno y, por ende, la mayor disminución del número de inmigrantes en España provocó un descenso muy acusado del dinero transferido por los inmigrantes a partir del 2008. La mayor disminución del stock de los inmigrantes originarios de estos países también explica el menor efecto de la recuperación desde el 2014. En cambio, el número de dominicanos residiendo en España no descendió e incluso ha continuado aumentando ligeramente lo que se ha traducido en un menor descenso de las remesas durante la fase de recesión (figura 1).

Evolución de las
remesas enviadas desde España al exterior 1998-2016, total (eje derecho) y
principales países de destino de América Latina y el Caribe (eje izquierdo)
Figura 1
Evolución de las remesas enviadas desde España al exterior 1998-2016, total (eje derecho) y principales países de destino de América Latina y el Caribe (eje izquierdo)
elaboración propia a partir de estadísticas de balanza de pagos del Banco de España.

Para investigar los determinantes de la cantidad de remesas enviadas se analiza el comportamiento de los latinoamericanos y caribeños llegados a España entre 1990 y el 2007. Acotar en este sentido el objeto de estudio presenta una serie de ventajas. En primer lugar, delimitar el periodo a los llegados entre 1990 y el 2007, permitir conocer el efecto de un mismo ciclo económico expansivo y un mismo ciclo migratorio en España caracterizado por un “boom inmigratorio”. En segundo lugar, contar con los datos de la Encuesta Nacional de Inmigrantes del 2007 (ENI-2007) permite analizar el comportamiento transnacional de los inmigrantes sin el efecto distorsionador que ha ocasionado la profunda crisis económica en España que transfiguró por completo el contexto de recepción. En tercer lugar, el colectivo latinoamericano y caribeño es un homogéneo en relación a su situación legal, políticas migratorias y comportamiento cultural; pero a la vez es un grupo migratorio muy heterogéneo según países de origen, oleadas migratorias, características sociodemográficas y familiares, etc., lo que hace especialmente atractivo su estudio comparando regiones de origen dentro de América Latina y el Caribe.

Este planteamiento resulta novedoso en la literatura para el caso español, que ha abordado en menor medida el estudio de las remesas que otros aspectos de los fenómenos migratorios y que apenas ha analizado las transferencias monetarias poniendo el foco en su intensidad o cuantía (véase Grande y del Rey, 2012; Izaguirre, González-Ferrer y Font, 2016). Además, las singularidades del caso español permiten aportar a la literatura internacional evidencia sobre los determinantes de las remesas, con especial énfasis en las variables relativas a las relaciones familiares y la inserción laboral de los inmigrantes, para un caso de estudio de reciente inmigración y en un momento previo al estallido de la crisis económica.

Este artículo se estructura en cinco apartados. Tras esta introducción a modo de planteamiento del objeto de estudio, en un segundo apartado se revisa la literatura sobre los determinantes del envío de remesas y su relación con los procesos de integración de los inmigrantes. La tercera sección se dedica a describir la base de datos y la metodología utilizada en la investigación. El cuarto apartado presenta los resultados, a partir de los modelos de regresión, de los determinantes de la cantidad de remesas enviadas por los latinoamericanos en España. Como de costumbre, la última sección resume los principales hallazgos y las conclusiones del estudio.

I. EL PAPEL DE LAS REMESAS

Las remesas han sido consideradas un factor fundamental en el análisis de la previsible integración o no de los migrantes en la sociedad de destino. Esto se debe, por un lado, a que las transferencias monetarias representan un elemento esencial del conjunto de relaciones entre el migrante y la familia en origen al simbolizar lazos sociales de solidaridad, obligación o reciprocidad. Por otro lado, el envío y el nivel de las remesas son un indicador del modelo de integración, la posible reagrupación familiar, la disponibilidad de recursos y las decisiones ocupacionales de los migrantes a medida que se alarga el tiempo de estancia en el destino. En otras palabras, una integración exitosa o fallida del migrante acabará condicionando los vínculos con el lugar de origen y la transferencia de remesas. Este papel de las remesas tiene diferentes aristas.

La intensidad del envío de remesas por parte de los migrantes tiene mucho que ver con la permanencia de las relaciones entre el migrante y la familia en función de la mejor o peor integración en la sociedad de destino. En este sentido, en la literatura, desde la teoría neoclásica de la migración y la teoría de la asimilación se demuestra que el individuo tiende a maximizar su bienestar y el de su familia, por lo que aquellos inmigrantes que no tienen intención de retornar a corto plazo y con una integración exitosa reducen sus motivaciones para sostener la intensidad de los vínculos económicos con sus familiares en el país de origen, debido a los costes que estas relaciones suponen. En consecuencia, la intensidad de los nexos transnacionales disminuyen a medida que aumenta el tiempo de residencia en el país de destino (Banerjee, 1984; Funkhouser, 1995; Menjivar, Da Vanzo, Greenwel y Valdez, 1998; Portes, Parker y Cobas, 1980), que se obtiene la residencia legal o nacionalidad del país de acogida (DeSipo, 2000), o se descarta, al menos en el corto plazo, el retorno (De Haas y Fokkema, 2011).

