INTERVENCIÓN COGNITIVO-CONDUCTUAL PARA EL MANEJO DE LA ANSIEDAD PRECOMPETITIVA EN NADADORES ADOLESCENTES
Cognitive behavioral intervention for the management of precompetitive anxiety with adolescent swimmers
INTERVENCIÓN COGNITIVO-CONDUCTUAL PARA EL MANEJO DE LA ANSIEDAD PRECOMPETITIVA EN NADADORES ADOLESCENTES
Enseñanza e Investigación en Psicología, vol. 21, núm. 1, pp. 1-8, 2016
Consejo Nacional para la Enseñanza en Investigación en Psicología A.C.
Recepción: 17 Octubre 2012
Aprobación: 23 Febrero 2013
Resumen: El propósito de la presente investigación fue evaluar la efectividad de una intervención cognitivo-conductual para el manejo de la ansiedad precompetitiva en nadadores adolescentes. Participaron 37 nadadores en edades de 11 a 16 años, pertenecientes al equipo de natación del Instituto Mexicano del Seguro Social en la ciudad de Morelia (México). Para cumplir con dicho objetivo se realizó una evaluación antes y después de la aplicación de la intervención, la que estuvo constituida por técnicas de autocontrol, exposición y relajación. Los instrumentos que se emplearon para evaluar la intervención fueron el Inventario de Ansiedad Competitiva en el Deporte, el Inventario de Ansiedad de Beck y la Escala de Afecto Positivo y Negativo. Los resultados mostraron que la intervención disminuyó la ansiedad precompetitiva de los nadadores adolescentes, lo que tiene importantes implicaciones para el quehacer del psicólogo deportivo a fin de que incluya técnicas cognitivo-conductuales que impacten en el rendimiento deportivo.
Palabras clave: Ansiedad precompetitiva, Intervención cognitivo-conductual, Nadadores adolescentes.
Abstract: The purpose of this investigation was to evaluate the effectiveness of a cognitive-behavioral intervention for the management of pre-competitive anxiety in adolescent swimmers. The sample included 37 swimmers ranging from 11 to 16 years old, and belonging to the swimming team of the Mexican Institute of Social Security in the city of Morelia, Mexico. To fulfill this objective, an evaluation was performed before and after the application of the intervention, which consisted of self-control techniques, exposure, and relaxation. The instruments used to evaluate the intervention were the Competitive Sport Anxiety Inventory, the Beck Anxiety Inventory, and the Scale of Positive and Negative Affect (PANAS). The results showed that the intervention reduced precompetitive anxiety in the adolescent swimmers. These results have important implications for the work of the sports psychologists in order to include cognitive behavioral techniques that impact on athletic performance.
Keywords: Precompetitive anxiety, Cognitivie-behavioral intervention, Adolescent swimmers.
INTRODUCCIÓN
El deporte es un contexto en el que frecuentemente los participantes experimentan una considerable ansiedad (Filaire, Sagnol, Ferrand, Maso y Lac, 2001; Jones y Hardy, 1990; Márquez, 2004), lo que puede provocar en ellos alteraciones del funcionamiento psicológico y fisiológico que se traducen en un pobre desempeño en la competencia, así como pensamientos negativos o disfuncionales, falta de concentración y otros síntomas fisiológicos, como tensión muscular, sudoración excesiva y demás. La preparación física del atleta, las presiones y expectativas de un buen desempeño, el ambiente del equipo, la relación con el entrenador, los problemas con personas significativas, la naturaleza del evento, la autoevaluación y la evaluación social son las fuentes principales de la ansiedad en el entorno deportivo y en la propia competencia (Mellalieu, Hanton y Fletcher, 2009). Ante tales situaciones, por consiguiente, los deportistas deben desarrollar un amplio rango de estrategias de afrontamiento (Márquez, 2006). La dificultad de contar con estrategias o técnicas adecuadas para afrontar una competencia puede provocar la llamada “ansiedad precompetitiva”. De ahí se deriva la importancia de la participación de un psicólogo deportivo y de la intervención psicológica apropiada para mejorar la ejecución deportiva del atleta.
