Recepción: 27 Mayo 2018
Aprobación: 26 Septiembre 2018
Resumen: El objetivo de este artículo fue determinar las prácticas de responsabilidad social empresarial en las medianas empresas del departamento del Atlántico en Colombia. Metodológicamente, la investigación estuvo soportada por un estudio de tipo exploratorio-descriptivo, con un enfoque deductivo; se hizo uso del muestreo probabilístico del tipo aleatorio estratificado, apoyado en información suministrada por la Cámara de Comercio. Se registraron 650 empresas en bases de datos; y se aplicó encuesta de 78 preguntas a 242 gerentes de las medianas empresas del sector productivo y de servicios. Como resultado, se encontró que el 79% de las empresas estudiadas no realizan proyectos comunitarios, ni ceden los espacios físicos para encuentro de organizaciones y grupos sin fines de lucro. En conclusión, la Responsabilidad Social Empresarial debe convertirse en un modelo de gestión, que permita tomar decisiones efectivas sin perjudicar su entorno ni a la comunidad. Algunas organizaciones carecen del conocimiento necesario para implementar las prácticas de Responsabilidad Social Empresarial como un elemento más de la gestión empresarial, por no estar alineado a la visión de las prácticas que subyacen a este tema en particular, buscando reflejar la verdadera esencia de lo que es en realidad la Responsabilidad Social Empresarial.
Palabras clave: responsabilidad social empresarial, medianas empresas, departamento del Atlántico, gerentes, filantropía.
Abstract: The objective of this article was to determine the practices of corporate social responsibility in medium-sized companies in the Department of Atlántico in Colombia. Methodologically, the research was supported by an exploratory-descriptive study, with a deductive approach; the probabilistic sampling of the stratified random type was used, supported by information provided by the Chamber of Commerce. 650 companies were registered in databases; and a questionnaire of 78 questions was applied to 242 managers of medium-sized companies in the productive and service sectors. As a result, it was found that 79% of the companies studied do not carry out community projects, nor do they yield physical spaces for meetings of nonprofit organizations and groups. In conclusion, Corporate Social Responsibility must become a management model that allows effective decisions to be made without harming their environment or the community. Some organizations lack the necessary knowledge to implement Corporate Social Responsibility practices as an element of business management, as they are not aligned with the vision of the practices that underlie this particular issue, seeking to reflect the true essence of what is in reality, Corporate Social Responsibility.
Keywords: Corporate social responsibility, medium businesses, Atlantic department, managers.
1. Introducción
En la década de los años setenta el economista Milton Friedman, afirmó que el único fin y responsabilidad social de los negocios era generar y aumentar cada vez más las utilidades de la empresas (Friedman, 1970), este concepto ha tenido una evolución bastante notoria, a raíz del debate que se abrió en torno a la apreciación de dicho economista.En la actualidad las organizaciones están comprendiendo que su éxito no radica únicamente en la obtención de utilidades con el desarrollo de sus actividades productivas, sino también, el compromiso de actores involucrados, en tales procesos, a fin de hacer de las empresas más competitiva dentro del mercado, igualmente, necesitan un entendimiento amplio acerca de la sociedad; no se puede pensar únicamente en procesos productivos como medio para medir el desarrollo de una organización, sino que se analizan algunos factores exógenos que de una otra forma pasan a ser parte fundamental de la competitividad de una organización.
En ese sentido, el tema de la responsabilidad social empresarial no es reciente, sus manifestaciones, a través de la historia han sido diversas y sus denominaciones igualmente diferentes. A pesar de estas diferencias, el elemento común ha sido la preocupación de las organizaciones empresariales por responder a las necesidades, no solo del entorno donde funcionan, sino de los sectores con los cuales interactúan o del personal que labora para estas. La RSE, es un concepto en permanente evolución y desarrollo, que paulatinamente está siendo aplicado voluntariamente por las empresas, en parte por la interdependencia de los numerosos grupos que componen la sociedad, surge como una respuesta a los cambios económicos y sociales propios del proceso de globalización, el cual propone un nuevo concepto de negocio que responda a las exigencias de la sociedad y el mercado.
Analizando conceptos en torno a la RSE, se encuentra que es una contribución activa y voluntaria por parte de las empresas en pro del mejoramiento social, económico y ambiental de alguna comunidad (Barroso, 2008). La RSE es un constructo, que trasciende el cumplimiento de las leyes y las normas, durante su evolución se ha centrado más en asuntos de tipo ambiental, desarrollo sostenible y producción más limpia. Se considera que debe ser un compromiso ético, moral y social, que, aunque voluntario, contribuya al mejoramiento de la calidad de vida de los empleados, sus familias y la comunidad en general; que se convierta en una fuente de ventaja competitiva sobre las demás empresas que operan en el mercado.
En 1999 durante el Foro Económico Mundial, realizado en Davos, la Organización de Naciones Unidas (ONU) lanzó la idea de promover un pacto mundial sobre el diálogo social para la creación de una ciudadanía corporativa global, que permita conciliar los intereses de las empresas, con los valores y demandas de la sociedad civil, los proyectos de la ONU, sindicatos y Organizaciones No Gubernamentales (ONG), sobre la base de 10 principios en áreas relacionadas con los derechos humanos, el trabajo, el medio ambiente y la corrupción”.