Desde la perspectiva transnacional de la migración se ha puesto en duda esa correlación negativa entre integración y remesas, argumentando que en ocasiones los vínculos transnacionales se ven favorecidos por una mejor integración, debido a que inmigrantes perfectamente integrados y asentados en el país de destino pueden disponer de la capacidad económica, social y personal para mantener las relaciones transnacionales (De Haas y Plug, 2006; De Haas y Fokkema, 2011; Guarnizo, 2003; Portes, Haller y Guarnizo, 2002; Van Dalen, Groenewold y Fokkema, 2005). Además, otros estudios argumentan que orientaciones y actividades transnacionales aparecen asociadas positivamente con la integración al proporcionar oportunidades para la iniciativa empresarial y la movilidad económica favoreciendo el envío de remesas (Logan, Alba y McNulty, 1994; Snel, Engbersen y Leerkes, 2006).

Existe un consenso en la literatura en que las remesas constituyen un elemento esencial en la configuración de los proyectos migratorios familiares, pero el mantenimiento de los vínculos y la intensidad de los envíos requieren una fuerte relación entre el migrante y la familia que permita mantener el contacto y los intercambios a pesar de la ausencia prolongada. Como defiende la Nueva Economía de las Migraciones Laborales (NEML) la decisión de migrar es, por lo general, resultado de las condiciones familiares donde el envío de remesas desempeña un papel fundamental (Stark, 1991; Taylor, 1999). En este sentido, la existencia de acuerdos con familiares en origen que configuran “contratos explícitos” con “obligaciones mutuas” (Cox, 1987; Dreby, 2007; Frankenberg, Lillard y Willis, 2002; Sana y Massey, 2005; Rindfuss, Piotrowski, Entwisle, Edmeades y Faust, 2012) o la intención de retornar vinculada al autointerés de cara a la preparación de su vuelta (Amuedo-Dorantes y Pozo 2006b; Cai, 2003; Dustmann y Mestres, 2010; Massey, Durand y Goldring, 1994) explican la propensión a remitir y la intensidad de esos vínculos económicos.

A partir de ese marco analítico y la revisión de literatura se han definido distintas hipótesis de trabajo cuya contrastación para el caso del envío de remesas de los inmigrantes latinoamericanos en España resulta de especial interés.

Desde la perspectiva de género la creciente importancia de la migración femenina ha conformado familias divididas o transnacionales, el fenómeno de la maternidad a distancia y “cadenas globales de cuidado”, que a su vez van estableciendo un sistema complejo dentro de las familias a las que se transfieren cuidados y remesas. Las cadenas globales de cuidado hacen referencia a la transferencia y circulación transnacional de trabajo doméstico (Hochschild, 2000; Orozco, 2007). Por un lado, en sociedades posindustriales la incorporación de la mujer al mercado de trabajo y el envejecimiento de la población han provocado una necesidad de mano de obra en el servicio de cuidados, que ocupan en mayor medida las trabajadoras inmigrantes (Bettio, Simonazzi y Villa, 2006; Fudge, 2012). Por el otro lado, las remesas son la clave para que las mujeres migrantes mantengan los cuidados y los vínculos afectivos con la familia en el lugar de procedencia, normalmente a cargo de otros familiares a cambio de esas transferencias (Cerrutti y Maguid, 2010; Schmalzbauer, 2004).

En este sentido, numerosos estudios subrayan la particularidad de las migraciones femeninas por su mayor componente familiar que explica la mayor propensión y más alta frecuencia del envío de remesas (Amuedo-Dorantes y Pozo, 2006a; Funkhouser, 1995; Holst y Schrooten, 2006; Lauby y Stark, 1988; Lucas y Stark, 1985; Singh, Robertson y Cabraal, 2012; Taylor, 1987), también corroborado para el caso de la inmigración en España (Grande y Del Rey, 2012). Sin embargo, las diferencias por sexo en la inserción en el mercado laboral de destino y la desigualdad en términos salariales, como se ha demostrado en el caso de los inmigrantes en España (Antón, Muñoz de Bustillo y Carrera, 2012), hacen esperar que las mujeres, aun siendo más propensas a enviar, trasfieran menores cantidades que los hombres.

En segundo lugar, la edad de los migrantes a su llegada a la sociedad de destino condiciona su proyecto migratorio al hacer referencia a particulares situaciones personales y a diferentes etapas del ciclo de vida familiar, con distintos compromisos y obligaciones que pueden determinar el envío y la intensidad de la transferencia de remesas. En general, cuanto mayor es la edad más altos son los compromisos familiares de origen y, por tanto, mayor la propensión a enviar remesas y la intensidad de las transferencias (Amuedo-Dorantes y Pozo, 2006a; Durand, Parrado y Massey, 1996; Holst y Schrooten, 2006; Merkle y Zimmerman, 1992a y 1992b;). También, la edad determina en gran medida la inserción laboral y la movilidad ocupacional en la sociedad de destino, en sintonía con la teoría de la segmentación del mercado de trabajo de destino, condicionando la cantidad de dinero disponible para el envío a los familiares en origen.

