Resumen: Hoy, contrariamente a los agudos procesos de urbanización e industrialización de la producción primaria como la agricultura, todavía existen extensas regiones del mundo, especialmente en las zonas tropicales, donde muchas comunidades tradicionales continúan realizando prácticas agroecológicas, que certifican un uso prudente de la biodiversidad en cada uno de los ecosistemas. A pesar de esta disyuntiva, existen comunidades que realizan acciones que tributan a un mejor desarrollo local, en lo cual la agricultura ecológica ha desempeñado un papel importante. Cuba apuesta desde un Plan Nacional de Desarrollo Económico-Social hasta 2030 y en su Constitución, por una concepción integradora de objetivos económicos, sociales, políticos y culturales, dirigida a promover el desarrollo integral y pleno de los seres humanos a nivel local. La investigación propone un procedimiento para la formulación de estrategias de Desarrollo Local, para el diseño de lineamientos estratégicos de desarrollo aplicables a un territorio, en función de fomentar las tradiciones campesinas agroecológicas para la agricultura. El procedimiento recorre las etapas del proceso, la identificación de las potencialidades y debilidades de los territorios; la asignación de objetivos estratégicos y específicos; y la recomendación de acciones específicas, en la forma de proyectos y/o políticas que permitan implementarlo.
Palabras clave: desarrollo local, formulación de estrategias, tradiciones campesinas agroecológicas.
Abstract: Today, contrary to the acute processes of urbanization and industrialization of primary production such as agriculture, there are still extensive regions of the world, especially in tropical areas, where many traditional communities continue to carry out agro ecological practices, which certify a prudent use of biodiversity in each of the ecosystems. Despite this dilemma, there are communities that carry out actions that contribute to better local development, in which organic farming has played an important role. Cuba bets from the National Plan for Economic-Social Development until 2030 and in its Constitution for an integrating conception of economic, social, political and cultural objectives, aimed at promoting the integral and full development of human beings at the local level. The research proposes a procedure for the formulation of Local Development strategies, for the design of strategic development guidelines applicable to a territory, in order to promote agro-ecological peasant traditions for agriculture. The procedure goes through the stages of the process, identifying the potentialities and weaknesses of the territories; the assignment of strategic and specific objectives; and the recommendation of specific actions, in the form of projects and / or policies that allow it to be implemented.
Keywords: local development, strategy formulation, agro-ecological peasant traditions.
Contribución al impulso de tradiciones campesinas agroecológicas, una visión desde lo Local, Jagüey Grande, Matanzas
Contribution to the promotion of agro-ecological peasant traditions, a vision from the Local, Jagüey Grande, Matanzas
Recepción: 09 Noviembre 2021
Aprobación: 17 Marzo 2022
El escenario mundial actual antepone a todos los cubanos, una crisis económica que unido al cruel Bloqueo Económico aplicado por el Gobierno de los Estados Unidos obliga a buscar cada vez más alternativas de desarrollo económico y social. Cuando se hace un análisis del contexto económico internacional, son los países subdesarrollados los más urgidos de soluciones efectivas a los problemas del desarrollo territorial. En ellos, durante años, se viene reproduciendo y acentuando el desequilibrio, la deformación estructural y la dependencia, que garantizan el desarrollo de un número reducido de países. A esto habría que incorporar hoy los efectos del proceso de globalización y del proyecto político neoliberal, el cual ha redefinido el papel de muchas economías subdesarrolladas y de sus territorios en un contexto capitalista.
Muchos han sido los estudios desarrollados en las últimas tres décadas, tanto en el plano teórico como práctico, acerca del desarrollo territorial en condiciones de globalización: Alonso (2012); Alonso y Bell (2013); Tabares (2017); Fonseca y Vega (2018); Miranda (2019); Martínez et al. (2020); pero ninguno constituye una receta única pues cada territorio es diferente: potencial endógeno, agentes de cambio y en la forma de gestión. Por lo que se define como un proceso esencialmente endógeno, participativo, innovador y de articulación de intereses entre actores, territorios y escalas (municipal, provincial y sectorial/nacional). Se sustenta en el liderazgo de los gobiernos municipales y provinciales para la gestión de sus estrategias de desarrollo dirigidas, desde la gestión del conocimiento y la innovación, al fomento de proyectos que generen transformaciones económico-productivas, socioculturales, ambientales e institucionales, con el objetivo de elevar la calidad de vida de la población.