Entendiendo el Foro Económico Mundial de Davos (1999), según Robbins (2008), la RSE es una obligación que va más allá de lo que requieren la ley y la economía, para que una empresa persiga metas a largo plazo que sean benéficas para la sociedad, asimismo, agrega también el autor, que hay que proteger, como el bienestar de la sociedad no contaminando, no discriminando, no involucrándose en publicidad engañosa, y otros semejantes, las empresas deben asumir un rol positivo para mejorar la sociedad.
En correspondencia con lo anterior, los sectores productivos de muchos países dieron respuestas positivas a tal iniciativa, el pacto mundial es actualmente el principal referente para la definición de prácticas sociales en las empresas en el ejercicio de la RSE y la mayor red mundial de carácter voluntario para la comunidad corporativa. Además, tiene como objetivo involucrar a las empresas en el logro de algunos principales retos sociales y medioambientales generados por la creciente globalización.
Cabe destacar, según Vives, Corral y Isusi (2005), que la mayoría de los conceptos e instrumentos relacionados con el concepto de RSE, han sido propuestos por y para grandes empresas, en muchos casos, multinacionales. No resulta sorprendente comprobar, por tanto, que la mayor parte de las investigaciones y estudios existentes en el ámbito de la RSE, tengan como objeto a este tipo de empresas, mientras que la atención dedicada a las medianas empresas ha sido mínima y estas empresas están sujetas a un conjunto de características propias que las hacen diferentes de las grandes empresas y que por supuesto afectan tanto los contenidos como la extensión y naturaleza misma de sus actividades de RSE.
En ese sentido, se ha dado tanta importancia a este tema a nivel nacional, muchas empresas destinan altos rubros de sus ganancias para implementar, adelantar y hacer seguimiento a los programas que redundan en el beneficio a la comunidad. Estos programas llevan un estricto registro cualitativo y cuantitativo. El Centro Colombiano de Responsabilidad Empresarial (CCRE) se ha dedicado a la divulgación, promoción, investigación y asesoría de empresas en temas relacionados con RSE y la ética de las organizaciones. De esta manera generan un valor agregado y optimizan la gestión empresarial.
El objetivo de este artículo fue determinar las prácticas de responsabilidad social empresarial en las medianas empresas del departamento del Atlántico en Colombia. Se consideró para este estudio dimensiones de la variable RSE en las medianas empresas: el ambiente laboral, la ética empresarial, el mercadeo responsable, el desarrollo de la comunidad y el medio ambiente.
La metodología utilizada fue soportada por un estudio de tipo exploratoriodescriptivo. La primera parte de esta investigación, se considera exploratoria, ya que se abordó un tema poco estudiado en las medianas empresas y considerando solo a los gerentes en el departamento del Atlantico; tal como lo expresa Toro y Parra (2006), un estudio exploratorio cuando existe poco conocimiento teórico o práctico, o cuando el investigador conoce muy poco o tiene poca experiencia sobre el tema. Este tipo de investigaciones son fundamentales para incrementar el grado de familiaridad con asuntos relevantemente desconocidos, por lo que ayudan a obtener información sobre la posibilidad de llevar a cabo una investigación más completa.
El enfoque utilizado, el deductivo, partiendo de situaciones generales para llegar a identificar aspectos particulares propuestos explícitamente en la situación general, que según Mendez (2009), este enfoque proporcionó información veraz y efectiva. La población objeto de esta investigación fueron las medianas empresas del departamento del Atlántico, con ellas se realizó un muestreo aleatorio estratificado y que según la Cámara de Comercio, para el año 2013 existían 650 medianas empresas1 debidamente registradas en el departamento. Metodológicamente, se hizo uso del muestreo probabilístico por la información suministrada de la Cámara de Comercio y solo aplicó las encuestas a 242 gerentes seleccionados de las medianas empresas del sector productivo y de servicios.
2. Responsabilidad Social Empresarial: Reflexiones teóricas
El principio de RSE debe ser más que un compromiso, una cultura que debe aplicarse en toda organización para que también satisfaga las necesidades y expectativas de los miembros de la sociedad y de quienes se benefician de su actividad. Por consiguiente, esta investigación se apoyó en teorías que van desde el liderazgo organizacional, hasta la aplicación de la temática de la RSE como eje de la gestión empresarial propia de los diferentes escenarios de trabajo de las empresas.
En consecuencia, Sierra (2010), afirma que también es importante considerar que la RSE no es sólo de las empresas, como suele pensarse, también lo es y debe serlo de los empresarios y, en particular de los accionistas y directivos, al igual que de sus trabajadores y las organizaciones sindicales que los representan.