En tercer lugar, el tiempo de estancia en destino es una de las variables más discutidas en la literatura sobre la integración y los determinantes de las remesas. Frente a los estudios vinculados con las teorías de la asimilación, que encuentran una disminución del envío e intensidad de las remesas a medida que aumenta el tiempo de residencia (Banco Mundial, 2006; Banerjee, 1984; Funkhouser, 1995; Menjivar et al., 1998), otros autores señalan la existencia de una relación no lineal basada en un aumento de las transferencias y la cantidad enviada durante los primeros años tras la migración que luego tiende a disminuir en la medida en que se saldan las posibles deudas contraídas y se cumplen los objetivos inicialmente fijados en términos familiares (Amuedo-Donantes y Pozo, 2006a; Brière et al., 1997; Cai, 2003; Craciun, 2006; De Haas y Plug, 2006; Lucas y Stark, 1985). En este sentido, la adquisición de la nacionalidad o la regularización del estatus legal, vinculado al tiempo de estancia y al modelo de integración de la sociedad de acogida, tendrían un efecto negativo sobre el envío de remesas (DeSipo, 2000). Dado lo reciente del fenómeno migratorio en España, comprobar la tendencia de las remesas tras los primeros años después de la llegada resulta un aspecto especialmente novedoso

En cuarto lugar, la situación familiar, y en concreto el nivel de asentamiento familiar en el destino, es un elemento esencial para tener en cuenta en la disyuntiva planteada entre remesas e integración. Trabajos recientes subrayan la importancia del ciclo de vida familiar como determinante del envío de remesas, en la medida que aparecen nuevas obligaciones familiares en el destino, se dan procesos de reagrupación y cambian las circunstancias en la familia de origen decreciendo el envío de remesas (Korinek, Entwisle y Jampaklay, 2005; Luke, 2010; Rindfuss et al., 2012). Así, se esperarían más remesas y mayor intensidad entre los casados, debido a sus mayores cargas familiares (Durand et al., 1996; Holst y Schrooten, 2006), y entre los que han dejado hijos menores normalmente al cuidado de familiares en el país de origen a cambio de remesas (Cerrutti y Maguid, 2010; Massey y Basem, 1992; Menjivar et al., 1998; Schmalzbauer, 2004). Así se establecen entre los migrantes y sus familiares en origen “acuerdos de coseguro” (Sana y Massey, 2005; Taylor, 1999), “contratos de préstamos implícitos e informales” o compromisos adquiridos generalmente con la propia familia que se satisfacen vía remesas tras la migración (Durand et al., 1996; Gubert, 2002; Poirine, 1997)

Por último, la integración laboral en el mercado de trabajo de destino representa un determinante esencial del envío de remesas, en particular, para los movimientos migratorios de carácter económico. Por un lado, se espera que los migrantes económicos tengan una mayor probabilidad de enviar remesas y en mayores cantidades que los migrantes que llegan por reagrupación familiar u otros motivos, en parte asociados esos motivos a posibles planes de retorno o la existencia de bienes o préstamos contraídos en origen. Por otro lado, la capacidad de mantener transferencias monetarias depende en gran medida de la situación laboral y el nivel de ingresos, aunque de nuevo una mejor inserción laboral puede debilitar los vínculos con origen. En la mayoría de las investigaciones, el nivel de ingresos no tiene un efecto significativo sobre la probabilidad de enviar o no remesas, aunque ciertos estudios encuentran una relación positiva (Banerjee, 1984; Holst y Schrooten, 2006; Merkle y Zimmerman, 1992a y 1992b). Al analizar la cantidad enviada sí que hay un mayor consenso dado que mayores ingresos están correlacionados con el envío de mayores cantidades de dinero (Banerjee, 1984; Craciun 2006; Durand et al., 1996; Funkhouser, 1995; Germenji, Beka y Sarris, 2001; Hoddinott, 1994; Lianos y Cavounidis, 2010; Lucas y Stark, 1985). En el caso de España existe un consenso en la literatura sobre la fuerte segmentación y etnoestratificación del mercado de trabajo que sitúa a los inmigrantes mayoritariamente en empleos de bajas cualificaciones y bajos salarios, y con importantes diferencias por sexo: los hombres en el sector de la construcción y las mujeres en el sector servicios y de cuidados (Fernández-Macías, Grande, Del Rey y Antón, 2015; Stanek y Veira, 2012; Vidal y Miret, 2012). La alta demanda de empleo en esos nichos durante el boom económico previo a la crisis del 2008 y el nivel de ingresos en comparación con los lugares de origen les permitió a los inmigrantes mantener los vínculos monetarios con sus familias en origen.

II. FUENTE DE DATOS Y METODOLOGÍA

El análisis planteado utiliza los microdatos de la ENI-2007 del INE con el objetivo de caracterizar la población migrante que vive en España. La muestra de dicha encuesta es representativa para todos los residentes en España que nacieron en otros países, de 16 y más años de edad, y que viven en España en el momento de la encuesta (noviembre del 2006-febrero del 2007). La ENI-2007 es todavía hoy la fuente más completa y rica para estudiar a la población inmigrante en España por la gran cantidad de información recogida y su carácter retrospectivo (Reher y Requena, 2009). Respecto a sus limitaciones, la encuesta presenta algunas carencias de información que ha sido considerada relevante en la literatura sobre remesas: el origen rural-urbano de los migrantes, la composición de los hogares receptores de remesas o la finalidad del dinero que se envía. Además, solo se preguntó por la cantidad de dinero enviada el último año, sin cuestionar con retrospectiva el envío de remesas en un momento inicial tras la llegada a España, lo que impide adoptar una perspectiva longitudinal.