El desarrollo local ha alcanzado un espacio importante en varios países como complemento a sus estrategias nacionales. En el contexto cubano, el proceso de actualización del modelo económico y social requiere impulsar el desarrollo de los territorios a partir de la estrategia del país. Solo a partir de alcanzar ese desarrollo se fortalecerán los municipios como instancia fundamental, con la autonomía necesaria, sustentables, con una sólida base económico – productiva, sociocultural, institucional y medioambiental.
A partir del planteamiento anterior, se requiere de instrumentos de toma de decisiones a escala territorial más eficientes, eficaces y participativos.
Los instrumentos que se utilicen para tal fin, deben tener como referente la política para impulsar el desarrollo territorial (MEP, 2020), el Lineamiento 17 de la política económica y social del partido y la revolución para el período 2016 – 2021 (PCC, 2017), el artículo 168 de la Constitución de la República de Cuba y el plan de desarrollo económico y social hasta 2030, donde se fijan los ejes:
Gobierno socialista, eficaz, eficiente y de integración social.
Transformación productiva e inserción internacional.
Infraestructura
Potencial humano, ciencia, tecnología e innovación.
Recursos naturales y medio ambiente.
Desarrollo humano, equidad y justicia social, según Plan de desarrollo económico y social hasta 2030: propuesta de visión de la nación, ejes y sectores estratégicos (PCC, 2017, p.18)
En correspondencia con lo anterior, justamente una de las prioridades a nivel de país para la actualización del modelo económico lo constituye la investigación para la producción de alimentos, de forma tal que visualiza que cada municipio logre satisfacer las necesidades de sus pobladores. Un ente imprescindible en ello lo constituye el sector campesino quien desde sus tradiciones agroecológicas provee a sus coterráneos de alimentos sanos, que logra mediante sus cultivos de forma tradicional y ecológica, reducir de forma significativa el impacto medioambiental que provoca el paradigma convencional.
Las prácticas agroecológicas, son estudiadas a través de la Agroecología, ciencia que según Sevilla (2011), puede ser definida como el manejo ecológico de los recursos naturales, a través de formas de acción social con propuestas participativas, que contribuyan a encarar el deterioro ecológico y social generado por el neoliberalismo actual. Autores como Núnez (1987); Caporal (1998, 2009); Altieri (1999); Altieri y Nicholls (2000); Sevilla (2011); Casimiro (2016); Martínez et al. (2020); plantean que estas prácticas tienen una naturaleza sistémica, al considerar la finca, la organización comunitaria, y el resto de los marcos de relación de las sociedades rurales. Todo ello debe estar articulado en torno a la dimensión local, donde se encuentran los sistemas de conocimiento (local, campesino y/o indígena) portadores del potencial endógeno que permite potenciar la biodiversidad ecológica y sociocultural.
Para realizar tal tarea, la Agroecología introduce, junto al conocimiento científico, otras formas de conocimiento, por consiguiente, desarrolla una crítica al pensamiento científico para desde él, generar un enfoque pluriepistemológico que acepte la biodiversidad sociocultural. La evidencia empírica obtenida durante las cuatro últimas décadas desde la Agroecología ha demostrado que el conocimiento acumulado sobre los agroecosistemas en el pasado, puede aportar soluciones específicas en cada lugar para resolver los problemas sociales y medioambientales (Guzmán, González & Sevilla, 2000; Sevilla, 2011; Mier y Terán et al., 2021). La agroecología, según Funes citado en Puig (2021), no está reñida con la mecanización, ni con la utilización de nuevas prácticas y métodos que van emergiendo, como los sistemas más eficientes del uso del agua, sino que está reñida con el mal uso de la tecnología, con la degradación del medio ambiente y con los riesgos que traen nuevas tecnologías que imponen nuevos retos para transformar el medio rural.
En virtud de lo anterior y retomando algunos de los mencionados ejes, el correspondiente a potencial humano, ciencia, tecnología e innovación y el de desarrollo humano, equidad y justicia social, según las autoras requieren trabajar sobre la base de estimular y perfeccionar esta gestión de manera constante, de modo que se fomente un gobierno ávido de poner en práctica sus ideas. Los actores locales deben tener disposición, tiempo y capacidad para conformar un proyecto local que absorba tecnología y conocimiento en función de la experiencia participativa.
Por su parte, Guzón (2011, 2020) entiende que el aprovechamiento de la experiencia participativa local acumulada en el proceso revolucionario cubano, constituye punto de partida para activar las potencialidades de las comunidades en los desarrollos municipales, de cara a las actuales circunstancias, que propicie las capacidades de autogestión y planificación desde la base.