1 De acuerdo a la ley 590 de 2000 y la ley 905 de 2004 (Colombia), la mediana empresa es aquella que cuenta con una planta de personal entre 51 y 200 trabajadores o activos totales entre 5001 y 30000 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
La RSE ha ido poco a poco influenciando las nuevas formas de gerenciar las organizaciones empresariales, el internet trajo consigo una aceleración global que hace que esta década sea distinta de las
anteriores, hoy se cuenta con herramientas tecnológicas más avanzadas y nuevas formas de comunicarnos que hacen que todo sea más rápido y la RSE es una nueva forma de gerencia. Las nuevas tendencias están afectando la dinámica general de la sociedad y contribuyen a redefinir el rol de sus actores e instituciones. En ese sentido, Vives y Peinado (2011) exponen, lo que distingue nuestra era de las anteriores, es la velocidad de sus transformaciones gracias a la tecnología y las herramientas comunicativas que se están usando hoy.
Según lo anterior, Robbins (2008) menciona que la RSE incluye un abanico de actividades entre las que se pueden mencionar la comunidad, los empleados, el desarrollo de productos y la responsabilidad implícita, las normas en cuanto a la protección de la mujer y de las minorías, legislación para no negociar con países donde no se respeten los derechos humanos, entre otros. Pero, según el mismo autor lo que más énfasis se ha tenido en materia de RSE está dirigido hacia la protección ecológica, esta realidad ha traído como consecuencia que los ejecutivos de las principales corporaciones a nivel mundial consideren la RSE como un buen negocio, debido a que ésta obliga a un gerente a adoptar decisiones que protejan y mejoren la sociedad con los intereses de la empresa.
Se analiza que la RSE, no es solo la aplicación de algunos conceptos que favorezcan solo los intereses de la organización empresarial, su aplicación debe ser global, como un todo y concierne a la totalidad de las relaciones de las empresas con los grupos participantes y podría desplegarse según Perdiguero y García (2005), en cuatro niveles o dimensiones esenciales:
El primer nivel corresponde a la responsabilidad en las relaciones con los trabajadores, la organización y calidad del trabajo; el segundo nivel las responsabilidades que afectan a la calidad, seguridad y utilidad social de los productos y servicios. La implicación comunitaria constituye el tercer nivel de la responsabilidad, en el que junto a la contribución de la empresa al desarrollo social, deben incluirse los compromisos empresariales con la creación y el mantenimiento de los empleos, así como el respeto a la legislación sobre la actividad económico, y finalmente, el cuarto nivel corresponde a la actitud responsable, la honestidad e integridad de la empresa con el conjunto de los grupos participantes, especialmente en las relaciones con los consumidores, con sus accionistas, así como en el ámbito de vigilancia con conductas sociales de sus proveedores, contratistas, distribuidores y otros socios de negocio.
En el marco de los anteriores conceptos y considerando que la RSE está gestionando cambio al interior de las organizaciones empresariales, es urgente que los gerentes asuman dirección total, según Khadem (2002), es simplemente alinear las acciones de cada uno de los miembros de una organización a los objetivos de una empresa; en RSE seria alinear los objetivos de una empresa con los de la sociedad y el Estado; asimismo, a guía ISO 26.000 (2010), define responsabilidad social, como la responsabilidad de una organización ante los impactos que sus decisiones y actividades ocasionan en la sociedad y el medioambiente, a través de un comportamiento transparente y ético que contribuyan al desarrollo sostenible de la sociedad.
Es importante considerar que las definiciones y elementos antes descritos de la RSE, permiten conceptualizarla, como la inclusión voluntaria en las operaciones cotidianas, de actividades en favor de la sociedad o la ecología desde un punto de vista rentable. En este sentido, los esfuerzos de cualquier compañía están enfocados en ayudar a sus trabajadores, ganarse entre ellos un prestigio comercial y así una mejor producción.
1 De acuerdo a la ley 590 de 2000 y la ley 905 de 2004 (Colombia), la mediana empresa es aquella que cuenta con una planta de personal entre 51 y 200 trabajadores o activos totales entre 5001 y 30000 salarios mínimos legales mensuales vigentes. Importar tabla
3. Dimensiones de la responsabilidad social empresarial (RSE)
En esta investigación se ha considerado que la RSE, está compuesta por dimensiones que destacan su importancia en el desarrollo de las organizaciones de producción y servicios, como objeto de estudio en el departamento del Atlántico en Colombia, tales como, el ambiente laboral, la ética empresarial, el mercadeo responsable, el desarrollo de la comunidad y el medio ambiente, a continuación se expone:
Según López (s/f), el ambiente laboral son los códigos de conducta y las buenas prácticas laborales que han adquirido relevancia en el mundo de la producción y que han influido en el ámbito de las relaciones entre el trabajador y sus patrones. Estas relaciones han hecho que el clima laboral, la productividad y la competitividad mejoren. De esta afirmación no está muy lejos Lukangakye (2013), quien dice antes de la relación laboral entre patronos y trabajadores, el empresario tiene que ver al ser humano que va a emplear, y el trabajador, ver humanamente a quien lo va a emplear.
