Introducción

La llegada del virus SARS COVID-19 a México, tuvo influencia, no solamente en el campo de la salud, resultó gravemente afectado por esta pandemia; sino también en la educación: las escuelas cambiaron la modalidad de sus actividades académicas, trasladándose de un entorno presencial, a uno completamente virtual. Lo cual generó diversas emociones en aquellos que se desarrollaban en este sector, tanto en el papel del estudiante, como del personal académico y administrativo.

En el campo de la investigación educativa, suele resaltarse la influencia de los factores sociales en los estudiantes, con relevancia en su impacto en el proceso de enseñanza y aprendizaje del alumno, aquel que, es el sujeto central de estas indagaciones; sin embargo, no son muy mencionadas las investigaciones que giran en torno al sujeto que está detrás de los procesos del estudiante y es una clave importante para su desarrollo académico: El docente.

En el contexto de la pandemia, los docentes tuvieron que trasladar su espacio laboral, el aula, a su hogar, donde no muchos tenían los recursos y el espacio adecuado para este cambio tan abrupto de modalidad, Orrego en 2020, señala que los profesores han modificado sus estrategias de enseñanza-aprendizaje, incluso, para poder satisfacer las necesidades de los alumnos y también, por la misma vocación de la que son reconocidos, se veían en situación de cumplir un horario laboral más allá de lo estipulado incluso cuando esto desencadenara signos de agotamiento como el cansancio por la postura y las horas frente a la pantalla (López et al. 2022).; no se señala también, el esfuerzo de docentes que tuvieron que capacitarse para poder impartir clases de manera virtual, que no solo atendían a sus alumnos, sino también tenían que volver a ocupar el rol de maestro con sus hijos, a los que podían tener en el mismo hogar pero no brindarles su completa atención.

La situación que el sector colegiado de profesores vivió y sigue viviendo a lo largo de la pandemia, ha sido crítica, al desarrollar diversas actividades en atención a sus compromisos: Familiares, académicos y sociales, como lo menciona Romanowski et al. (2021) “Nadie estaba preparado para tomar decisiones sobre cómo llevar a cabo las clases: las familias, los docentes, los administradores -ante este contexto que era nebuloso, sorprendente y desafiante- comenzaron a tomar las primeras iniciativas” (Pág. 4).

Gallardo (2020) señala que mover 100 años de sistema, tanto de manera física como de manera simbólica, transformó las situaciones de las relaciones trasladadas en el espacio virtual y los medios tecnológicos para que, fuera del espacio de labores académicas, los alumnos y maestros mantuvieran una comunicación, cosa que en diversos casos es cuestionable, pues se encuentra con la invasión del espacio personal de los docentes y el exceso de horas laborales.

En los hallazgos de Romanowski (2021) en una de sus entrevistas, señala que: “El compromiso iba más allá del contrato laboral” (Pág. 33) algo que, al analizar, es correcto y se apunta a la vocación que los docentes mantenían en ellos, junto con el compromiso de velar por el aprendizaje de sus estudiantes, buscando e innovando sus estrategias, pero con el desprendimiento parcial de los vínculos familiares.

Lo anterior, resalta las vivencias de los primeros momentos del desplazamiento hacia la modalidad virtual, misma que fue una situación hacia lo desconocido, tanto por el manejo de las tecnologías y sus complementos, como por sobrellevar las responsabilidades familiares y sociales sin perder el equilibrio o rezagar alguna de estas, incluso se le agrega la presión que tenían por parte de la sociedad y los prejuicios que ésta, desencadena en la profesión.

No es nuevo que la percepción de la sociedad, hacia el docente, se basa en la desinformación y en la falta de empatía hacia éste; se visualiza que solo es aquel que debe de brindar herramientas, enseñar y propiciar el aprendizaje por medio de estrategias, incluso cuando estas actividades invaden el tiempo que el profesor tenía disponible para un sector, con importancia igual o mayor a la de su profesión: su familia. La experiencia, de acuerdo con los docentes y su contexto en la pandemia, se centra en cambios en la interacción entre lo emocional y familiar. (De la Cruz, 2020)

El profesor, al igual que todos, tiene familia, responsabilidades a parte de lo laboral y una vida social, Sokal en 2021, menciona lo siguiente: “Las/os profesores en pandemia han enfrentado múltiples estresores pedagógicos y prácticos. Algunos corresponden a tensiones asociadas a la pandemia en sí, como preocupaciones por su propia salud y la de sus familias” algo que, al detallar, se puede encontrar con la realidad de los docentes, el estrés y la ansiedad que manejaban al tener que equilibrar su vida laboral con la vida social y familiar y la frustración que podían llegar a sentir, al no dedicar parte de su tiempo a los aspectos antes mencionados; incluso recae en un desgaste emocional por situaciones que, como menciona Gonzáles (2020), “Son parte inherente de la vida y se convive con ellas hasta el último momento de existencia.” (Pág. 2)

El objetivo del estudio que comparten las autoras consistió en:

Identificar el impacto pedagógico, tecnológico, emocional y administrativo que tuvo la mudanza del área del trabajo del docente, durante la pandemia, en su contexto familiar y comparar el impacto de los resultados obtenidos, en profesores de tiempo completo y profesores de hora, semana, mes (h/s/m).