La ENI-2007 cuenta con aproximadamente 15.500 casos. Dado el objetivo de esta investigación, se seleccionó una submuestra de 5.215 observaciones correspondientes a los migrantes de origen latinoamericano y caribeño llegados a España entre los años 1990 y el 2007. Incluir el año de llegada entre las variables explicativas ayuda a controlar las diferencias en las características no observables en las diferentes cohortes. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la limitación temporal de la muestra a los migrantes que llegaron dentro de un corto periodo de tiempo (1990-2007) y el hecho de que la mayoría de los migrantes se trasladaron en busca de mejores oportunidades económicas (una vez concluidos a partir de los años noventa los flujos de retorno a España y en oposición, por ejemplo, a los refugiados, con mayor presencia en otros países) debe minimizar este problema; de hecho, algunos estudios recientes no encuentran diferencias muy significativas entre estas cohortes en la experiencia reciente de la migración española (Fernández y Ortega, 2008; Muñoz de Bustillo y Antón, 2010). Sin embargo, por supuesto, la naturaleza de la sección transversal de la muestra no permite el control total de la heterogeneidad individual no observada.

Para conocer los determinantes de la cantidad de dinero que envían los inmigrantes latinoamericanos y caribeños en España a sus países de origen se explota la variable “¿qué cantidad total ha enviado en el último año?”. La elección del modelo de regresión correcto depende de si se entiende que la decisión de remitir es un proceso secuencial de dos etapas independientes o un proceso de una etapa simultánea (Banerjee, 1984); es decir, se estaría cometiendo un sesgo de selección que daría lugar a resultados sesgados e inconsistentes si se analiza la cantidad de dinero enviado sin tener en cuenta a los inmigrantes que no transfieren remesas. Ante este problema surgen dos opciones alternativas.

La primera consiste en entender el envío de remesas como un proceso de dos etapas: por un lado, la decisión de enviar remesas mediante un modelo de regresión logística binomial y, por otro lado, la cantidad de remitir utilizando el método de mínimos cuadrados ordinarios (MCO). La ventaja de este enfoque es que permite que una variable afecte de forma diferente la decisión de remitir y la cantidad de remesas (Banerjee, 1984; Hoddinott, 1992). Una segunda alternativa presupone que la decisión de enviar y la cantidad que se envía se toman conjuntamente, por lo que se diseña un modelo en una sola etapa, dado que es difícil que la decisión de enviar o no sea independiente de la cantidad enviada y es complicado indicar cuáles son las variables que influyen en una decisión y no en la otra (Amuedo-Dorantes y Pozo, 2006a; Hoddinott, 1994).

Esta segunda opción es la que se sigue en este artículo. Se han tenido en cuenta dos aspectos para construir el modelo. Por un lado, el número de no respuestas y de casos perdidos en la variable dependiente. El 21,3% (623 casos) de la submuestra seleccionada afirma enviar remesas pero no han respondido a la pregunta sobre la cantidad transferida. Hay un consenso sobre que se está ante una tasa elevada de no respuesta cuando se supera un tercio del total de la muestra, por lo que, en este caso, se puede afirmar que la pérdida de datos es moderada.

Por otro lado, el mencionado problema del sesgo muestra. Los primeros trabajos sobre la cantidad de remesas enviadas utilizaron la estimación por MCO (Johnson y Whitelaw, 1974; Lucas y Stark, 1985) cometiendo un problema de sesgo de selección muestral dado que se omite una fracción importante de los inmigrantes que no remiten. En este artículo se utiliza la pregunta de la ENI-2007 “¿envía dinero fuera de España?”, construyendo una variable dicotómica según si envían o no remesas. Ahora, la variable dependiente es una mezcla con una parte discreta (no envía remesas) y continua (cantidad de remesas enviadas durante el último año), por lo tanto, censurada en cero por el acto de remitir.

Así, en esta investigación se elabora un modelo Tobit que permite dar cuenta de la naturaleza discreta y continua de la distribución, y que ha sido usado en otros trabajos para analizar el envío de remesas (Brown, 1997; Hagen-Zanker y Siegel, 2007; Merkle y Zimmermann, 1992a; Schrieder y Knerr, 2000). En el modelo Tobit, que se estima por el método de máxima verosimilitud, existe una dependencia total entre las variables que determinan las dos partes de la decisión de las remesas. Es decir, cada variable independiente (regresor) tiene el mismo efecto en la probabilidad de que un migrante sea remitente y en la cantidad de remesas enviadas, identificándose así un conjunto de variables que son las más significativas para influir en el envío de remesas como decisión conjunta.

El modelo de regresión Tobit es definido como:

Donde Yi es la variable dependiente observada, en este caso, el envío de remesas; Yi* es la variable latente; Xi es el vector de factores que determinan el envío de remesas y su cantidad; ui es el residual que se distribuyen de forma independiente.

Este método es, por tanto, demasiado restrictivo en la medida en que obliga a los regresores a tener un mismo efecto tanto en la decisión de enviar como en el nivel de remesas transferido. Amuedo-Dorantes y Pozo (2006a) proponen comparar los resultados de los modelos censurados con los efectos parciales sobre cada parte de la decisión para poder comparar el signo y magnitud de cada variable. En este artículo, el modelo Tobit, censurado por el acto de remitir, se compara con los resultados de una regresión lineal para la cantidad de dinero enviado. El modelo de regresión lineal por el método de mínimos cuadrados ordinarios es definido como:

En los modelos se introducen, por un lado, variables independientes cuantitativas (año de llegada, edad a la llegada e Índice de Desarrollo Humano del departamento de origen de los migrantes); y, por otro lado, variables explicativas categóricas transformándolas previamente en variables dummies con valores 1 y 0, haciendo que los coeficientes de la regresión adopten un significado interpretable (región de origen, motivos de la migración, nivel educativo, nacionalidad, ingresos, estado civil. etc.)[1]. La interpretación de los resultados se hace mediante los coeficientes y el error estándar robusto a la heterocedasticidad. Se han construido por separado modelos para hombres y mujeres, pero además se elabora un modelo conjunto para poder interpretar el coeficiente asociado al sexo, que se presenta con un mismo coeficiente con signo inverso dependiendo de si se toma como referencia a las mujeres o a los hombres para cada uno de los modelos por sexo.