En el mismo orden de ideas, la Fundación PROHumana (2006), quien trabaja activamente por la RSE en Chile, dicen que dentro de la etica empresarial las empresas deben tener códigos de ética que permitan establecer las formas en que la empresa se relacionará en términos éticos con sus públicos de interés; por otro lado, Aguilar (2011), profesor de la Universidad Sergio Arboleda, publicó en la revista portafolio un documento sobre la ética empresarial, plantea que significa disfrutar de la verdad en el cumplimiento de sus compromisos, y ser reconocida como íntegra y honrada, sin lo cual no es sostenible ni manejable, es el camino a seguir, pese a sus obstáculos y dificultades.
Seguido y para describir la siguiente dimensión, Accion Empresarial (2002), expone que el mercadeo responsable, va desde la elaboración del producto, seguridad, rotulación y etiquetado hasta vincular al marketing con una causa social, cumple con esas expectativas y se transforma en una oportunidad de agregar valor a una compañía y a sus marcas; a su vez la Fundación PROHumana (2006), también menciona que las empresas han asumido un rol con la cadena productiva, buscando diferentes formas para disminuir sus impactos negativos en el medioambiente y la sociedad en general, distinguiéndose del resto con herramientas competitivas significativas.
En el desarrollo de la comunidad, la ISO 26.000 (2010), plantea que las empresas deben basar su participación activa en la comunidad para contribuir a su desarrollo, buscando aumentar el bien público y ayudar a fortalecer la sociedad. Aunado a esto, Caravedo (2011), expone que la dimension ambiental, es responsabilidad de los gobiernos, las empresas y la sociedad, que deben preocuparse por el impacto ambiental que pueden causar las actividades que cualquiera de estos puede accionar en la nautraleza, tanto positiva como negativamente. De misma forma Caravedo (2011), dice que hay que adoptar normas y estándares ambientales de primer nivel, que van más allá de la regulación existente. Es fundamental que las empresas tomen conciencia,con respecto al impacto ambiental que ocasionan y que perjudican directamente al ambiente y resultado de esto, recae en la salud de los ciudadanos del mundo, por lo tanto, los efectos de su actuación deben ser analizados y, cuando son negativos, minimizarlos.
Los planteamientos, descripciones y reflexiones teóricas de las dimensiones consideradas en este estudio, permiten acercarse al constructo de la RSE en las medianas empresas del departamento del Atlántico.
4. Prácticas de RSE en las medianas empresas del departamento del Atlántico
Con respecto a las medianas empresas del departamento del Atlántico, se definió una muestra con un nivel de confianza del 95%, con un margen de error del 0.05 y se realizaron 242 encuestas (100 % de lo previsto), según tabla 1; en la que se muestra la participación por sectores considerados para este estudio, como son el sector productivo y de servicios.
El instrumento de recolección de datos, fue la encuesta, que estaba estructurada con 78 preguntas, con tres respuestas; cumple, en proceso o no cumple.
En este sentido, en esta sección se presentan los resultados del estudio, por cada dimensión considerada de la variable RSE:
• Ambiente laboral
Hace referencia al cumplimiento de estándares internacionales en lo que respecta a la adopción de la Norma SA8000, la salud y seguridad en el trabajo, la discriminación al momento de contratar, las medidas disciplinarias, remuneración y sistemas de gestión en la parte laboral, entre otras. En esta ocasión se tomaron muestras de los aspectos relacionados anteriormente; es importante destacar que este es uno de los sectores donde las empresas socialmente responsables deben centrar sus esfuerzos (tabla 2).
Entre las empresas estudiadas se encontró que el 66%, no incluyen la Norma SA8000[1] en el reglamento interno de trabajo, en cuanto a los principios de credibilidad, verificación y transparencia de las relaciones laborales dentro de la empresa, las condiciones de trabajo y protección de los niños. Pero en su gestión empresarial cumplen con lo legalmente establecido. Un 34% afirma tener incluida la norma y cumplir con los parámetros establecidos para su aplicación.
Para el 65% de las empresas encuestadas la salud y la seguridad en el trabajo es un factor muy importante. Lo tienen en cuenta para garantizar un entorno laboral seguro y saludable. Aplican las medidas pertinentes para prevenir accidentes y lesiones durante la jornada laboral.
Participación por sector
Elaboración propia.
Además. garantizan que sus empleados reciben de forma periódica documentación e instrucción sobre salud y seguridad laboral. Por otro lado, sólo un 10% se encuentra implementando este factor y un 25% que no cumple con este. Se observa que aún falta mucho por hacer en ésta área y para garantizar a todo el personal un ambiente laboral seguro e impedir hasta donde sea posible los riesgos inherentes a dicho entorno.
Ambiente laboral
Elaboración propia.
En lo que respecta al factor discriminación, las empresas objeto de estudio mostraron que un 70% no aplican procesos de discriminación hacia sus empleados, en el criterio de la contratación. El término discriminación según Frascarolo (2008), comprende cualquier distinción, exclusión o preferencia basada en motivos de raza, color, sexo, religión, opinión política, ascendencia nacional u origen social que tenga por efecto anular o alterar la igualdad de oportunidades en el empleo y la ocupación. En un estudio realizado por el grupo de investigación Estrategia & Liderazgo de la Universidad del Atlántico a las medianas empresas del departamento del Atlántico, para determinar si se llevan a cabo procesos justos de selección y contratación de personal, también se encontraron datos similares sobre discriminación, las empresas tienen factores excluyentes o discriminantes, tales como la edad, el género y la apariencia física entre otras (Naranjo, 2012).