Es por ello, por lo que se emprende esta búsqueda para brindar a los docentes, el reconocimiento por sus acciones y proveer información a la sociedad, para la interpretación del lado más humano de los docentes y poder ver que, así como la comunidad en general, tuvo y tiene complicaciones desencadenadas por la pandemia, de igual manera, los profesores se encontraban en esa situación y en la búsqueda de integración de sus familias.

Procesos a los que se contribuye al hacer la investigación:

1. -Redacción de estrategias para el apoyo en la gestión de factores familiares y sociales del docente.

2. -La creación e implementación de talleres, que auxilien al docente en el área socio emocional y al manejo de cuadros de estrés y ansiedad.

3. -Capacitación hacia los docentes en el área de tecnologías de la información y las comunicaciones (TICS).

Materiales y métodos

Diseño de la Investigación

Esta investigación es de carácter cualitativo con enfoque fenomenológico, el cual indaga las percepciones de los individuos acerca de las vivencias respecto a un suceso, en este caso, la percepción de los docentes al traslado de su área laboral a un entorno virtual como una derivación de la pandemia Covid-19.

En esta investigación fueron partícipes dos perspectivas, una la aportó la muestra de cuatro docentes de tiempo completo y la otra corresponde a la de un profesor de hora, semana, mes, todos ellos, laboran en la Licenciatura en Educación de la Universidad Autónoma del Carmen (UNACAR).

Al trabajarse con individuos durante el proceso de recolección de datos se salvaguardó la integridad de cada uno.

Instrumento

El método de recolección de datos por medio de experiencias, recuperado por un cuestionario constado de quince ítems abiertos, aplicado de manera presencial durante el mes de mayo del 2022, a través de entrevista individual y presencial a los sujetos de investigación. La muestra para la aplicación de este instrumento constó de cinco maestros, en un rango de edad entre 35 y 50 años; de estos sujetos, 3 (60%) de ellos cuentan con doctorado y 2 (40%) con grado de maestría a quienes se les solicitó su consentimiento para grabar el audio de la entrevista. El guion de entrevista semiestructurado está conformado por:

• 6 ítems para: Identificar el impacto pedagógico, tecnológico, emocional y administrativo que tuvo la mudanza del área del trabajo del docente, durante la pandemia, en su contexto familiar.

• 6 ítems para: Comparar el impacto de los resultados obtenidos en profesores de tiempo completo y profesores de hora, semana y mes (h/s/m)

• 3 ítems para: Generar estrategias que sirvan para la gestión de las responsabilidades familiares del docente, a fin de cubrir estas zonas que se encuentran rezagadas.

Los ítems están organizados en concordancia con los objetivos de la investigación. Las entrevistas realizadas a los sujetos tuvieron una duración promedio de 28 minutos, siendo la mínima de 16 y la máxima de 43 minutos.

Análisis de datos

Posterior a la aplicación del instrumento a los docentes se procedió a la transcripción de las entrevistas y se realizó el análisis en el software Atlas.Ti. Las primeras incursiones en el proceso fue la codificación inductiva, que permitió se infiriera línea por línea, conceptos que fueron de utilidad para la creación de las categorías.

La segunda fase fue la codificación selectiva en la cual, por medio de los antecedentes vistos en el marco teórico, se fueron sustentando las categorías y encontrándoles la coherencia en relación al contexto de la investigación.

Tercera fase, codificación deductiva, encontrando categorías que se acoplaron a la investigación, pero sustentadas y comparadas con las investigaciones sustraídas para el marco teórico de esta, coincidiendo en las categorías y aportaciones de los autores que lo conformaron; ya teniendo las categorías por parte de estos tres procesos, se pasó a la codificación axial y desarrollaron subcategorías, las cuales dieron el sustento para poder leer entre líneas y visualizar aquello que en los primeros análisis no se lograba determinar o definir con claridad.