La teoría multidimensional de la ansiedad precompetitiva (Martens, Vealey y Burton, 1990) contiene dos componentes fundamentales: la ansiedad cognitiva (pensamientos negativos, intranquilidad, sensación de inseguridad, expectativas negativas y pérdida de concentración) y ansiedad somática (aumento del nivel de activación de las funciones fisiológicas, nerviosismo y síntomas corporales tales como taquicardia, aumento de la sudoración, respiración rápida y superficial y aumento de la tensión muscular); además, considera un aspecto mediador en el proceso: la autoconfianza, que hace referencia a la creencia que tiene una persona de poder hacer aquello que quiere hacer.
En diferentes investigaciones se ha hallado que la ansiedad tiene un efecto negativo en el rendimiento deportivo en general, y en algunos casos (si es muy intensa) la ocurrencia de lesiones en los deportistas (Olmedilla, Andreu, Ortín y Blas, 2009). Por ejemplo, los nadadores que se encuentran en una constante comparación y evaluación por parte de sus entrenadores y padres, pueden sufrir emociones y sentimientos tan perturbadores como la ansiedad (Velásquez y Guillén, 2007). Grossbard, Smith, Smoll y Cumming (2009) indican que los principales motivos por los cuales los deportistas abandonan la natación son las presiones excesivas.
Un factor principal para un mal desempeño deportivo es, pues, la ansiedad precompetitiva, pero también se deben considerar otros factores, que van desde las cuestiones climatológicas, el tipo y duración de los entrenamientos, el desgaste físico y mental de los deportistas y la misma experiencia, ya que esta última puede ser un factor esencial en el desempeño y manejo de la ansiedad precompetitiva. Algunas de las técnicas que se han utilizado para el manejo de tal ansiedad y que han resultado efectivas son la imaginería psíquica, la relajación somática, el desarrollo de la autoeficacia (Márquez, 2006), el ensayo mental, la detención de pensamiento, la autocharla positiva (Thomas, Hanton y Maynard, 2007), la relajación somática (Miller,Vaughn y Miller, 1990) basada en la técnica de relajación muscular progresiva (Jacobson, 1938), la desensibilización sistémica en imaginación, la respiración diafragmática y el establecimiento de objetivos (Cantón, Checa y Ortín, 2009) y metas (Mamassis y Doganis, 2004).
Se ha documentado que la ansiedad precompetitiva aparece en deportistas de diferentes disciplinas, entre las cuales se halla la natación (Cantón et al., 2009; Grossbard et al., 2009; Hernández, Olmedilla y Ortega, 2008), la cual es un deporte en el que la competición se centra sobre todo en el tiempo. Evidentemente, la natación no es un deporte interactivo pero sí cooperativo en el que la solidaridad, la cohesión de grupo, el compañerismo y la aceptación de dicho grupo permiten que el deportista se sienta seguro y cómodo en su entrenamiento, siendo este aspecto una fuente adicional de apoyo o de ansiedad para el deportista (Velásquez y Guillén, 2007). Los nadadores son evaluados y comparados constantemente ya que la disciplina así lo requiere; gracias a ello, es posible saber si están llevando a cabo el entrenamiento apropiado para conseguir un buen desempeño en las competencias, todo lo cual genera ansiedad precompetitiva e influye en su actuación, bien sea en la forma en que aprecian su ejecución o en la manera como perciben su capacidad técnica, física o mental (Velásquez y Guillén, 2007).
Por lo anterior, el objetivo del presente trabajo fue evaluar la eficacia de una intervención cognitivo-conductual para el manejo de la ansiedad precompetitiva en nadadores adolescentes.
MÉTODO
Participantes
Participaron en el estudio 37 nadadores de edades de entre de 11 y 16 años, miembros del equipo de natación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de la ciudad de Morelia (México). Para conocer si había diferencias entre las variables medidas, se tomó en cuenta a los deportistas que tenían al menos una medida en el pretest y una en el postest, por lo cual el análisis final solo incluyó a 21 participantes.
Instrumentos
Inventario de Ansiedad Competitiva en el Deporte (Competitive Sport Anxiety Inventory, CSAI-2) (Martens et al. [1990], adaptado por Letelier [2007]). Es una prueba que evalúa el nivel de ansiedad cognitiva, ansiedad somática y autoconfianza. El cuestionario está formado por 27 ítems que se contestan según una escala tipo Likert con recorrido de 1 a 4 (1 = nada; 2 = algo; 3 = bastante; 4 = mucho) y que evalúan la ansiedad-estado cognitiva (9 ítems), la ansiedad estado somática (9 ítems) y la autoconfianza (9 ítems). Es uno de los instrumentos más utilizados en el campo de la psicología del deporte (cf. Cox, Martens y Russell, 2003) y se considera eficaz para la evaluación de la ansiedad-estado.