“Sin embargo, no siempre los agentes de cambio tienen la preparación suficiente para desarrollar estos procesos de formulación de objetivos y estrategias para impulsar el desarrollo de las localidades” (León 2019, p. 58). Para ello la universidad como potencial científico e innovador se ha dado la tarea de llevar adelante el desarrollo científico técnico articulado al desarrollo local territorial elaborando modelos, procedimientos, herramientas y proyectos, con el objetivo de facilitar tan abarcador proceso.
Para definir una estrategia, deben identificarse los pilares que posibilitan determinar cada paso de manera objetiva, sobre la base de un fundamento científico que refleje las propiedades, relaciones y dinámica del objeto estudiado.
Por ello las autoras asienten que, la estrategia de desarrollo local, tiene que ser concebida como un proceso de construcción permanente, sustentado en el desarrollo de relaciones sociales, colectivas y solidarias que promuevan la generación y movilización de recursos propios, de forma real y eficiente, para dar respuesta a las necesidades identificadas. Por otro lado debe ser considerada como un instrumento integrador, que contribuye a orientar la gestión del gobierno municipal en función de las prioridades definidas a partir de los intereses nacionales y territoriales. Desde su diseño y gestión articula los diagnósticos y proyecciones que se definan por otros instrumentos de planificación, fundamentalmente por el plan de ordenamiento territorial y urbano (Huertas et al., 2020).
Es por todo lo anteriormente expuesto que la investigación tiene como objetivo proponer un procedimiento que facilita la elaboración de la estrategia de desarrollo local con un enfoque en función de las tradiciones campesinas agroecológicas en el municipio de Jagüey Grande en la provincia de Matanzas.
Características del área de estudio:
El municipio de Jagüey Grande fue fundado el 25 de junio del año 1857, se encuentra ubicado en la parte centro sur de la provincia de Matanzas. Cuenta con una superficie total de 88 186 km.2 (88 186 ha), por su extensión territorial ocupa el cuarto lugar a nivel provincial. La división política administrativa del municipio está estructurada en seis zonas de defensa coincidiendo con los seis consejos populares, Agramonte, Jagüey Norte, Jagüey Sur, Australia, Torriente y San José de Marcos. Aproximadamente el 80,5 % de las tierras del territorio están ocupada por empresas estatales y unidades presupuestadas. Este sector cultiva fundamentalmente cítricos y otros productos del agro incluyendo la ganadería, mientras, el no estatal produce cultivos varios. El 66,8% de sus tierras corresponden a una superficie agrícola ocupada por cítrico, cultivos varios, ganadería, caña de azúcar, forestal e incremento de frutales.
Los principales sectores económicos que integran el territorio son el agropecuario, industrial, la construcción, el transporte, la educación, la salud y el comercio. La base económica del municipio es agroindustrial, la principal producción lo constituye el cítrico, seguido por los cultivos varios, la ganadería y la caña. La Empresa de Cítricos Victoria de Girón ocupa un área de 34 251,63 ha, de ellas 25 459, 86 ha están plantadas de cítricos, mango, aguacate, hortalizas y otros cultivos y más de 8 000 ha, dedicadas a la ganadería. El suelo representa el principal recurso natural por ser la base de la actividad agroindustrial y están presentes en él, todas las clases agro- productivas.
El municipio cuenta con 15 organizaciones de base, de ellas 14 Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS) y una Cooperativa de Producción Agropecuaria (CPA), todas dedicadas a los cultivos varios y diez de estas dedicadas a la producción de frutas. La totalidad de las organizaciones está integrada al movimiento agroecológico y al de Fórum de Ciencia y Técnica. Se cuenta con 15 facilitadores, seis de ellos profesionales, nueve hombres y seis mujeres. El Grupo Asesor del movimiento agroecológico municipal (20 miembros) se ha consolidado, lo cual constituye la principal fortaleza y punto de apoyo para esta actividad. Dicho grupo está dedicado a dar seguimiento después de la implementación de los acuerdos emanados del XI Congreso de la ANAP, como lo es realizar diferentes acciones que impulsen el trabajo de los cooperativistas y campesinos, que tributa al papel político más importante del sector: la producción de alimentos sanos para el pueblo.
En el último diagnóstico socio cultural que se realizó en el municipio se identifica como potencialidades la existencia de un suelo fértil idóneo para la actividad agroindustrial, pero como limitación el mal manejo de los suelos por la explotación de monocultivo, el uso de fertilizantes químicos y herbicidas. Se critica la nula implementación de la estrategia medioambiental para la protección de los suelos, así como la ausencia de proyectos e investigaciones que pudieran desarrollar el ecoturismo local. Todo lo anterior se considera elementos limitantes en la extensión de las prácticas agroecológicas. No obstante, se expone la presencia de un movimiento cultural de promoción de tradiciones campesinas en el ámbito artístico, que constituye una oportunidad para promover la tradición agroecológica.