En cuanto a las normas de disciplina, el 90% de las empresas encuestadas muestran que tiene establecidos parámetros adecuados para la aplicación de las medidas disciplinarias acordes con el reglamento de trabajo de cada una de las empresas encuestadas, entendiendo la disciplina según(Cuevas (2009), el hecho de cumplir las reglas del reglamento interno de trabajo de una organización; sus acciones disciplinarias deben ser preventivas para evitar en el futuro conductas similares.
Se consideró la normatividad legal y las reglas mínimas establecidas por cada empresa, la tabla 2, también muestra que el 88% de las empresas garantizan los salarios de sus trabajadores. Además, no se realizan deducciones de los salarios por razones disciplinarias; de forma habitual se detalla claramente la composición de salarios y beneficios. Por otro lado, manifiestan que no se llevan a cabo prácticas de contrataciones irregulares. Un 7% trata de cumplir por lo menos con lo estipulado legalmente; pero, por el contrario, un 5% no tiene en cuenta estas medidas en la cancelación de salarios.
Adicionalmente, el 87% de las empresas no tienen incluida la norma SA8000 en su sistema de gestión. Cabe resaltar que un 7% dice tenerla incluida y aseguran cumplir con los requerimientos manteniendo procedimientos para comunicar regularmente a todas las partes interesadas, datos y otras informaciones relativas con registros integrales para verificar el cumplimiento de los términos incluidos en esa norma.
• Ética empresarial
Se consideró como criterios de evaluación, si las empresas tienen definida y reconocido en todos los niveles su visión y misión; si existe un código de ética y si este es conocido por clientes y proveedores; si se llevan a cabo auditorías y si se hace una rendición de cuentas. Los resultados obtenidos se observan en la tabla 3.
La ética de la empresa según Navarro (2008), es una brújula que orienta a la empresa hacia lo que debería ser, por eso es importante, que las empresas tengan un enfoque estratégico; cabe resaltar que el 67% de las empresas encuestadas tienen establecidas y documentada su misión y visión, y las difunden a todo su personal, teniendo en cuenta su compromiso explícito con la RSE. Al integrarlas, estas las ven como un conjunto para el adecuado proceso de toma de decisiones y cumplimiento de los objetivos estratégicos para alcanzar las metas propuestas. Un 24% se encuentra mejorando este aspecto, mientras que el 9% restante no cumplen con este criterio.
La incorporación de códigos éticos puede considerarse según Harris (2004), como la manera de formalizar, incentivar y guiar el comportamiento responsable de los empleados y de las organizaciones; en la perspectiva externa, ayudará a mantener una buena reputación y a mantener la confianza de los distintos grupos de interés. Este aspecto ha avanzado en las medianas empresas del departamento del Atlántico, el 78% de las organizaciones se interesa por mantener a todo el personal en constantes capacitaciones para conocer las disyuntivas morales, estar atentos a las implicaciones éticas de sus acciones y reafirmar las expectativas de la organización en el aspecto moral. El 17% trabaja haciendo lo posible por mejorar en este aspecto y el 5% no practica esta política.
Un 79% de las empresas encuestadas entregan la información requerida de una manera clara, equilibrada y veraz y en un grado razonable y suficiente, sobre las políticas, decisiones y actividades por las cuales son responsables. Incluyen sus actuales y potenciales impactos sobre la sociedad y el medio ambiente, el 16% está en el proceso de aplicar y mejorar este aspecto, y el 5% no cumple.
• Mercadeo responsable
Ética empresarial
Elaboración propia
Según Schwalb (2011), el mercadeo responsable es una actividad conducida por organizaciones responsables e individuos comprometidos con sólidos valores inspirados en la ética, además del intercambio de ofertas de mercado que tienen valor económico, social y medioambiental para todos los grupos de interés.
En la tabla 4, se muestra que el 82% de las empresas estudiadas cumplen con el criterio de garantizar, que todas las referencias comerciales sean específicas, correctas y justas; además, suministra toda la información posible sobre sus productos y servicios; un 13% está en proceso de mejorar esta posibilidad y un 5% dice no aplicar esta política dentro de sus empresas.
El 80% de las empresas cumple con las políticas de promover el buen uso de los productos ofrecidos con responsabilidad, capacita a los consumidores sobre el uso adecuado, garantizan que estos no perjudican la salud y el medio ambiente; un 14% está en mejora de estas políticas y un 6% no aplica este criterio dentro de sus organizaciones.
El 88% de las medianas empresas encuestadas respeta el derecho de sus clientes de no revelar su identidad, dirección y números telefónicos para que no sean divulgados ni comercializados en otras organizaciones. El 7% dice encontrarse en proceso de respetar ese derecho.