Inventario de Ansiedad de Beck (BAI) (versión estandarizada por Robles, Varela, Jurado y Páez, 2001). Consiste en 21 reactivos que determinan la severidad con que se presentan las categorías sintomáticas y conductuales. La evaluación de la severidad de los síntomas se hace mediante una escala de 0 a 3 puntos, en la que 0 indica la ausencia del síntoma y 3 la severidad máxima del mismo.
Escala de Afecto Positivo y Negativo (PANAS) (Watson, Clark y Tellegen [1988], adaptado por Robles y Páez [2003]). Consta de 20 reactivos, la mitad de los cuales evalúan el afecto positivo y el resto el negativo. Los reactivos consisten en palabras que describen diferentes sentimientos y emociones. La persona debe calificar estas frases según el grado en que las experimenta en una escala de cinco puntos, donde 1 significa muy poco o nada y 5 extremadamente. El afecto positivo (AP) refleja el punto hasta el cual una persona se siente entusiasta, activa, alerta, con energía y participación gratificante. El afecto negativo (AN) representa una dimensión general de distrés subjetivo y participación desagradable con estados emocionales aversivos, como disgusto, ira, culpa, miedo y nerviosismo. La distinción entre dichos tipos de afecto se considera uno de los pilares para la diferenciación entre ansiedad y depresión.
Procedimiento
Se aplicó la batería de pruebas en cuatro momentos distintos: dos antes de la intervención y dos después de la misma. Las cuatro aplicaciones se llevaron a cabo un día antes de la competencia (14 horas antes, aproximadamente). Después de ello, se aplicaron seis sesiones, así como una sesión extra a petición del entrenador del equipo de natación, a razón de una por semana y con una duración aproximada de una hora y media. En ellas, se les presentaban a los jóvenes nadadores temas relevantes y técnicas para el manejo de la ansiedad precompetitiva (Tabla 1).
RESULTADOS
Para cubrir los objetivos de este trabajo se realizaron pruebas t para detectar el efecto de la intervención y señalar si los grupos diferían en cada una de las variables medidas. Se presenta primero el análisis de las variables relacionadas con la ansiedad; es decir, si hubo diferencias significativas entre antes y después de la intervención en la ansiedad-estado y en las puntuaciones de ansiedad cognitiva, somática y autoconfianza obtenida con el CSAI-2. Los resultados señalan que la ansiedad disminuyó únicamente en dos de las subescalas: en la ansiedad cognitiva se encontraron diferencias (t[20] = 6.11, < 0.05) entre el pretest y el postest, y en la ansiedad somática (t[20] = 6.08, p < = 0.05], pero no en la ansiedad-estado (t[20] = .80, p < 0.05) ni en autoconfianza (t[20] = 1.82, p < 0.05). Una representación gráfica de la media de las puntuaciones en estas variables se muestra en la Figura 1.
El segundo análisis se realizó con las variables que miden el afecto (PANAS). En dicho análisis no se encontraron diferencias significativas en ninguna de las variables. Las variables analizadas fueron, a saber: afecto positivo en la última semana [t(20) = –2.31, p > 0.05], afecto negativo en la última semana (t[20] = 1.27, p > 0.05), afecto positivo general (t[20] = –1.78, p > 0.05) y afecto negativo general (t[20] = .63, p > 0.05). La media de las variables obtenidas antes y después de la intervención se muestra en la Figura 2.
DISCUSIÓN
El objetivo de la presente investigación fue evaluar la eficacia de una intervención cognitivo-conductual para el manejo de la ansiedad precompetitiva en nadadores adolescentes. Los resultados indican que la intervención resultó eficaz ya que tuvo impacto en dos de las variables relacionadas con la ansiedad precompetitiva: la ansiedad cognitiva y la ansiedad somática.
Los jóvenes deportistas –especialmente aquellos que participan constantemente en competencias– deben ser instruidos por el psicólogo deportivo para que adquieran y desarrollen estrategias para afrontar la ansiedad precompetitiva y así desarrollen sus habilidades competitivas para mejorar el rendimiento.