III. FACTORES DETERMINANTES DEL ENVÍO DE REMESAS

Tal como se apuntaba en la revisión teórica, la motivación económica de su traslado y, sobre todo, la importancia de los nexos económicos entre los migrantes y sus familiares de origen explican la mayor propensión y la mayor cantidad de dinero enviada por parte de los latinoamericanos en España frente a otros colectivos de inmigrantes, y también permite comprender las importantes diferencias entre las regiones de origen dentro de América Latina y el Caribe (cuadro 1). Un 56,1% de los latinoamericanos y caribeños en España envían remesas, con 2.127 € de media durante el último año; frente al 39,4% que sí envían remesas entre el resto de inmigrantes. Destacan los andinos cuyos proyectos migratorios económicos con el objetivo de diversificar los ingresos familiares y sus intensos vínculos familiares con origen, siguiendo la perspectiva de la NEML, aparecen como los inmigrantes que más dinero transfieren al exterior (65,5% sí envían) y que envía mayor cantidad de dinero anualmente (2.355 €).

Cuadro 1
Población inmigrante llegada entre 1990 y el 2007 que sí envía remesas y cantidad media enviada, según sexo y región de origen
Población
inmigrante llegada entre 1990 y el 2007 que sí envía remesas y cantidad media
enviada, según sexo y región de origen
elaboración propia con base en datos de ENI 2007

Sin embargo, dentro del colectivo latinoamericano se observan importantes diferencias según sexo y región de origen. Llama la atención el comportamiento de las mujeres latinoamericanas que, contrariamente a lo que sucede con el resto de inmigrantes y como se apunta desde la perspectiva de género, tienen un mayor porcentaje de envío de remesas, pero con cantidades inferiores, tendencia que se mantiene en todos los colectivos latinoamericanos según la región de origen. Esto pone de relieve la importancia de las mujeres latinoamericanas como actores principales de los proyectos migratorios debido a su mayor compromiso con su familia de origen. Por su parte, la cantidad enviada refleja la brecha de ingresos por género y una “triple discriminación” que sufren las mujeres en el mercado de trabajo de destino (Parella, 2003).

Los cuadros 2 y 3 comparan, para hombres y mujeres respectivamente, los resultados del análisis conjunto para la probabilidad de enviar remesas y la cantidad enviada (Tobit) con los de la regresión de la cantidad enviada por MCO sólo para los que sí envían remesas. Los coeficientes muestran la diferencia de cada variable dummy respecto a la categoría de referencia. Por ejemplo, en la regresión por MCO entre los que sí envían remesas, los hombres procedentes del resto de Sudamérica tienen un coeficiente negativo, porque al controlar por el resto de factores, la cantidad enviada anualmente es 753,8 € inferior a la que envían los inmigrantes andinos (referencia). Para las variables continuas, los coeficientes muestran los cambios por unidad, por ejemplo, el año de llegada tiene un coeficiente negativo significativamente distinto de cero, es decir, por cada año más tarde en la llegada a España (un año menos de residencia) los hombres envían 60 € menos y las mujeres 45 € menos. En comparación, el modelo Tobit tiene en cuenta también a los que no envían remesas (casos censurados). Los coeficientes de ambos modelos permiten conocer el efecto de las variables explicativas sobre la cantidad enviada, considerando a los inmigrantes que no envían remesas, o lo que es lo mismo, sin cometer un sesgo de selección. Por ejemplo, las razones económicas de la migración no tienen un efecto significativo para los hombres cuando se tiene en cuenta solo a los que envían; sin embargo, en el modelo Tobit los inmigrantes varones por motivos económicos transfieren significativamente una mayor cantidad que los que tienen razones no económicas.

Pese al mayor compromiso familiar de las mujeres reflejado en su mayor probabilidad de enviar remesas, como han demostrado trabajos previos para el caso español (Grande y Del Rey, 2012), al analizar la cantidad de dinero enviada durante el último año, las diferencias por sexo no son tan significativas. Al analizar solo a los que sí envían remesas (MCO), controlando el resto de variables, los hombres envían una mayor cantidad que las mujeres, aunque con débil significatividad. Este hallazgo, coherente con la literatura revisada, se explica por los menores ingresos y la mayor segregación ocupacional de las mujeres en el mercado laboral, por lo que disponen de menos recursos que transferir a sus familiares en origen. No obstante, ese efecto es débil y desaparece al incluir a los que no envían remesas (Tobit), modelo en el que ser mujer influye positiva y significativamente en enviar una mayor cantidad de dinero, confirmando en la línea planteada que el mayor compromiso familiar de las mujeres hace que, en conjunto, sus transferencias monetarias sean más intensas, aun cuando se encuentran en una situación de desventaja en el mercado laboral de destino. Además, posteriormente, debido al fuerte impacto de la crisis económica y los progresivos procesos de reagrupación familiar el envío de remesas y la intensidad de las transferencias monetarias ha ido semejándose cada vez más entre los hombres y mujeres latinoamericanos en España (Izaguirre et al., 2016). Pese a ello, conviene resaltar el papel de las mujeres que resulta de gran importancia en el mantenimiento de los vínculos transnacionales, como evidencia novedosa que arroja el caso estudiado en el presente artículo, en consonancia con estudios cualitativos previos (Lacomba y Sanz, 2013; Parella y Cavalcanti, 2006).

