Resumen: A partir del modelo de metáfora biológica organizacional se propone encontrar una metáfora creativa, relacionando la teoría de evolución simbiogenética y los procesos de innovación organizacional. Esto es posible ya que la teoría de la simbiogénesis propuesta por Lynn Margulis y reconocida por el mundo científico a mediados de los años 90, propone una alternativa explicativa para los procesos de evolución, en donde se señala que el arreglo estaría dado por la simbiosis que desarrollan dos organismos (generalmente bacterias) y que al unirse crean un nuevo organismo. Este proceso es muy parecido al de Innovación, por ello, a partir de los modelos de generación de metáfora creativa se observa la innovación como proceso evolutivo que tiene múltiples características y alternativas y en donde el proceso puede ser descrito, analizado y modelado de una forma novedosa. Por último, se encuentra que la metáfora creativa de la innovación organizacional opera como un proceso de simbiogenesis, con un componente analítico para integrar nuevas formas de desarrollo en los procesos de innovación organizacional.
Palabras clave:Organismo VivoOrganismo Vivo,Gestión EmpresarialGestión Empresarial,Cooperación InternaCooperación Interna,InnovaciónInnovación.
Abstract: From the model of organizational biological metaphor, it is proposed to find a creative metaphor, connecting the theory of simbiogenetic evolution and the processes of organizational innovation. This is possible because the theory of symbiogenesis proposed by Lynn Margulis and recognized by the scientific world in the mid-90s, proposes an explanatory alternative for the processes of evolution, where it is pointed out that an arrangement would be given by the symbiosis that two organisms develop (usually bacteria) and when they unite they create a new organism. This process is very similar to that of Innovation, therefore, from the models of generation of creative metaphor, innovation is observed as an evolutionary process that has multiple characteristics and alternatives and where the process can be described, analyzed and modeled in a novel way. Finally, it is found that the creative metaphor of organizational innovation operates as a process of simbiogenesis, with an analytical component to integrate new forms of development in organizational innovation processes.
Keywords: Living Organism, Business management, Internal Cooperation, Innovation.
Revisión de tema
Innovación organizacional como un proceso de simbiogénesis
Organizational innovation as a process of symbiogenesis
Recepción: 14 Agosto 2018
Aprobación: 17 Octubre 2018
Las empresas para crecer y desarrollar su objeto social requieren de procesos de innovación y adaptación que les permitan mantenerse y crecer en entornos difíciles. Los procesos de innovación han sido entendidos como procesos evolutivos; es decir, se requiere de un aprendizaje para alcanzarlos y una vez que las organizaciones inician procesos de innovación siguen haciéndolo porque encuentran capacidades y competencias que se desarrollan, muchos autores han destacado como estas estrategias de innovación son una de las fuentes principales de competitividad, en especial, si se proponen alcanzar mercados globales.
Esta condición de la innovación, como proceso evolutivo, ha sido comparado a través de la metáfora biológica, con mecanismos provenientes de los sistemas naturales para mejorar el entendimiento de los sistemas económicos. En este artículo se presentan dos grandes temáticas, la innovación como un proceso evolutivo y el análisis de la posibilidad de entenderla como un proceso de simbiogénesis, como una alternativa conceptual y cooperativa para facilitar la gestión de esta y su promoción dentro del entorno organizacional.
Los procesos de innovación al interior de las organizaciones han sido vistos desde muchas alternativas, considerando siempre su papel protagónico en el desarrollo no sólo de las organizaciones sino de los países en general (Chandra & Primo, 2009). Sin embargo, es difícil encontrar un consenso acerca de lo que significa y cuál es el camino apropiado para inducirla. La Tabla 1 propone diferentes alternativas de la definición de Innovación.
Como consecuencia de estas múltiples definiciones, con el paso del tiempo y del cambio tecnológico es posible encontrar diferentes modelos de gestión que posibilitan esta gestión; un aporte interesante lo propone Barreto Fereira y Petit Torres (2017) y se resume en la Tabla 2.
De estos desarrollos lo que queda claro es que los procesos de innovación deben ser colaborativos e integrados, de tal forma que se logren alcanzar las alternativas propuestas. En líneas más adelante se propone teoría enfocada en el proceso de innovación desde la perspectiva de la metáfora biológica con base en la idea de simbiogenesis.
La metodología propuesta es la aplicación de la metáfora biológica, la cual ha sido “reconocida como un potente dispositivo de creación de ciencia, en la cual se encuentra que el surgimiento de una nueva teoría científica o filosófica suele tener en su base, una nueva metáfora creativa” (Martínez et al., 2017, p. 1) creando una red de metáforas subsidiarias de ella con, al menos, tres consecuencias importantes:
1. Proponer un nuevo modelo o un nuevo marco de referencia para conocer la realidad. 2. Crear una red de metáforas subsidiarias que permita generar un número indefinido de aseveraciones sobre esa realidad congruentes con la metáfora básica. 3. Entrar en colisión y sustituir, si tiene éxito, a las teorías rivales anteriores y/o contemporáneas cuyas redes de metáforas se muestren incompatibles con la nueva (Samaniego,1996, p. 7).