El mercadeo con causa social, es un proceso en el cual cada empresa adopta sus decisiones de mercadeo con un triple objetivo: su interés empresarial, la satisfacción del consumidor y el bienestar a largo plazo de éste y de la sociedad en su conjunto. Teniendo en cuenta los resultados, el indicador más alto representa el 39% en aquellas empresas que no realizan ningún tipo de inversión social, frente a un 33% que tan solo realizan este tipo de inversión en las temporadas de ingreso a clases y decembrinas, y otras que lo hacen con sus trabajadores. Sin embargo, el 28% de las empresas encuestadas si tienen y realizan inversión de tipo social por medio de entidades que sostienen una causa social en beneficio de las comunidades más vulnerables para contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de estas.
Mercadeo responsable
Elaboración propia
El 71% de las empresas encuestadas muestra que se cumplen y aplican las políticas de marketing, tales como la utilización de medios de comunicación, páginas web, publicidad, con el fin reflejar una buena imagen y sacar ventajas a sus competidores, para favorecer al mismo tiempo su posición y/o la imagen de la empresa en el mercado. Un 19% trata de cumplir por lo menos con lo estipulado legalmente, pero un 10% no aplica este criterio. Lo anterior nos indica que las empresas se están preocupando por implementar prácticas, sistemas y políticas orientadas a mantener la fidelidad y bienestar del consumidor, estableciendo formas de comunicación que generen una retroalimentación constante.
Se observa con base en los resultados que el 81% de estas empresas manejan estrategias de ventas según lo previsto en la legislación. Facilita a sus clientes, poniendo a disposición la mayor cantidad de información sobre el contenido de sus productos y/o servicios; un 14% se encuentra en proceso de aplicar dichas estrategias y un 5% no las utiliza. Según dicen Camacho y Gallego (2007), lo que se pretende conocer es si la actuación ética de los vendedores en la relación de compraventa ocupa algún lugar en la mente de los consumidores involucrados en la misma.
• Desarrollo de la comunidad
Según Gallego (2006), la supervivencia de las organizaciones está en relación directa al cumplimiento de sus metas sociales como parte que son de la sociedad, y éstas deben estar implícitas en la misión, la visión y en los diferentes planes estratégicos. Así mismo dice Gallego (2006), que las buenas relaciones comunitarias, favorecen la capacidad mejorar la imagen ante los consumidores; aumento en la lealtad de marca; atracción de nuevos consumidores e inversionistas.
Este criterio evalúa la integración de la empresa en el entorno el cual ejerce un impacto directo en aspectos tales como: trabajo global, trabajo voluntario, compromiso con la comunidad, educación y proyecto comunitario (tabla 5).
En la tabla 5, se observa que el 12% de las empresas realizan trabajo social en la comunidad, en cuanto al trabajo voluntario y compromiso con la comunidad, entre el 57% y el 69% de las empresas encuestadas no demuestran ningún interés por este tipo de actividades, es decir, no les representa ningún beneficio. Muestran así una total apatía e indiferencia hacia la comunidad. Por otra parte, entre el 20% y el 24% muestran cierto interés por este tipo de actividades y para esto están implementando o diseñando estrategias que le permitan desarrollar sus ideas. Solo entre el 11% y el 19% dicen cumplir con este tipo de actividades. Según la Fundación PROHumana (2006), las empresas deben establecer una relación con la comunidad, tomando la empresa un rol activo en la generación de iniciativas conjuntas que permitan resolver las necesidades de la comunidad donde se encuentra inserta. Vale la pena decir que vincular el concepto de RSE en la comunidad, implica convertirse en un actor relevante en el desarrollo social del lugar en que la empresa opera.
Desarrollo de la comunidad
Elaboración propia
Con relación al tema de educación, se observa que el 68% de las empresas no cumplen, es decir, no aplican una verdadera política social responsable, no dedican tiempo a las escuelas para que conozcan sus actividades, muestran mucho desinterés. Sin embargo, el 17% se compromete con estas instituciones por medio de la donación de equipos e inmuebles en desuso, mientras que solo un 15% sí cumple con su compromiso social.
En el caso de proyectos comunitarios, se encontró que el 79% de las empresas no realizan proyectos comunitarios, ni ceden los espacios físicos de la empresa para encuentro de organizaciones y grupos sin fines de lucro, considerando que pueden afectar la seguridad de sus instalaciones, otro tanto está dispuesta a hacerlo pero siempre y cuando la seguridad y las operaciones de la empresa no se vean amenazadas, el 16% realiza proyectos comunitarios apoyando al comercio local, considerando la posibilidad de conseguir junto a los comercios locales descuentos para sus empleados; pero solo el 5% cumple con los diversos proyectos comunitarios, lo cual nos hace pensar que hoy en día las empresas deben procurar interesarse más por la comunidad.
• Medio ambiente
En esta dimensión se evaluaron las políticas de operación, minimización de residuos, prevención de la contaminación y uso eficiente de la energía y el agua, teniendo en cuenta la norma ISO 14001 (tabla 6).