Resultados

Categoría 1. El traslado, perspectiva inicial del confinamiento

El análisis del traslado recupera la perspectiva y significado inicial del docente durante el confinamiento provocado por la covid-19 en el periodo de marzo a diciembre 2021. Se observa en la figura 1, que al inicio del confinamiento prevalece la sorpresa, la confusión por el cambio brusco en mudar las actividades académicas al hogar. Aunque al inicio se percibe la situación como una oportunidad para relajarse y romper la rutina escolar, a medida que se prolonga el confinamiento se turna complejo, complicado y tedioso de cierta manera porque algunos docentes manifestaron “no se estaba consciente de todo lo que conllevaría en cuanto a condiciones del espacio, hogar, equipos servicios” (1:2), “No fui consciente de que el hogar se iba a convertir en el espacio de mi familia, que iba a ser el espacio laboral, que tendría que convertirse también en el espacio de mis hijos” (1:3).

Los docentes manifestaron, que, al hacer el traslado de las clases presenciales a los entornos virtuales, durante el primer periodo de abril a junio 2020, al no poder salir de sus hogares, gran parte del tiempo se lo dedicaron a adaptar las planeaciones didácticas y a reuniones para responder a las situaciones inmediatas, en algunos casos mermado la relación familiar ante el “consumo de tiempo, por lo cual le restas tiempo a tu familia, a tus actividades personales; pero que sin embargo ese confinamiento donde no puedes ir a ningún lado, donde todo que tienes que ser más reservado lo inviertes en lo laboral”, “todos conectados, todos enchufados en las actividades que se daban muchas veces sin planeación, de repente teníamos reunión a la hora que se les ocurriera o mis hijos tenían clases a la hora que el profesor pudiera, sí se generó un conflicto de tiempos” (Entrevista 2). “sentí que se duplicó el trabajo, sentí que no podía manejar el horario académico, aunque había cosas que se podían resolver dentro del horario que había estipulado otras se salían y tenía que realizarlas en la tarde, que no era lo habitual en mí” (Entrevista 3), “sentimos que hubo quizá momentos en los que por nuestras actividades docentes no podíamos convivir mucho y a pesar de que estábamos en casa los dos, estábamos, pero a la vez no” (Entrevista 5).

De acuerdo con la narrativa de los docentes para el segundo semestre del confinamiento (agosto-diciembre 2020), ya se llevó a cabo una mejor organización de los tiempos para las actividades académicas, incluso habilitar los espacios en el hogar en donde se desarrollaría las clases “habíamos hecho una reestructuración de la casa y mi espacio se había vuelto un poco más privado, pero sí me di cuenta de que me hacían falta cosas para poder realizar mis actividades” (Entrevista 3). Al igual los docentes manifestaron recibir capacitación oportuna, no sólo para ellos, sino para los estudiantes también, lo que ayudo a instrumentar la plataforma virtual en donde se desarrollaba el proceso de enseñanza y aprendizaje.

Categoría 2. Factor familiar

En la figura 2 se observa que, por parte del factor familiar, se obtiene la interpretación de dos variantes, la primera, que los docentes vieron el confinamiento, suscitada por la COVID-19 en el periodo marzo-diciembre de 2021, como una oportunidad para estrechar lazos con sus hijos, verlos y poder conocerlos realmente fuera de sus obligaciones como docentes, incluso algún sujeto de investigación, expresó que al ser foráneo no lo vio pesado, sin embargo esta opinión la emitió después del reordenamiento de sus actividades docentes en casa y a la administración de sus horarios. Tarea que en un principio se tornó tediosa, así lo expresa cuando dice: “Fue una reorganización de mi tiempo, buscar la manera de cómo congeniar” (1:96). “Fue bastante pesado sobre todo en coordinación de administrar los tiempos” (1:22).

La segunda variante referida al aprendizaje y su reestructuración, que al principio de la pandemia era un desconcierto y con apego a prueba y error de la innovación de los planes, los docentes se vieron en la necesidad de dejar por un momento su papel como padres de familia y centrarse en su profesión, fragmentándose, para poder sufragar las necesidades de sus estudiantes pero restándole tiempo a las actividades de sus parejas e hijos, quienes también eran estudiantes, como lo manifestaron al decir “Sacrifiqué mucho tiempo de mi familia” (1:12) “Sentimos que a pesar de que estuviéramos en casa casi no podíamos interactuar entre nosotros” (1:93).

