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Arte y evolución personal: Un par de zapatos de Vincent Van Gogh
Carlos Guido Musso
Carlos Guido Musso
Arte y evolución personal: Un par de zapatos de Vincent Van Gogh
Acta Gastroenterológica Latinoamericana, vol. 50, núm. 4, pp. 378-381, 2020
Sociedad Argentina de Gastroenterología
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Carátula del artículo

Sección Humanidades

Arte y evolución personal: Un par de zapatos de Vincent Van Gogh

Carlos Guido Musso*
Instituto Universitario del Hospital Italiano de Buenos Aires, Argentina
Acta Gastroenterológica Latinoamericana, vol. 50, núm. 4, pp. 378-381, 2020
Sociedad Argentina de Gastroenterología
Introducción

En esta oportunidad, analizaremos la pintura Un par de zapatos de Vincent Van Gogh (1853-1890), siguiendo así con la serie dedicada al concepto de la evolución personal.



"Nadie echa vino nuevo en odres viejos, pues el vino nuevo rompe los odres, el vino se derrama y los odres se pierden; mas el vino nuevo en odres nuevos se ha de echar".

Fuente: (Mateo 2:18-20)




Descripción de la obra

Los zapatos gastados de un labriego expresan el arduo trabajo realizado por su dueño. Ellos llevan indeleblemente inscriptas las jornadas transcurridas en los multiples dobleces, deformaciones y desgarros de su cuero (Cf. Heidegger). El color marrón y sus matices dominan la escena, mientras que los fragmentos de barro adheridos al calzado, le recuerdan su última pertenencia, origen y fin de todas las cosas: “de la tierra vienes y a la tierra volverás” (Cf. Rilke). Sin embargo, más allá de su evidente fatiga y la certeza de su sombrío destino, ellos aguardan estoicamente erguidos la llamada del alba.

Análisis de la obra

Una antigua tradición compara a los pies humanos con las raíces de un árbol al considerarlos un símbolo de aquello que conecta al ser humano con el mundo terrenal (mundus), en contraposición con la cabeza que lo conecta con lo trascendental (alter mundus). El término alter mundus no remite a un mundo de ultratumba, sino a un mundo que físicamente está aquí, pero en otro plano de la conciencia. Resulta entonces que desde esta lógica, el calzado representa el proceso de socialización; es decir: la pátina de normas, actitudes y prejuicios adquiridos por el individuo (“yo” psicológico) en su pasaje a través de los diversos úteros sociales (la familia, la escolaridad, el entorno laboral y social), proceso que termina conformándole una personalidad (calzado) que le permite transitar por el mundus.

El problema es que, frecuentemente, el “calzado” adquirido (falsa personalidad) no está diseñado para transitar por el verdadero camino: el camino trascendental (alter mundus). El camino del mundusse estructura en base a la marcada separación entre lo propio y lo ajeno, dando lugar a una ilusoria fragmentación de lo real (unicidad), que conduce indefectiblemente al conflicto destructivo.

El tránsito por el mundus es el sonambulismo, donde el ser humano meramente ejecuta la programación recibida, encerrado en su individualidad desde donde todo lo divide y a todo se confronta (lo diabólico es lo que divide). Sin embargo, a la mitad del andar (nel mezzo dil cammin de Dante) se debe renacer (cambiar de calzado), mudar de perspectiva (verdadera personalidad), si se quiere poder “caminar sobre las aguas”. Vale decir: vivir físicamente en el mundus (falsa personalidad), pero habitar psicológicamente en el alter mundus (verdadera personalidad); dado que la clave no está en abandonar el fango del mundo (escapismo), ni entregarse a su destrucción maquinal (sonambulismo), sino en evaluar a cada paso que tiene valor real y que tiene valor aparente (separar el trigo de la cizaña). Por eso, debe cuidarse muy bien el estado del calzado psicológico que se lleva (personalidad), procurando evitar que los zapatos utilizados, como los del labriego, se desgasten por la erosión de las emociones negativas, las cuales empiezan corrompiendo el espíritu y terminan consumiendo el cuerpo (como en El retrato de Dorian Gray de Oscar Wilde).

Concluimos con que la obra Un par de zapatos de Vincent Van Gogh constituye una excelente oportunidad para comprender la diferencia fundamental entre la falsa y la verdadera personalidad.

Material suplementario
Referencias
1. Musso CG, Enz PA. Art as an educational tool in medicine. Arch Argent Pediatr 2014; 112 (6): 494-495.
2. Satz M. El cuerpo y sus símbolos. Buenos Aires: Planeta, 1994.
3. Gauding M. La biblia de los signos y de los símbolos. Madrid: Gaia, 2009.
4. Heidegger M. Caminos de bosque. Madrid: Alianza, 2008.
5. Nicoll M. Psychological commentaries on the teaching of Gurdjieff and Ouspensky. London: Vincent Stuart Publishers, 1941.
6. Dalai Lama, Goleman D. Destructive emotions. How can we over- come them? New York: Bantam Books, 2003.
Notas
Notas de autor
* Doctor en Medicina por la Universidad de Salamanca, España.

Departamento de Ciencias Humanas. Instituto Universitario del Hospital Italiano de Buenos Aires, Argentina.




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