Reseña
Ciudades inimaginables. El imaginario hegemónico tras la globalización (Adolfo B. Narváez Tijerina, 2015)
Ciudades inimaginables. El imaginario hegemónico tras la globalización (Adolfo B. Narváez Tijerina, 2015)
Contexto. Revista de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Nuevo León, vol. XII, núm. 17, pp. 125-127, 2018
Universidad Autónoma de Nuevo León
![]() | Narváez Tijerina Adolfo B. Ciudades inimaginables. El Imaginario Hegemónico tras la Globalización. 2015. México-España. Universidad Autónoma de Nuevo León, Universidad Politécnica de Cataluña. ISBN 978-607-433-869-0 |
---|
Recepción: 01 Marzo 2018
Aprobación: 01 Septiembre 2018
“La importancia de lo imaginario crece en la medida en que nos percatamos de que el andamiaje de nuestra experiencia vital total está casi absolutamente condicionado por la concepción de mundo, que colectivamente hemos edificado a través de miles de años de coexistencia” (Narváez, 2015: 21).
El libro “Ciudades inimaginables. El imaginario hegemónico tras la Globalización” es obra del Dr. Adolfo B Narváez, la cual se une a su amplia producción académica relacionada al estudio de imaginarios urbanos. “Ciudades Inimaginables…”, junto a obras como “Lo Imaginario y sus Morfógenos”(2015) y “Lo imaginario. Seis aproximaciones” (Fitch, Narváez y Vázquez, 2015), entre otros libros y publicaciones, arman un amplio análisis sobre lo imaginario y su rol en la creación de nuestro entorno urbano. El Dr. Narváez es profesor investigador de la Universidad Autónoma de Nuevo León dentro de la Facultad de Arquitectura en donde concentra su trabajo académico en estudios sobre antropología del diseño e imaginarios urbanos y forma parte del cuerpo académico sobre Estudios sobre Diseño.
Narváez, en “Ciudades inimaginables. El Imaginario Hegemónico tras la Globalización”, se aproxima al estudio del imaginario hegemónico que moldea nuestro territorio urbano en nuestro contexto actual; un contexto que es globalizado, interconectado, en el que las ciudades se configuran en red. Los imaginarios, como Narváez ya lo ha expuesto en otras obras, están fundados en lo que se conoce como mitos. Tales mitos pueden ser entendidos como grandes estructuras de cultura que otorgan certeza de lo que, de cualquier otra forma, podría ser entendido como desordenado o sinsentido en nuestro mundo material. Narváez identifica el mito seminal que se ve al centro de los imaginarios urbanos: “El mito que funda a Occidente puede ser reducido en última instancia a esto: Europa como el destino manifiesto de todas las formas de civilización. Europa como una luminosa y bella verdad. A esta manera de concebir la historia, las artes, las ciencias, las técnicas; los historiadores le han dado un nombre propio: Eurocentrismo” (Narváez, 2015: 23).
Narváez nos lleva con él en su recorrido cotidiano haciendo sus observaciones puntuales y precisas de formas urbanas y experiencias personales que, al enfocar la mirada y el análisis, nos ayudan a adentrarnos en el análisis de lo que se entiende como “la emergente civilización global” (Narváez, 2015: 27), la cual tiene como núcleo el eurocentrismo. Las vivencias personales y el íntimo vínculo que éstas tienen con nuestro entorno y sus orígenes hacen que la lectura de la obra simule ir haciendo el análisis y recorrido crítico de lado de Narváez; viendo lo que él ve, vislumbrando lo que hay más allá de lo material, de lo individual y etéreo de la cotidianidad.
En el Capítulo 1, “Las Ciudades Red y Lo Imaginario”, hacemos junto al autor un recorrido por Roma y una reflexión de su expansión y asentamiento en el territorio. Narváez hace alusión a la red viaria de los romanos y cómo es que esta infraestructura que funciona como elemento vinculante ha derivado en coherencia e interconexión en los sistemas urbanos que observamos en la actualidad. La ciudad red surge de esta idea, de la evolución de modos económicos, políticos y sociales que en Europa Central iniciaron a partir de formas particulares de comerciar, transitar, migrar e interconectarse con su entorno. Es ahí donde Narváez trabaja la idea de que la manera en la que nuestras ciudades red – globalmente- se despliegan, se entienden e interconectan está íntimamente vinculada con el mito del Eurocentrismo.