Categoría 3. Factor emocional

El sentir de los docentes, al experimentar que pasaba el tiempo y la pandemia no se terminaba, continuar combinando sus quehaceres docentes con sus quehaceres en el hogar (semestre enero-julio 2021), así también vivir la perdida de algunos familiares o amigos, y continuar en confinamiento genero emociones de miedo, nostalgia, ansiedad, tristeza. En algunas narrativas, se experimentó, el sentimiento de desinterés, por ejemplo “No se toma en cuenta las situaciones emocionales, no nos presionan a que tengamos que cumplir, pero uno como que se acostumbran a que tiene que cumplir con sus cosas y quieren seguir con el mismo ritmo de trabajo” se mencionó que ante la demanda de diversas actividades hubo un desgaste no sólo físico, emocional, sino también a nivel cognitivo (ver figura 3).

En los fragmentos recuperados de los docentes, se identificó, la necesidad de una red de apoyo durante la pandemia “… mi válvula de escape era con mi esposa, con los vecinos, todos estaban en casa y con ellos platicábamos, esa era la catarsis que teníamos, desahogándonos”, “La ayuda más fue entre nosotros como profesores, al hallar una red de apoyo muy grande entre nosotros como profesores y así fuimos sufragando situaciones (Entrevista 4, 5). La autorregulación en los horarios de los docentes fueron estrategias que contribuyeron a reducir los niveles de estrés “cuando vi síntomas de estrés en mi hijo fue que dije que no podía seguir de esta manera y conforme fuimos pasando el otro semestre pude establecer reglas con los estudiantes”, “En mi familia llegamos a decir, lo que se pueda hacer se va a hacer y lo que no, no y así fue como se pudo equilibrar la balanza (entrevista 4, 5).

Categoría 4: Factor pedagógico-tecnológico

Observando el factor pedagógico-tecnológico se visualizan dos dimensiones en esta figura, por un lado, se encuentra los servicios, en esta sección se analizan los tipos de apoyos que la institución ofreció a los docentes entre los que señalan que el servicio psicopedagógico se les presentó en el momento apto y que, a fin de cuentas, fue proporcionado para su bienestar.

De igual manera, en cuestión de la planeación, su traslado hacia la virtualidad se expone en la figura 4, en la que se hace evidente la saturación del docente para sufragar las necesidades de su alumno, en la que también manifiesta la existencia del soporte administrativo, con el que se provisionó en tiempo y forma, las necesidades básicas de material didáctico, para que la carga no fuera tan pesada “Me facilitaron papelería y esa era parte de los compromisos” (1:64)

Por parte de la perspectiva tecnológica, se visualizó que en cuestiones de equipos tecnológicos, para cubrir esta nueva modalidad por la COVID-19, en marzo del 2020, los docentes que no contaron con equipos para poder impartir sus clases, esto en el sentido de: computadoras, softwares y demás, se les proporcionó por la universidad a través de una carta responsiva, algo que fue de mucha utilidad para los docentes, al igual que los cursos de capacitación en relación a la plataforma de Microsoft Teams y la atención de estudiantes, señalado cuando expresan: “Nos capacitaron en Teams, nos capacitaron para el regreso a clases” (1:155) “Nos dieron cursos de atención a los estudiantes que tuvieran esas situaciones un tanto complicadas” (1:145)

Categoría 5. Saturación administrativa

En lo que concierne a la saturación administrativa, los profesores manifestaron una dualidad de sentimientos, como se muestra en la figura 5, debido a la necesidad de modificar sus planeaciones y seleccionar las estrategias idóneas para facilitar al estudiante su tránsito de lo presencial a lo virtual, teniendo que invertir tiempo de familia y ocio para tal fin “tuve que cambiar la planeación porque todo se tenía para hacer de manera presencial y al darse el cambio ahí si tuve que replantear y si hubo una carga adicional” (1: 166) “había cosas que se podían resolver dentro del horario y otras que se salían” (1:200) “no había como tiempos definidos para cada cosa” (1:23), “sentí que no podía manejar el horario académico” (1:199) “sentí que se duplicó tanto lo de casa como del trabajo” (1:90) y la consecuente disyuntiva de compaginar los tiempos entre sus compromisos profesionales con el familiar “si experimenté ese malestar o incomodidad de sacrificar el tiempo de mis hijos” (1:11), especialmente para atender las actividades en las que ya existía una agenda específica “...al tener compromisos más fuertes, a parte de la docencia, nos tocó tener compromisos en fechas muy marcadas” (1:58). Le costó mucho trabajo, al profesorado, el no poder delimitar las actividades a lo que había sido su jornada y espacio físico laboral debido a lo abrupto del cambio a lo no presencial y a tener que estar disponibles en todos los medios al alcance “se empezó a emplear el teléfono, el correo, otras plataformas para adaptarnos sobre la marcha” (1:7) A lo anterior, se une la variante del estrés en el profesor, ante las consecuencias de la aplicación de las estrategias emergentes que implementó, en su afán por atender sus clases “decidí que todo fuera asincrónico y fue ahí donde todo se empezó a complicar porque tenía que alinear todo mi material como una narrativa, o sea, tenía que hacer el material que fuera accesible para el estudiante” (1:165)