Precisamente, junto con la importancia de las diferencias de género, los resultados muestran la relevancia de los vínculos familiares en origen y en destino para comprender los determinantes de las remesas, confirmando para el caso de los latinoamericanos en España lo apuntado en la literatura. Por un lado, la existencia de “acuerdos explícitos”, como por ejemplo la devolución de préstamos para financiar el viaje, se traduce en una mayor cantidad de remesas enviadas, aunque solo resulta significativa para los hombres. Por otro lado, el autointerés y los vínculos con la sociedad de origen también resultan significativos para conocer los determinantes de la cantidad remesada. Tener propiedades en origen supone para ambos sexos enviar una mayor cantidad de remesas monetarias con un efecto muy significativo. Se puede interpretar como la existencia de acuerdos recíprocos u obligaciones mutuas con los familiares en origen al cuidado de las propiedades o que habitan en la casa del migrante a cargo de familiares dependientes requiriendo una mayor intensidad de los vínculos monetarios. La intención de retornar conlleva también una mayor cantidad de dinero enviada. Esto se debe al autointerés para facilitar la vuelta al lugar de origen, siendo un efecto significativamente más fuerte entre los hombres que entre las mujeres.

Cuadro 2
Determinantes de la cantidad de remesas enviadas. Hombres latinoamericanos y caribeños llegados entre 1990 y el 2007
Determinantes de
la cantidad de remesas enviadas. Hombres latinoamericanos y caribeños llegados
entre 1990 y el 2007
elaboración propia con base en datos de ENI 2007. (a) Variables de control: nivel de estudios, Índice de Desarrollo Humano del PNUD del departamento o provincia de nacimiento de los migrantes y tipo de unión (endógama o mixta).

(b) Corresponden a un modelo completo que incluye hombres y mujeres que no se muestra en los resultados pero que permite conocer el efecto de la variable sexo.

Cuadro 3
Determinantes de la cantidad de remesas enviadas. Mujeres latinoamericanas y caribeñas llegadas entre 1990 y el 2007
Determinantes de
la cantidad de remesas enviadas. Mujeres latinoamericanas y caribeñas llegadas
entre 1990 y el 2007
elaboración propia con base en datos de ENI 2007. (a) Variables de control: nivel de estudios, Índice de Desarrollo Humano del PNUD del departamento o provincia de nacimiento de los migrantes y tipo de unión (endógama o mixta).

(b) Corresponden a un modelo completo que incluye hombres y mujeres que no se muestra en los resultados pero que permite conocer el efecto de la variable sexo.

Como se expuso, la literatura enfatiza la existencia de “acuerdos de coseguro” o “contratos explícitos” entre el migrante y la familia en origen para explicar la cantidad de remesas transferidas, lo cual se revalida al observar el efecto de tener familiares dependientes que no han sido reagrupados. No convivir con hijos menores de edad supone significativamente una mayor cantidad de remesas enviadas con respecto a los migrantes que no tienen hijos, diferencia aún mayor entre las mujeres (tener hijos menores en origen supone enviar 1.241 € más) que para los hombres (765 € más). Se confirma que el mantenimiento de “acuerdos de coseguro” y de “redes globales de cuidado” dentro de familias transnacionales, en contraposición con una mayor integración familiar en destino, se traduce en una mayor cantidad de dinero transferida a los familiares que están a cargo de los hijos menores en origen.

Por tanto, para el caso de la reciente inmigración en España el asentamiento familiar en destino es uno de los principales determinantes de la intensidad de las remesas enviadas por los migrantes latinoamericanos. No obstante, el estado civil, el tipo de matrimonio y la convivencia con el cónyuge no ejercen un efecto significativo en los modelos. Son los hijos y la convivencia con ellos los que influyen de forma determinante en la cantidad de dinero remesada. El mayor asentamiento familiar, medido por convivir en España con los hijos, supone enviar una menor cantidad de dinero al país de origen. Llama la atención que esta relación es solo significativa entre los hombres pero no entre las mujeres. En suma, la adquisición de nuevas obligaciones familiares en la sociedad de destino y cierto grado de asentamiento familiar reduce la cantidad de remesas enviadas para los hombres, en consonancia con la hipótesis planteada. Reagrupar a los hijos o adquirir nuevas responsabilidades familiares en la sociedad de destino, que en teoría disminuye los recursos disponibles para mantener la intensidad de las remesas, no tiene un efecto significativo para las mujeres.