Los métodos empíricos ayudaron a comprender de manera holística las categorías de análisis de la investigación, el análisis de documentos se utilizó para conocer los elementos distintivos del proceso sociocultural en relación con las prácticas agroecológicas en Jagüey Grande, recogidos en los diferentes documentos importantes que conservan las instituciones y/o personas consideradas aliados claves para la estrategia a proponer. La entrevista se utilizó de manera individual a campesinos y a los aliados considerados actores claves del municipio, para obtener información relevante acerca de sus experiencias sobre la implementación y promoción de prácticas agroecológicas en la actualidad. La entrevista grupal semiestructurada a los campesinos se realizó con el objetivo de conocer los criterios sobre el balance anual municipal de la Agroecología elaborado por la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP).
La técnica del grupo focal permitió realizar una validación de contenido con respecto a la pertinencia de la estrategia.
Características de la muestra
Para la investigación, la población objeto de estudio (2362), fue los campesinos agroecológicos asociados a las CCS de Jagüey Grande y actores con responsabilidades en instituciones y organizaciones en la comunidad. Se trabajó con una muestra no probabilística, por máxima variedad, con el objetivo de obtener criterios desde diferentes visiones, ya que los sujetos fueron seleccionados por el interés del investigador. Está conformada por 16 campesinos agroecológicos asociados a las CCS de Jagüey Grande y siete informantes claves con responsabilidades en instituciones y organizaciones del municipio.
El criterio de selección de la muestra de los campesinos tuvo en cuenta los siguientes aspectos:
Campesinos agroecológicos de las 21 fincas con categoría en transformación agroecológica y las propuestas para agroecológicas respectivamente del municipio, teniendo en cuenta que las primeras se encuentran integradas al proceso de intercambio, experimentación y promoción del Movimiento Campesino a Campesino (CaC). Mientras en las segundas, ya presentan una elevada conciencia agroecológica comprometida como promotora del CaC y elevada diversificación e integración con el uso eficiente de los componentes de la finca conservando las tradiciones campesinas culturales.
Representación territorial.
Campesinos interesados en colaborar con la investigación.
Facilidad de acceso de la investigadora a las fincas.
disponibilidad de tiempo para intercambiar.
La pertinencia de esta estrategia está sustentada en el reconocimiento de la tradición campesina que dignifica a quienes la practican, como sujetos esenciales en el cuidado del medio ambiente y de la salud humana. Además, la promoción de estas prácticas contribuirá a su extensión y responderá de manera positiva a la línea estratégica producción de alimentos de la Estrategia Municipal de Desarrollo Local.
Como resultado de todo lo planteado anteriormente se propone a partir de la implementación del siguiente procedimiento (Figura 1), contribuir al formulado de la estrategia de desarrollo local del municipio y como debe quedar representada la estrategia de desarrollo integral sociocultural con énfasis en las prácticas agroecológicas. El procedimiento fue elaborado a partir del Decreto 33/2021 para la Gestión Estratégica del Desarrollo Territorial.
A partir de los resultados del diagnóstico y teniendo como bases esenciales lo sociocultural, institucional y medioambiental se identifican qué dimensiones guiarán la estrategia a diseñar (Figura 2), teniendo en cuenta las diferentes dimensiones que en ella intervienen, proponiéndose cuatro dimensiones:
Misión de la estrategia para desarrollar las tradiciones campesinas agroecológicas desde lo local
avorecer la extensión de las prácticas agroecológicas como tradición campesina que asegura el consumo de alimentos sanos y el cuidado del medio ambiente contribuyendo al conocimiento de dichas prácticas en la población, integrar el trabajo de las organizaciones e instituciones municipales y reconocer al campesino en su ámbito sociocultural rural en general.
Objetivo: Promover las tradiciones agroecológicas de los campesinos del municipio.
A partir de la misión elaborada y su objetivo esencial, la estrategia general se propone transite por cinco etapas con sus acciones:
ETAPA I. Diagnóstico integral.
En esta etapa se valoran las ideas y conocimientos que poseen los campesinos entrevistados para tener en cuenta en elaboración de la estrategia. Se seleccionan actores claves que por su responsabilidad en instituciones u organizaciones pueden influir en el desarrollo de las tradiciones campesinas agroecológicas. Se estudian documentos del territorio que constituyen puntos de partida para la estrategia sociocultural integral.