Es precisamente ante su transición al trabajo en casa, que los profesores aprecian aspectos individuales como la edad “La pandemia nos permite advertir que ya no estamos en una edad en la cual nos podemos exigir tanto en nuestro trabajo” (1:36) “mucha indiferencia para el docente” (1:35) y sus limitaciones en el empleo de tecnologías “hubo un choque de momento para muchos compañeros porque a veces no están en el área de la tecnología educativa” (1:107), mismas que se convirtieron en un reto e inversión de tiempo, en el desarrollo de sus clases y compromisos académicos, esto lo llevó a buscar la colaboración con sus colegas, como lo evidencia cuando expresa que la “ayuda más fue entre nosotros como profesores, al hallar una red de apoyo muy grande entre nosotros como profesores y así fuimos sufragando situaciones” (1:29)

Conclusiones

Ante el impacto de la COVID-19 en la educación en México, se lograron recabar los significados que los docentes tuvieron en esos momentos de su vida, en los que la mayoría coincide en que fue desorientador y abrupto el cambio de la modalidad, al igual que tener que adaptar los materiales hacia la virtualidad y uno de los aspectos más complejos para algunos, fueron los softwares utilizados. En relación a este punto, una de las estrategias sugeridas es que, sin importar su tipo de contratación, los profesores sigan recibiendo capacitación, para el manejo de las nuevas tecnologías aplicadas a la educación y la innovación de contenidos, aprovechando las herramientas tecnológicas que se tienen y otras que surgieron durante el confinamiento.

Por otra parte, ante las situaciones vividas por el docente en lo laboral, fue complejo el establecimiento de horarios para otras actividades que no fueran de trabajo, con el fin de auxiliar a sus estudiantes en las situaciones adversas que pasaban durante la pandemia, dar asesorías hacia aquellos que se encontraban en rezago y buscar la manera en innovar sus clases o que sus alumnos se sintieran cómodos en ellas, todo para velar por su bienestar, sin notar que descuidaban parte de su vida, cegados a momentos por la vocación y el deber ser. Sin embargo, no todos los docentes podían llegar al acercamiento que deseaban, con sus estudiantes, ya que la capacitación para la atención de las emociones, solo se planteaba de manera superficial, por lo tanto, se considera que otra de las capacitaciones sugeridas para los docentes, sea la detección de situaciones adversas del estudiante y como apoyar estos casos, con mayor profundidad.

Los lazos familiares se vieron fortalecidos, en algunas de las familias docentes, viendo en la pandemia y el laborar en casa, un momento para estrechar vínculos, conocerse los unos a los otros e incluso, para los casos de docentes foráneos, regresar a su ciudad de origen; sin embargo, otra de las vivencias también señala que lo agradable fue durante las primeras semanas, ya que posteriormente, situaciones como la atención hacia los alumnos y las horas extras de trabajo desarrollaron un distanciamiento momentáneo, que se pudo resolver con las planeaciones adecuadas y con la experiencia de los primeros semestres; es aquí donde se fundamenta la propuesta para una subsecuente investigación que se centre en las consecuencias, en los integrantes de la familia, respecto a la estadía laboral de sus padres en casa.

Por parte de las emociones del docente, se presentaron cuadros de ansiedad, depresión y estrés, detallado en las entrevistas, para lo que contaron con el apoyo del departamento psicopedagógico, aunque se privó de este servicio a los docentes de h/s/m, por lo cual, se considera estratégico, la implementación de este servicio, sin distinción alguna.

Finalmente, la pandemia tuvo momentos con tono agridulce, encontrando lo bueno dentro de lo malo, las nuevas maneras de aprender y los lazos que se construyeron, quedarán como un primer logro que debe seguirse fortaleciendo a través de los años, de igual manera se reconoce la labor docente en esos momentos en los que, ante la necesidad, invirtieron tiempo personal en el desarrollo de sus estrategias educativas sobreponiéndose y/o dedicando su desempeño a quienes ya no se encuentran en un plano terrenal.

Referencias

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Sokal L. Trudel J. Babb (2021) I’ve had it! Factors associated with burnout and low organizational commitment in Canadian teachers during the second wave of the COVID-19 pandemic International Journal of Educational https://doi.org/10.1016/j.ijedro.2020.100023