Los motivos de la migración también son uno de los determinantes cardinales de la cantidad de dinero transferida en el último año. Las personas que migran por motivos económicos envían una mayor cantidad a sus familiares de origen que los que migran por otras razones. Aunque ese efecto es solo significativo para las mujeres que sí envían (MCO); las que migran por motivos económicos envían 231,9 € más que las que llegan por otras razones. Los motivos familiares de la migración ejercen un efecto significativo entre las mujeres y disminuyen la cantidad de remesas enviadas. La reagrupación familiar está unida a un mayor asentamiento familiar en el destino, por lo que desaparecen buena parte de las responsabilidades en el origen, motivo por el cual este factor afecta, sobre todo, a las mujeres que tienen un mayor compromiso con la familia de origen. Así, los resultados confirman la hipótesis de que una mayor cantidad enviada está asociada al carácter económico de la migración. En la misma línea, el origen geográfico confirma la mayor intensidad de los envíos de remesas por parte del colectivo andino, asociado a sus patrones culturales y al tipo de proyecto familiar unido a la migración, donde las remesas desempeñan un papel central para mantener los vínculos transnacionales como señalan múltiples otros estudios recientes (De Haas y Fokkema, 2011; De Haas y Plug, 2006; Van Dalen et al., 2005).

Otro aspecto que sobresale en los hallazgos es el peso del asentamiento en la sociedad de destino en el envío de remesas, en la línea de lo planteado por las teorías de la asimilación. El tiempo de residencia en España muestra un efecto contrario al esperado en un principio. Menos tiempo de residencia (haber llegado más recientemente) supone una menor cantidad de remesas enviadas, relación que es significativa para los hombres en el modelo censurado. En otras palabras, en las mismas condiciones de asentamiento familiar, integración laboral, etc., no se observa que al prolongarse la ausencia se debilite la intensidad de los vínculos con origen. Al contrario, el efecto que predomina es que en los primeros años en la sociedad de destino es menor la disponibilidad de recursos para enviar remesas traduciéndose en menores cantidades transferidas. A mayor tiempo de residencia aumentan las oportunidades que favorecen enviar mayores montos de dinero. También, respecto al asentamiento en destino, la adquisición de la nacionalidad española está asociada a una mayor cantidad de remesas enviadas en el modelo censurado. Se confirma que la nacionalidad va unida a una mejor integración al igualar la situación legal a los nativos que debilita la intensidad de las remesas y a diferentes proyectos migratorios para los que la adquirieron antes de llegar a España entre los que las remesas no forman parte de los objetivos de su migración, en gran medida.

Respecto al tipo de inserción en el mercado de trabajo español también determina la cantidad de remesas enviadas, aunque es más significativo en el modelo Tobit. Para el caso de los hombres, los resultados confirman que la ocupación actual en España dibuja una pauta en forma de U invertida respecto a la intensidad de las remesas. La cantidad de dinero transferida aumenta para los que se sitúan en las categorías medias, respecto a los que se encuentran en los puestos inferiores, pero disminuye para los ocupados en puesto altos. Las categorías medias serían un punto de inflexión a partir del cual una mejor ocupación ya no está asociada a una mayor intensidad de los vínculos dado que se dispone de mayores oportunidades, sino que los puestos altos debilitan los vínculos y reducen la intención de retornar al país de origen. Estar inactivo supone —controlando el resto de variables— una menor cantidad de dinero enviada a los familiares en origen, efecto significativo en ambos sexos pero mayor para las mujeres. Esto se debe a la falta de recursos que les impide enviar grandes cantidades de dinero. En este sentido, los ingresos mensuales muestran una relación directa con la cantidad enviada: a mayores ingresos mayor cantidad de remesas enviadas durante el último año. Esta relación es más fuerte en los hombres, para los que enviar una mayor cantidad de remesas está más vinculado al nivel de ingresos en la sociedad de destino. En cambio, las mujeres inmigrantes estarían condicionadas por la existencia de una brecha salarial por género (Antón et al., 2012).

Por otro lado, el régimen de la vivienda, que también sirve de indicador del asentamiento familiar en la sociedad de destino, afecta en mayor medida a las mujeres que a los hombres mostrando de nuevo las significativas diferencias por género. Las mujeres que viven en casa del empleador (trabajadoras internas en el servicio doméstico y de cuidados) envían significativamente una mayor cantidad de dinero a sus familiares de origen. Esta situación laboral y residencial de las mujeres favorece sus recursos para hacer frente a una mayor intensidad de las remesas, lo que permite asumir los objetivos marcados en el proyecto migratorio. Esto ocurre pese a que, como se argumentó, esto suponga peores condiciones laborales y menor asentamiento familiar asociado, por lo general, los primeros años tras la llegada. Además, las mujeres que tienen vivienda en propiedad en España transfieren una menor cantidad de dinero lo que se vincula con su mejor integración y a un asentamiento cuasi definitivo que implica un freno en la intensidad de los vínculos transnacionales.

La edad en el momento de la llegada a España también influye en el tipo de inserción en destino, aunque introducida como variable continua no es un determinante significativo en la cantidad de dinero enviada. Sin embargo, en el modelo censurado, destaca que a mayor edad a la llegada, los hombres envían una mayor cantidad de remesas. Esto confirma que los que migraron más jóvenes se integran mejor y en el caso de los varones han adquirido menos compromisos con la familia en origen; en cambio, las mujeres tienen unas mayores responsabilidades con los familiares de origen aun cuando, por el ciclo de vida familiar, debieron adquirir menos compromisos antes de migrar.