Diversas investigaciones (Cantón et al., 2009; Mamassis y Doganis, 2004; Márquez, 2006; Ryska, 1998) han utilizado diversas técnicas y dinámicas para el control de la ansiedad precompetitiva, algunas de las cuales fueron instrumentadas en la presente intervención, como la técnica de relajación somática (Miller et al., 1990), respiración diafragmática (O’Donohue et al., 2003), imaginería mental (Mahoney et al., 1987; Rushall, 1989), establecimiento de objetivos (Labrador, 2008), por mencionar algunas. En cuanto a las técnicas y dinámicas utilizadas, cada una de ellas fue de gran utilidad y todas resultaron de gran interés para los nadadores. Entre las primeras cuatro que demostraron tener efectos más sobresalientes se encuentran el análisis funcional y solución de problemas, seguida por el establecimiento de objetivos y organización de tiempo; después, la sesión extra en la que establecieron sus objetivos de manera adecuada, y por último la técnica de exposición. Las técnicas de relajación somática, respiración diafragmática, imaginería mental y autorregistro no fueron menos importantes; de hecho, todas las técnicas fueron de interés ya que habían empleado pocas de ellas, en tanto que a otras las consideraron prácticas; es decir, los mismos participantes las llevaron a cabo durante los momentos de ansiedad previos a la competencia. En sí, todas ellas tuvieron un considerable impacto y utilidad para controlar la ansiedad precompetitiva.
En la intervención se identificaron diversas ventajas para los nadadores ya que conocieron y aplicaron técnicas con las que obtuvieron un mejor desempeño en las competencias, pero al mismo tiempo se vieron beneficiados en su vida cotidiana. Se considera como una ventaja que los participantes tuvieran un día en su semana de entrenamiento para la intervención psicológica, con lo que salían de la rutina, sin estrés, y ampliaban su panorama acerca de otros métodos que facilitaran su rendimiento deportivo. Dentro de las sesiones también se dio la oportunidad de que expresaran sus inconformidades, dudas e inquietudes, lo que mejoró la convivencia entre los miembros del equipo.
La disposición de los participantes a trabajar durante las sesiones se debió a la necesidad de trabajar en el área psicológica, toda vez que consideraban que bastaba solamente un entrenamiento físico constante para obtener un buen desempeño en la competencia. Durante la intervención, los participantes conocieron que todas aquellas sensaciones previas a ese momento, las cuales no podían controlar y se interponían en su rendimiento, tenían un nombre: ansiedad precompetitiva, y también que se podía trabajar para controlarla mediante un manejo específico y con el entrenamiento diario.
Los deportistas se encuentran en constante presión (antes, durante y después de la competencia). Durante el entrenamiento, la ansiedad precompetitiva está presente, aunque no es tan severa como minutos antes de la competencia; el solo hecho de ver a sus contrincantes, padres, entrenadores o a ellos mismos cuando no llegan a cumplir con el objetivo deseado, genera un alto grado de ansiedad precompetitiva. Los jóvenes nadadores tienen que llevar a cabo varias actividades que rebasan las meramente deportivas, las cuales también interfieren con la concentración y el rendimiento total dentro de su entrenamiento. Es por ello de suma importancia tratar la ansiedad precompetitiva para que el deportista logre un desarrollo físico y psicológico óptimo.
Aprender a afrontar y controlar la ansiedad antes de la competencia ayuda a los deportistas a proyectar seguridad ante los adversarios, dejar atrás los errores, aprovechar oportunidades, incrementar la concentración en la prueba, prestar atención a la información relevante y tomar decisiones en función de esa información. Además, obtener un buen desempeño depende mucho del buen trabajo en equipo y con las personas de su alrededor.
Uno de los aspectos que obstaculizaron la instrumentación de la investigación fue el espacio en el que se llevaron a cabo las sesiones de la intervención; de hecho, los factores climáticos interferían en su realización, así como también el mobiliario y el ruido, lo que interfería en la concentración de los deportistas; por último, la ausencia constante de los participantes, tanto en la aplicación de la batería de pruebas como durante la intervención, debida a la decisión inesperada del entrenador. Cabe recordar que los participantes debían contestar la batería de pruebas en cuatro momentos diferentes: dos antes de la intervención y dos después de la misma; de ellas, solamente ocho participantes respondieron las mencionadas en los cuatro momentos requeridos, doce en tres ocasiones, dos en solo dos ocasiones, y quince únicamente en una.