Se puede apreciar que el 59% de las empresas cumple con esta norma, estableciendo y comunicando de modo eficaz a todo su personal y a las partes interesadas (stakeholders), las políticas, compromisos y patrones ambientales establecidos; un 15% dice estar en ese proceso de certificación de ésta norma debido a su importancia para mejorar sus políticas de operaciones. Reconocen que necesitan implementar métodos alternativos para evitar desperdicios y practicas contaminantes. Un 26% no aplica la Norma ISO 14001. Hay que aclarar que no aplicarlas, no quiere decir, que no apliquen las políticas ambientales dentro de sus organizaciones, como el uso eficiente del agua, luz y papel reciclado. En su mayoría, las empresas están enfocadas en la preservación del medio ambiente como parte de su compromiso con la sociedad.
Medio ambiente
Elaboración propia
El 71% de las empresas han diseñado programas de reciclaje e invitan a sus colaboradores a presentar sugerencias para la reducción de residuos, implementando procedimientos para el uso racional del papel, productos reciclados, reformados y reacondicionados. También dicen que aplican programas de donación de bienes en desuso. El 16% dice estar mejorando estos aspectos, mientras que un 13% no cumple con estos programas.
En general, las empresas, teniendo en cuenta el conocimiento general existente sobre los riesgos industriales, han creado un entorno laboral seguro y saludable frente al uso de productos tóxicos. Por eso, el 74% de estas empresas cumplen con el sistema de prevención de contaminación; el 18% está en proceso de mejora, utilizan productos considerados menos perjudiciales para la salud y el medio ambiente, mientras que el 8%, no tiene en cuenta esta prevención. Según Alea (2007), el desarrollo sostenible y equilibrado del planeta, lo único que persigue es generar riqueza de forma sostenible sin agotar los recursos naturales y minimizando la huella medioambiental de nuestra generación, pensando en las generaciones venideras.
El 71% de las empresas encuestadas, cumplen con el uso racional de la energía y el agua; utilizan sistemas de iluminación inteligentes lo cual genera un significativo ahorro en el consumo de la energía eléctrica. El 16% está en vías de mejorar esto, para el empleo alternativo de nuevas fuentes de energía que reduzcan el impacto ambiental que produce las fuentes energéticas tradicionales, mientras que el 13% no cumple con la reglamentación pertinente, lo cual genera los problemas más comunes en cuanto al desperdicio de energía.
Por último, el 57% de las empresas encuestadas realizan proyectos ecológicos; los comunican a su personal y los involucran en el diseño, control y refinamiento de todos los productos y servicios desde un punto de vista ecológico (menos contaminación y menos residuos). Un 19% está creando técnicas de construcción ecológicas, el cual les permita evaluar el impacto ambiental que genera el tratamiento de residuos, así como el tratamiento y posterior comercialización con el fin de completar la cadena de reciclaje y el 24% no cumple con estos proyectos ecológicos
5. Conclusiones
La RSE parte de un compromiso voluntario de la empresa con el Estado, la comunidad, los empleados, el mercado y el medio ambiente. Esto le confiere un contexto de flexibilidad y ajuste a los factores relacionados con los intereses estratégicos de la organización. Por lo tanto, son las empresas las que deciden sobre los aspectos que consideran como socialmente responsables.
La dimensión ambiente laboral en las medianas empresas manifiesta contar con parámetros claros para la salud y seguridad en el trabajo, aplicación de medidas disciplinarias y remuneración; con el cumplimiento de normas legales y reglamentarias, que de no ser acatadas pueden generar demandas de tipo económico para la empresa. La ética empresarial, mostró un desempeño positivo, resaltar la influencia de los grupos de interés en el desempeño de las organizaciones. En ninguna de las empresas se encontró la RSE vinculada en la visión de la empresa.
La responsabilidad con el medio ambiente está asociada con la disposición de residuos, la prevención de la contaminación y el uso eficiente de la energía y el agua. Todo esto motivado por factores de tipo económico y social, que ayudan al control de los costos directos de la operación, tasa retributiva y sanciones. Este hallazgo promueve la realización de futuros trabajos dirigidos a implementar estrategias que realmente permitan realizar una gestión positiva con RSE, teniendo en cuenta que para los próximos años se convertirá en una estrategia de negocio.
Las prácticas de RSE hacen énfasis y giran alrededor de los empleados. Es decir, denotan un alto nivel de cumplimiento de las normas en el área laboral toda vez que mejoran las condiciones del trabajador proporcionándole un ambiente de trabajo sano, salario y horario justo, respeto por sus derechos humanos, entrenamiento y desarrollo profesional, pagos y beneficios acordes con su trabajo, igual oportunidad de trabajo para hombres, mujeres, discapacitados; respetando el cumplimiento de normas tributarias de la legislación laboral vigente, cuando existe personal capacitado en salud y seguridad.
Es importante tener claridad en el concepto de la RSE, pues este no debe ser confundido con la realización de obras de beneficencia, filantropía, o caridad. Estas tres actividades distan mucho de lo que significa ser socialmente responsable e implican acciones que no reflejan su verdadera esencia, prácticas que las medianas empresas están reconociendo en diferenciar y controlar para su beneficio y de la sociedad.