ETAPA II. Selección del equipo de trabajo.
A partir de los resultados de la información recogida en la etapa I, se selecciona para el equipo de trabajo a los actores claves de la comunidad. Esta selección se debe al grado de compromiso e identidad con el tema que muestran, así como su posible incidencia de manera positiva.
ETAPA III. Elaboración de la estrategia.
Los pasos para la elaboración aparecen en la siguiente Tabla 1:
ETAPA IV. Implementación de las actividades elaboradas.
Se diseñarían las actividades elaboradas con la correspondiente explicación para su aplicación según quienes la diseñen y las características propias del municipio. Se propone que cada actividad contenga los siguientes elementos: actividad, objetivo, descripción, organismo e instituciones implicadas, participantes, responsables, lugar, recursos y frecuencia o fecha. En la Tabla 2 que aparece a continuación se explicitan las actividades que se proponen en la estrategia.
ETAPA V. Evaluación de las actividades implementadas.
La evaluación aun cuando está presentada en la estrategia sociocultural integral, en la Etapa número V, se establece como acción permanente durante la aplicación de la estrategia. Su importancia radica en la supervisión constante del cumplimiento de la misión y objetivo trazado en la estrategia, para no perder de vista la necesidad de su aplicabilidad en el municipio.
Entre los indicadores delimitados para la evaluación de los resultados se proponen: logros y barreras que se han ido venciendo, trabajo con la sensibilización del campesino a utilizar las prácticas agroecológicas, participación y protagonismo de la población, equipo de trabajo y campesinos del territorio, satisfacción con la calidad de las actividades, significación de la vivencia recreativa, sugerencias o recomendaciones y rol de los actores claves de la comunidad.
Finalmente, las autoras refieren que cualquier estrategia que se implemente a nivel local, debe decidir con claridad cómo se quiere llegar a los objetivos, o sea, definir las líneas de acción y de intervención necesarias para lograr las metas propuestas. Las medidas deben incidir sobre los factores que causan los problemas y/o que impiden el nacimiento de nuevas actividades. Para ello se propone realizar siempre un ejercicio tipo Fortalezas, Oportunidades, Debilidades, Amenazas (DAFO). Como paso inicial se identificarán las fortalezas y debilidades del territorio que pueden influir en el logro del objetivo, sobre la base de las potencialidades y limitaciones validadas durante el análisis de la situación local. Asimismo, se identificarán las oportunidades y amenazas del contexto externo que también pueden influir en el logro del objetivo, considerando la información contenida en los planes de desarrollo local, municipales, comunitarios, etc., en la oferta institucional, como programas nacionales, instrumentos, fondos sociales, planes reguladores, etc., y las características del contexto local y regional.
Después de formular un conjunto de posibles estrategias, se procederá a la selección de aquellas consideradas más importantes, analizando la viabilidad de su ejecución, partiendo del conocimiento, la experticia y decisión de los gestores del desarrollo local. En función de lo anterior, se pueden utilizar múltiples herramientas y técnicas que coadyuven a facilitar la selección, siempre adecuando la generalidad expuesta en el presente trabajo a los ejes priorizados de la Estrategia de Desarrollo Local del Municipio estudiado.
Partiendo de la importancia que se le concede en los momentos actuales al desarrollo local y como vía de facilitar y agilizar el proceso de elaboración de estrategias para el desarrollo local, queda establecido en este trabajo un procedimiento para su elaboración, cuenta de 4 etapas de forma tal que viabilice el trabajo a nivel local y otras 5 etapas para la especificidad de la investigación con relación a una estrategia para fortalecer las tradiciones campesinas agroecológicas en el municipio de Jagüey Grande en la Provincia de Matanzas.
Se elaboró una estrategia sociocultural integral para la promoción de prácticas agroecológicas de los campesinos asociados a las CCS de Jagüey Grande, con carácter plurisectorial y multidisciplinario, reflejada en sus cuatro dimensiones, educativa, medioambiental, socio sicológica y cultural. Esta se concibió teniendo en cuenta el criterio de los campesinos que implementan dichas prácticas y los actores considerados claves de la comunidad por sus responsabilidades en instituciones y organizaciones del territorio.
Las actividades propuestas contribuyen al reconocimiento del campesino agroecológico y al conocimiento de la población jagüeyense de la importancia de estas tradiciones campesinas para la salud humana y el cuidado del medioambiente en general.