Respecto a la intervención en general, en total se llevaron a cabo siete sesiones: seis dentro de la planeación y una extra solicitada por el entrenador del equipo de natación. Únicamente tres participantes estuvieron presentes en todas las sesiones (ocho en seis sesiones, siete en cinco, uno en cuatro, ocho en tres, cinco en dos y cuatro en una). Esto se debe a que parte de los integrantes del equipo debieron realizar su entrenamiento de rutina en otro lugar y con otro entrenador asignado durante cierto tiempo (por acuerdo entre ambos entrenadores), si bien posteriormente volvieron a trabajar con su antiguo entrenador. También cabe mencionar que en ese periodo varios miembros del equipo finalizaron sus actividades en esta institución para pertenecer a otro grupo de natación. Por otro lado, ingresaron nuevos integrantes al equipo del IMSS.
Cada una de las sesiones instrumentadas se estableció acorde con la planeación derivada de la teoría y con base en las necesidades del grupo, sin desviarse del objetivo inicial, teniendo como resultado un grupo con conocimientos básicos de las técnicas para el manejo de la ansiedad, tanto teóricos como prácticos. Al mismo tiempo, con el trascurso de las sesiones se logró un grupo mucho más participativo, menos apático y mucho más unido. Cabe señalar que la institución a la cual representaban los deportistas que participaron en la intervención solo les otorga, como único apoyo, las instalaciones y un entrenador para sus rutinas de entrenamiento. El objetivo de la selección de natación fue que sus jóvenes siguieran practicando el deporte, participando en las competencias y que fuesen competidores de elite, avalados por su experiencia y trayectoria. Algunos habían entrenado por ocho años perteneciendo a la institución y con un solo cambio de entrenador, por lo cual se consideró al conjunto como un equipo estable y constante.
Sin embargo, se pudo detectar durante la aplicación de la intervención ciertos problemas que pudieron afectar no solo a los nadadores sino también a aquellas personas que participaban apoyando a los jóvenes deportistas, como los padres de familia. Uno de tales problemas fue la relación entre estos y el entrenador; algunos padres de familia intervenían considerablemente en las indicaciones que daba aquél a los jóvenes para su mejor desempeño durante la competencia, lo que generaba confusión e incomodidad a los nadadores y molestia en el entrenador, quien sentía que eso le restaba autoridad.
Lo que se considera que no se obtuvo fue la constancia por parte de los participantes en el periodo de aplicación de pruebas y durante la intervención. Para mejorar la dinámica de la intervención es necesario contar con las instalaciones adecuadas y el mobiliario apropiado en cada una de las sesiones planeadas. Asimismo, trabajar con los deportistas de manera grupal e individual, según las necesidades específicas de cada uno. En cuanto a la frecuencia de las sesiones, una vez por semana y durante una hora es la adecuada ya que así no se perjudica su entrenamiento.
A partir de esta investigación surgen propuestas para futuros estudios, como la utilización de la técnica de autorregistro durante toda la intervención; la asistencia del psicólogo a las competencias para que apoye a los deportistas en el manejo de la ansiedad en momentos previos a la competencia; el empleo de todos los recursos necesarios lo más cercanamente a la realidad, y el trabajo con los padres de familia para atender los problemas presentados, como la relación entre ellos con los nadadores y con el entrenador, y que al mismo tiempo conozcan la psicología del deporte, los temas que abarca y los beneficios que aporta al ser parte del propio entrenamiento. En efecto, si bien la psicología del deporte es un campo estudiado e investigado, está poco trabajado, es escasamente conocido y se le considera como irrelevante en el entrenamiento de un deportista. La falta de conocimiento acerca del desempeño del psicólogo deportivo crea la idea errónea de que solo el entrenamiento físico, técnico y táctico es necesario para un buen rendimiento y un buen desempeño dentro de una competencia. Además, el empleo de instrumentos validados en diversos contextos (Craft, Magyar, Becker y Feltz, 2003; Mamassis y Doganis, 2004; Nicholls, Polman y Levy, 2010), y especialmente en el campo en el que se llevó a cabo la intervención, ha mostrado que existe una relación entre el manejo de la ansiedad previa a la competición y la ejecución en los deportistas de alto rendimiento (Cantón et al., 2009; Hatzigeorgiadis y Chroni, 2007; Jones y Hanton, 2001; Page, 1999).
Lo más relevante de la presente investigación es que a pesar de las dificultades climáticas, instalaciones, mobiliario y falta de constancia por parte de los participantes por decisión del entrenador, fue posible instrumentar la intervención, desarrollarla y cumplir con el objetivo principal.
Referencias
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