In memoriam

Recepción: 23 Septiembre 2024
Aprobación: 24 Septiembre 2024
DOI: https://doi.org/10.36446/af.e1128
Resumen: In memoriam. Graciela De Pierris
Palabras clave: Graciela De Pierris.
.
Vivimos en ciudades distintas, separadas por 60 km (La Plata - Buenos Aires), hicimos nuestras carreras de grado en universidades distintas (Universidad Nacional de La Plata - Universidad de Buenos Aires) y nos separaban, además, experiencias vitales distintas: Graciela era 9 años más joven. Fueron Gladys Palau y Ricardo Gómez, que desempeñaban tareas filosóficas docentes en La Plata —quienes, además, habían interactuado con los filósofos porteños involucrados en un mismo modo de hacer filosofía ya desde antes del desmantelamiento de las universidades en 1966—, fueron ellos quienes generaron en 1970 un espacio institucional formal en la Universidad Nacional de La Plata. Allí conocí a Graciela De Pierris.
El escenario fue el de los seminarios del doctorado con orientación en lógica y filosofía de la ciencia que se dictaron allí entre 1970 y 1974. Esas reuniones académicas convocaron a algunos filósofos como docentes y a otros como futuros doctores; nosotras entre estos últimos.
Con Graciela cursamos juntas todos los seminarios; leímos y estudiamos todos los textos de esos programas y también juntas, en 1971, tuvimos la responsabilidad de presentar ante nuestros compañeros La estructura de las revoluciones científicas de T. S. Kuhn, cuya fotocopia del original había traído Coffa. Durante varias semanas leímos y analizamos una obra que habría de instalar un nuevo marco conceptual para el análisis filosófico de la práctica y los resultados científicos. Ese libro fue la pieza central del seminario “Conocimiento y realidad en la filosofía de la ciencia contemporánea” que dictó Alberto Coffa entre mayo y septiembre de 1971 (Alberto ya había emigrado y nos visitaba en esa ocasión). Esa obra suscitó fuertes debates entre los asistentes familiarizados con la tradición de la filosofía de la ciencia que había dominado durante el siglo XX hasta ese momento.
Esos años de sistemáticas reuniones filosóficas sirvieron para consolidar las relaciones entre filósofos comprometidos con una forma y estilo de practicar la filosofía que habría de dar lugar a la gestación, fundación y posterior consolidación de un espacio social: la Sociedad Argentina de Análisis Filosófico (SADAF), cuyos objetivos aparecen formulados en el acta fundacional del 8 de abril de 1972.
Graciela acompañó desde la primera hora este proyecto, aun cuando emigró definitivamente en 1975 hacia Estados Unidos para culminar su doctorado en 1983. Este compromiso institucional con SADAF se puso de manifiesto no solo en su condición de asociada sino también en las visitas sistemáticas a la Argentina que tenían un alto en SADAF. Son muchísimas las reuniones y conferencias que mantuvimos con ella en nuestra institución y así fuimos conociendo sus investigaciones acerca de temas y argumentos de filósofos de la modernidad que habrían de ser publicados en artículos y libros. Sus intereses giraron en torno de “tópicos históricos en epistemología, especialmente Hume, Kant, Frege, Wittgenstein y Quine; el escepticismo y el naturalismo; la filosofía moderna temprana y la historia de la filosofía analítica”, como ella misma consignó en su curriculum vitae.
Su participación institucional se inscribe además como miembro asociado en Análisis Filosófico. En muchas ocasiones manifestó su preocupación por que la revista estuviera presente en las bibliotecas de las instituciones universitarias con las que estuvo vinculada. Quería que lo aquí se hacía filosóficamente trascendiera los límites de nuestro entorno nacional.
Ambas solo pudimos emocionarnos y recordar anécdotas, junto con sus acompañantes, su esposo Michael Friedman y los filósofos Charles Parsons y Dagmar Follesdahl, cuando nos encontramos el 15 de agosto de 2019 en el Centro de información del Parque Nacional Jostedalsbreen (Noruega). Durante el breve lapso de aquel encuentro recordamos con afecto y simpatía a aquellos filósofos argentinos sadafianos que ya no estaban con nosotros y de cuya amistad habíamos disfrutado. Ese encuentro fue absolutamente casual. Hoy me conmueve muy especialmente evocarlo.
Lamentablemente nuestros frecuentes, ricos e interesantes intercambios acerca de objetivos y prácticas profesionales de los que tanto disfrutamos ya no podrán darse.
Graciela De Pierris falleció en San Francisco (EEUU) el 20 de agosto pasado.
Referencias
González, M. C. (2025). Graciela De Pierris: In memoriam. Análisis Filosófico, 44(2), 363-364. https://doi.org/10.36446/af.e1128
Información adicional
redalyc-journal-id: 3400