El análisis del eurocentrismo hace alusión a cómo éste está al centro del las nuevas formas urbanas y cómo estas formas terminan administradas como lugares de exclusión, “que alimentan unas formas de concebir la vida, basadas en la acumulación de la riqueza por unos cuantos y por la explotación de las mayorías. Al amparo de políticas que cada vez más enérgicamente aíslan a las clases económica y políticamente poderosas, con respecto a las mayorías; constituyendo un cada vez más impenetrable núcleo de dominio y control.” (Narváez, 2015: 27). Esta rica discusión es en la que se extiende Narváez; su hipótesis central es que estas formas de crear espacios urbanos paradójicamente resultan en ciudades tan complejas y extensas que resultan inimaginables para los habitantes; se trata de “demostrar que estas ciudades son el resultado final del imaginario eurocéntrico, en su implacable paso hacia el control de todos los escenarios de la vida” (Narváez, 2015: 28).
Es justo esta parte central del trabajo de Narváez que resulta muy efectivo en ir más allá del entendimiento de las representaciones del poder en la sociedad y lo urbano. Al hacer énfasis en el análisis de la ciudad red basada en el mito del eurocentrismo, Narváez enriquece una discusión crítica para entender la estructura de poder global, reflejado en lo urbano. Él en Ciudades Inimaginables hace un repaso sobre la complicada y extensa discusión sobre poder y eurocentrismo. Tal discusión la veo como intrínsecamente ligada a los estudios sobre Colonialidad del Poder, dentro de los cuales colonialidad se identifica como el conjunto de patrones de poder de larga duración que emergieron con el colonialismo pero definen la cultura, las relaciones intersubjetivas, la distribución del trabajo y la producción de conocimientos más allá de los estrictos límites de las administraciones coloniales (Quijano, 1992).
Hay estudios que profundizan en las dimensiones arquitectónica, urbana y territorial de la hegemonía occidental eurocentrista desde los estudios decoloniales y de colonialidad del poder en América Latina. De entre estos estudios surge el concepto de “colonialidad territorial” formulado por Farrés y Matarán (2012; 2014), que alude al conjunto de patrones de poder que sirven en la práctica territorial para establecer hegemónicamente una concepción del territorio sobre otras, que resultan ‘inferiorizadas’ y que están íntimamente ligados a las estructuras de poder que son legado colonial de Europa.
Me parece que el análisis de Narváez extiende las dimensiones del análisis del eurocentrismo y su impacto en lo urbano al adentrarse al estudio de los imaginarios urbanos y las ciudades red. En el capítulo tres se hace aborda cómo es que el mito eurocentrista deriva en la evolución de lo que se entiende como “ecumenópolis”, es decir, “el resultado de la agregación de pequeñas células debidamente planeadas para que cumplieran con las demandas económicas, sociales, políticas, técnicas, culturales y estéticas. Células ordenadas internamente en forma multidimensional, que al agregarse generaran un nivel superior de organización igualmente satisfactorio para el desarrollo de la vida humana” (Narváez, 2015: 140).
En el capítulo cuarto es donde se hace una exploración a fondo sobre los imaginarios de las ciudades red. Este análisis, un análisis de imaginarios un estudio paralelo sobre los procesos de evolución del mito eurocéntrico y las imágenes dominantes que surgen de él, hace evidente las múltiples dimensiones que crean nuestro entorno urbano. Tomando como base Norteamérica, Narváez hace una revisión sobre la concepción del Este estadounidense, el mito eurocentrista y cómo éste moldeó la evolución de la ciudad norteamericana/ ciudad red.
Al final, en el quinto capítulo, tenemos un acercamiento a dos estudios de caso en localidades muy diferentes pero que Narváez encuentra rasgos en ellas que demuestran que en efecto están inmersas en un contexto global. Los casos abordados son (1) la zona transfronteriza del Río Bravo en México-Estados Unidos (lo que incluye Reynosa-McAllen y Matamoros-Brownsville) y (2) la zona transfronteriza de Alemania y Holanda en la zona de Norte-Westfalia.
El análisis que nos presenta Narváez resulta imprescindible para todo aquel que quiera profundizar y repensar la creación de ciudades y espacios. Tomar en cuenta y poner al centro a los imaginarios urbanos permite elucidar la evolución y construcción urbana de una manera más compleja y completa. El autor nos lleva por un densa reflexión intelectual sobre la relevancia de los mitos en los imaginarios urbanos y su impacto territorial en nuestro contexto actual.
Referencias
Farrés, Y. y Matarán, A. (2012) “Colonialidad territorial: para analizar a Foucault en el marco de la desterritorialización de la metrópoli. Notas desde La Habana”. Tabula rasa 16. 139-159. Impreso.
Farrés, Y. y Matarán, A. (2014) Hacia una teoría urbana transmoderna y decolonial: una introducción. Polis 13.37 339-361. Impreso
Quijano, A. (1992) Colonialidad y modernidad/racionalidad en Perú Indígena, vol. 13, no. 29.
Narváez Tijerina, A.B. (2015) Lo Imaginario y sus Morfógenos. Monterrey, N.L., Universidad Autónoma de Nuevo León – Tilde Editores ISBN 978-607-9418-04-5