En resumen, la cantidad de remesas enviadas está determinada por los procesos de integración en la sociedad de destino, medidos tanto por el asentamiento familiar como por el tipo de inserción laboral en la sociedad de destino, en ambos casos con marcadas diferencias entre hombres y mujeres. Mayor asentamiento familiar en destino reduce la cantidad de dinero transferida. Las obligaciones familiares adquiridas en destino reducen de forma más significativa la cantidad enviada por los hombres, mientras que, aún en esas circunstancias, las mujeres mantienen el envío de mayores cantidades a sus familiares de origen. Los resultados también muestran que enviar una mayor cantidad de remesas requiere cierto “éxito” en la inserción laboral que posibilite tener los recursos suficientes para mantener la intensidad de los vínculos monetarios con el lugar de origen.

IV. CONCLUCIONES

El análisis de la intensidad del envío de remesas ha permitido estimar el grado de implicación con los familiares de origen y categorizar los vínculos monetarios desde el punto de vista del proyecto migratorio, puesto que mayor o menor cantidad enviada definen los compromisos con la familia en origen, las estrategias familiares de integración en destino o los posibles planes de retorno. Los resultados de este artículo muestran, en ese sentido, un complejo panorama de los determinantes de la intensidad de los vínculos monetarios trasnacionales de los latinoamericanos y caribeños, un colectivo en el que el envío de remesas tiene un papel notable en la definición de los proyectos migratorios y familiares.

¿Son incompatibles los procesos de integración en destino con el mantenimiento de una mayor intensidad del envío de remesas? Los resultados empíricos suponen un aporte novedoso para dar una mejor respuesta a esta pregunta. Por un lado, los indicadores de una mayor integración aparecen como consecuencia de un debilitamiento de los vínculos monetarios transnacionales, apuntando a una respuesta afirmativa a la cuestión planteada. La reagrupación familiar y la adquisición de responsabilidades familiares en la sociedad de destino actúan como algunos de los principales frenos al mantenimiento de vínculos económicos transnacionales y supone la reducción de la cantidad de remesas enviadas. Además, llegar a una edad más joven con menos compromisos familiares de origen, debido al ciclo de vida familiar o a la adquisición de la nacionalidad, supone un menor envío de remesas y con menor intensidad. No obstante, el no envío de remesas no tiene que significar una ruptura con el país de procedencia y la familia en el origen, sino simplemente puede explicarse por la existencia de otros objetivos familiares o nuevas cargas familiares adquiridas en el país de acogida.

Frente a lo mostrado en la literatura especializada, los resultados para el caso de los latinoamericanos en España muestran que el tiempo de residencia no tiene una relación inversa con la cantidad de remesas enviadas. Los inmigrantes envían una menor cantidad de dinero durante los primeros años en la sociedad de destino debido a que se dispone de menos recursos inicialmente hasta que se logra una estabilidad en la inserción laboral en el destino. Este hallazgo refuerza la idea de una relación en forma de U invertida entre la intensidad del envío de remesas y el grado de integración.

Por otro lado, se han confirmado las hipótesis planteadas en relación con la mayor cantidad de dinero remesado cuando existe un “autointerés” o como contraprestaciones para mantener acuerdos explícitos, o de coseguro como contraprestación para el cuidado de familiares dependientes en origen. Destaca la mayor probabilidad de envío de remesas de las mujeres latinoamericanas confirmando su mayor compromiso familiar frente a los hombres, aunque la diferencia según el sexo no es significativa para la cantidad enviada, debido a la penalización salarial de las mujeres en su inserción laboral en el destino. Se concluye así que la integración laboral y familiar desempeña un papel esencial en la dinámica remesadora y explica mejor el impacto de factores abordados tradicionalmente por la literatura como el altruismo o el autointerés.

Finalmente, este trabajo deja abiertas futuras preguntas de investigación que amplían los conocimientos sobre la relación entre el envío de remesas y los procesos de integración. La relevancia del caso español debido a la reciente e intensa inmigración, lo es hoy también por el cambio radical del contexto de recepción como consecuencia de la crisis económica que estalló en el 2008. Ante esta situación, con un freno brusco de nuevas llegadas y movimientos de retorno que se han observado durante los últimos años, el grado de integración es un factor esencial para conocer los posibles mecanismos y estrategias que adoptan los migrantes para continuar enviando o no remesas y cumplir así con los objetivos de sus proyectos migratorios, o la aparición de nuevos fenómenos como las “remesas inversas” que reciben los migrantes de sus familias en origen como ayuda económica para mantener el proyecto migratorio en lo que mejora la situación económica en España. La tendencia de las remesas enviadas desde España apunta, de nuevo, a la importancia de la integración familiar y laboral en la sociedad de destino, en la medida en que la cantidad total de remesas enviadas desde España han vuelto a crecer coincidiendo con una leve recuperación económica y un descenso paulatino del desempleo a partir del 2015.

Agradecimientos

Trabajo financiado por los proyectos de investigación “Trayectorias laborales y reproductivas de la población inmigrante en tiempo de crisis” (referencia: CSO2013-41828-R) y “Asimilación laboral e integración social en flujos migratorios sur-sur y sur-norte. El caso de América Latina y el Caribe” (referencia: CSO2014-57410-JIN), ambos del Ministerio de Economía y Competitividad del Gobierno de España.

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Notas

[1] Se ha hecho un test de Hausman para contrastar la posible endogeneidad entre las variables introducidas en los modelos. El resultado de la prueba de Hausman confirma que se rechaza la hipótesis nula y que, por tanto, no existe endogeneidad que distorsione los resultados dado que la diferencia entre los coeficientes es sistemática: chi2(0) = (b-B)'[(V_b-V_B)^(-1)](b-B) = 828,64 | Prob > chi2 = 0.000.
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