Diagnóstico del Posgrado en México. Región Centro-Occidente. Morfín López, C. y Ruiz Cuéllar, G. (Coords.). Diagnóstico del Posgrado en México. Región Centro-Occidente. Guadalajara: COMEPO, 2015, 147 pp., ISBN 978-607-9361-88-4.
“En la búsqueda de la construcción del posgrado que el país necesita” (Morfín López y Ruiz Cuéllar: 31). ¿Cuáles deberían ser los cimientos de los posgrados para que estuvieran acordes a las necesidades de una región de nuestro país, y qué características deberían de tener? ¿Cómo está compuesto el terreno sobre el cual se debe edificar un programa de posgrado? ¿Quiénes y cómo son los constructores de tal edificación?
Siete universidades de la región centro- occidente del país, coordinadas por Catalina Morfín López y Guadalupe Ruiz Cuéllar, se plantearon estas y otras interrogantes, para revisar la situación actual de su oferta de posgrados. Como resultado de este proceso, se produjo el Diagnóstico del Posgrado en México. Región Centro-Occidente, investigación impulsada y publicada por el Consejo Mexicano de Estudios de Posgrado, A. C. (COMEPO) y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT). Esta obra de 147 páginas fue publicada en Guadalajara, Jalisco, México, en 2015.
En el proyecto participaron investigadores de seis universidades estatales y una particular: Universidad Autónoma de Aguascalientes, Universidad de Colima, Universidad de Guanajuato, Universidad de Guadalajara, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Universidad Autónoma de Nayarit y el ITESO de Guadalajara. Además, el Centro de Investigación en Matemáticas (CIMAT) asesoró y diseñó las herramientas de análisis de datos que se utilizaron en el estudio.
El diagnóstico está integrado por nueve partes: el proyecto y sus características; las instituciones de educación superior que imparten posgrado en la región centro-occidente; los programas de posgrado; los actores del posgrado; las relaciones de los posgrados con el entorno; problemas y perspectivas a futuro del posgrado; análisis cualitativo de problemáticas y buenas prácticas del posgrado; los indicadores del posgrado en la región centro-occidente; y las conclusiones.
El horizonte último planteado en la investigación no es el diagnóstico en sí mismo, sino la creación o reformulación del posgrado vinculado esencialmente a su realidad contextual. Para lograr esto último, se necesita conocer el terreno sobre el cual se pretende edificar una propuesta académica, y no solo cuantificar el tipo de recursos humanos y materiales, sino bosquejar y delimitar sus características. Esto último es la misión del diagnóstico.
Los programas de posgrado de la región son muy diversos en su organización y en la composición de las comunidades académicas que los sustentan. Ante esta situación, el estudio optó por conocer las características y las apreciaciones de los miembros de dichas comunidades, para comprender de manera más compleja el desarrollo de la oferta regional de posgrado en dos dimensiones: la primera con el o la interesada que desea ingresar para dedicarse a la investigación o a profesionalizar su práctica, y la segunda con la realidad en la que se propone intervenir desde el quehacer profesional de los egresados.
Por lo anterior, el libro dedica varios apartados a la caracterización de los actores individuales y colectivos que configuran las instituciones de educación superior con oferta de posgrados. Analizar los elementos estructurales que sustentan determinados programas de posgrado posibilita la comprensión de las necesidades sociales a las que estos pretenden responder; así como la construcción de un mapa de sus respuestas académicas, su distribución, el área de conocimiento a la que pertenecen y el tipo de institución que los ofrece (Ruiz Cuéllar: 32-47; Urrutia De la Torre: 84-103).
En el mapeo de características de las instituciones ofertantes de posgrado, el diagnóstico se vale de indicadores financieros, administrativos y educativos sobre el conjunto de universidades de la región centro-occidente. Las dimensiones y distribuciones de los diferentes recursos que emplean las universidades se muestran en comparación entre los estados, entre el tipo de sostenimiento, y/o contra el promedio regional (Hernández Castro y Villalobos Ramírez: 48-83; Reynaga Obregón et al.: 104-117).
Para el equipo que participó en la elaboración del estudio es imperativo atender las necesidades del entorno para impulsar la formación en el posgrado, e incluso es conveniente anticiparse a ellas. La vinculación con los diferentes sectores sociales es necesaria para nutrir los contenidos de los programas orientados al desarrollo social, político y tecnológico de la región.
El estudio indaga sobre las problemáticas que se oponen a la formación y desarrollo de los posgrados en el ámbito público y privado, de manera que las tensiones producidas se enfocan en cuatro rubros: lo académico, lo institucional, administrativo, y la visión social en torno al posgrado. Asimismo, se presenta un análisis cualitativo de problemáticas y buenas prácticas en voz de los coordinadores de los posgrados de la región centro-occidente (Alcaraz Anguiano: 126-133; Suazo Ortuño: 118-125).
Se observa que las inquietudes de los coordina- dores de posgrados están centradas en aspectos académicos y administrativos relacionados con los estudiantes, además del financiamiento de los programas y su vinculación social.
Aunque el enfoque cuantitativo da solidez argumentativa a una investigación de esta índole, el diagnóstico deja ver la posibilidad de enriquecer futuros trabajos con una mayor proporción de análisis cualitativo, de manera que se pueda profundizar en las características y áreas de oportunidad que identifican los actores que intervienen en los posgrados. Aun así, los frutos del diagnóstico son relevantes y se sintetizan en cinco recomendaciones que se fundamentan a partir del análisis de la información obtenida: reconfigurar la estrategia nacional de impulso al posgrado, mejorar la normatividad y el fomento del CONACYT y la SEP, fortalecer el financiamiento a los posgrados, impulsar la movilidad y la internacionalización, y propiciar el desarrollo curricular, la gestión, el fortalecimiento académico y la evaluación de los posgrados (Urrutia De la Torre et al.: 140-147).
En conclusión, Diagnóstico del Posgrado en México. Región Centro-Occidente es un referente indispensable para conocer las características del campo académico del posgrado en una región que requiere una vinculación real y específica entre los centros de formación y los sectores económicos, sociales y políticos. Conocer la estructura de las instituciones que ofertan los posgrados y el entorno al que van dirigidos los programas académicos posibilita enumerar problemáticas, fortalezas y recomendaciones de mejora para la construcción del posgrado que el país necesita.