Los costos que implica la aplicación de prácticas de RSE para las medianas empresas, constituye una limitante, en ciertos casos, las cuales no cuentan con recursos suficientes para invertir en programas o implementar políticas de acción responsable. Esto también se refleja en la falta de recursos para campañas que difundan sus actividades y den reconocimiento a su labor. En ese sentido, existen gestiones administrativas responsables que no implican costo alguno para las empresas. Todo esto debe llevar a que la RSE se convierta en un modelo de gestión, que permita tomar decisiones efectivas sin perjudicar su entorno ni a la comunidad. Sin embargo, algunas organizaciones carecen del conocimiento necesario para implementar las prácticas de RSE como un elemento más de la gestión empresarial, por no estar alineado a la visión de las prácticas que subyacen a la variable de estudio.
Referencias Bibliográficas
Acción Empresarial (2002), Marketing responsable. Recuperado el 0409- 2014, de www.accionrse.cl: http://www.accionrse.cl/uploads/ files/Guia%20Marketing.pdf
Aguilar, Ignacio (2011), La ética empresarial. Portafolio.
Alea, Alina (2007), Responsabilidad social empresarial. Su contribucion con el desarrollo sostenible. Futuros, 1-15.
Barroso, Francisco ( 2008), La responsabilidad social empresarial. Un estudio en cuarenta empresas de la ciudad de Mérida, Yucatán. Contaduría y Admistración. Recuperado el 04- 06- 2018, de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S018610422008000300005&script=sci_ arttext&tlng=en
Camacho, Revilla y Gallego, Águeda (2007), La importancia de la ética en la venta desde el punto de vista del consumidor. Investigaciones Europeas de Dirección y Economía de la Empresa. Recuperado el 04- 06- 2018, de https:// www.econstor.eu/dspace/bitstream/10419/54424/1/663782295.pdf
Caravedo, Baltazar (2011), Desarrollo sostenible, etica, filantropía y responsabilidad social. En Vives, Antonio y Peinado-Vara, Estrella, La responsabilidad social de la empresa en america latina. Washington: BID.
Cuevas, Juan Carlos (2009), La disciplina en la empresa u organización. Recuperado el 04-09-2014, de www. psicologiayempresa.com: http://psicologiayempresa.com/la-disciplinaen-la-empresa-u-organizacion.html Frascarolo, Carlos (2008), Discriminación en materia laboral. Equipo Federal del trabajo(40).
Friedman, Miltón (1970). The social responsibility of business is to increase the profits. New.
Fundación PROHumana (2006), Manual de RSE para pymes. Santiago de Chile: Confederación de la producción y el comercio.
Gallego, Mery (2006), La responsabilidad social de las organizaciones: ¿factor de ventaja competitiva? ADminister, 106-123.
Harris, Howard (2004), Performance measurement for voluntary codes. Business and Society Review, 549-566.
Hernandez, Roberto. Fernández, Carlos & Baptista, María del Pilar (2014), Metodología de la investigación. México: Mc Graw Hill.
Instituto Uruguayo de Normas Técnicas (2010), ISO 26000:2010. Montevideo: UNIT.
Khadem, Riaz (2002), Alineación Total. Bogotá: Norma.
Lewitt, Theodore (1991), Reflexiones en torno a la gestión de empresas. Madrid, España: Diaz de Santos S.A.
Lopez, Guillermo. (s/f.), La responsabilidad social de las empresas y el clima laboral. Recuperado el 0408-2014, de www.juridicas.unam. mx: http://biblio.juridicas.unam.mx/ libros/5/2458/18.pdf
Lukangakye, Kitimbwa ( 2013), Vernos primero como personas. El Tiempo.
Méndez, Carlos Eduardo (2009), Metodología. México: Limusa.
Naranjo, Rodrigo. (2012), Proceso de selección y contratación de personal en las medianas empresas de la Ciudad de Barranquilla. Pensamiento & Gestión.
Navarro, Fernando (2008), Responsabilidad social corporativa: teoría y práctica. Madrid: ESIC.
Perdiguero, Tomas, y García, Andres (2005), La responsabilidad social de las empresas y los nuevos desafíos de la gestión empresarial. Valencia, España: PUV Publicaciones Universitat Do Valencia.
Robbins, Sthepen (2008), Administración. Madrid, España: McGraw Hill.
Schwalb, María (2011), La responsabilidad social de la empresa ante los consumidores. En A. &.-V. Vives, La responsabilidad social de la empresa en america latina. Washington: BID.
Sierra, Jorge Emilio (2010), Principios de Responsabilidad Social Empresarial. Bogotá: Panamericana formas e impresos S.A.
Toro, Ivan Darío. & Parra, Ruben Darío (2006), Método y conocimiento, metodologia de la investigación. Medellin: EAFIT.
Vives, Antonio & Peinado-Vara, Estrella (2011), La responsabilidad social de la empresa en Ámerica Latina. Nueva York: Banco Interamericano de Desarrollo.
Vives, Antonio, Corral, Antonio & Isusi, Iñigo (2005), Responsabilidad social de la empresa en las Pymes de Latinoamerica. Nueva York: Banco Interamericano de Desarrollo.
Notas