Estos modelos de transferencia de conceptos entre una ciencia y otra traen innumerables ventajas, tales como permitir un proceso pedagógico, entendimiento y creación de oportunidades de entendimiento. Las ciencias biológicas han sido aplicadas con éxito en muchos campos organizacionales, como la autopoiesis, los procesos cognitivos, las teorías de enjambre, la coevolución, entre otros, (Montoya; Montoya 2012 (a, b); Montoya, Montoya, Valencia, 2016, Ochoa, Montoya, 2010, Montoya et al, 2010, 2012.).
Una de las áreas que más concuerdan los estudiosos es determinar los procesos de innovación como modelos evolutivos, al respecto Benavides (2004) señala que esta comparación entre lo biológico y la innovación es incompleta por los siguientes conceptos contenidos en la Tabla 3.
Benavides (2004) propone que se adapten más que analogías simples al proceso y al concepto de sistemas, señalando que,
es importante destacar que el análisis evolutivo ha permitido entender mejor el proceso de innovación tecnológica, sin embargo, como se muestra en este artículo, no permite explicar de manera satisfactoria ciertos problemas. En particular, los desarrollos logrados hasta el momento explican el cambio tecnológico, pero no los cambios que se han dado en el proceso de innovación tecnológica. De hecho, éste no ha sido un proceso homogéneo, pues en diferentes épocas ha adoptado diferentes formas (p. 51).
Estos procesos de innovación entonces pueden ser vistos como procesos aplicables a los modelos biológicos, que señalan la complejidad y la evolución como alternativas para su entendimiento. Arthur, Durlauf & Lane (1997) presentaron seis características que enmarcan a las innovaciones como procesos emergentes y complejos desde la perspectiva económica. Algunas de estas características son:
· Interacciones dispersas de múltiples agentes heterogéneos.
· Múltiples niveles de interacción y organización que generan una jerarquía emergente.
· Generación de nuevos mercados, nuevas tecnologías, y nuevas instituciones (Novedad perpetua).
· Generación continúa de nuevos potenciales y oportunidades, mediante el cual el sistema continuamente opera fuera del equilibrio
· Continúa adaptación basada en experiencias e interpretaciones del contexto donde interactúan los múltiples agentes.
· La Inexistencia de un control global.
Para Pulgarin (2018) el análisis de este proceso innovador tiene mucha congruencia con los seres vivos, en especial al analizar los mecanismos que tienen para dos funciones fundamentales, incrementar su éxito reproductivo y adaptarse a las condiciones del ambiente:
Para ambos casos, los sistemas vivos actúan introduciendo transformaciones estructurales en sus características las cuales implican no solo el mejoramiento de algunos de los atributos actuales sino la introducción de nuevos atributos (Wood, 2009), que resultan equiparables a las formas de innovaciones mencionadas por Schumpeter, (1939) y posteriormente las de la OECD & EUROSTAT (2005) en el ámbito de la organización. Dado este contexto, la noción de transformación en biología evolutiva, y el proceso de innovación en las organizaciones, evidencia en principio una posible paridad ontológica (p. 46).
Las formas que conjuntamente comparten organizaciones y seres vivos, tales como adaptación, ajuste y transformación evolutiva se dan fundamentalmente en dos etapas: innovación y adaptación; de tal forma, la innovación se convierte en un proceso creciente y paralelo, y la adaptación en la selección entre las mejores estrategias, ocasionando “la interrelación dinámica entre ambos mecanismos genera la evolución de una economía” (Sengupta, 2014, p. 66). Por otra parte, aquellos organismos que no se adaptan no pueden subsistir y fracasan en el intento de perpetuar esa especie.
La innovación vista como un proceso biológico también es presentado por Yoguel, Barletta & Pereira (2017), ellos proponen las corrientes de la innovación observadas en la Tabla 4.
Finalmente, Jiménez (2017) sintetiza para la valoración tecnológica las posibilidades desde la biología, en donde propone como la biología puede tener un papel de comprensión y las posibilidades de la aplicación biológica evolutiva y tecnológica, que se observa en la Figura 1.
La simbiogenesis es una propuesta de Lynn Margulis (1967, 1970) en la que señala una alternativa diferente al proceso evolutivo. Margulis afirma que “una prodigiosa bibliografía técnica demuestra que las bacterias constituyen la mayor reserva de diversidad evolutiva” (Margulis y Sagan, 2003, p. 243.) y como,
las historias acerca de cómo los microbios tienden a unirse entre sí, así como de las múltiples interacciones entre ellos y con organismos mayores, han sido contadas varias veces en los lenguajes especializados de las ciencias. Inevitablemente, esas historias son poco conocidas, debido en parte a la gran fragmentación de la propia ciencia (Margulis y Sagan, 2003, p. 243).
Propone: “casi todos los animales, hongos y plantas —quizás todas las especies— tienen protoctistas asociado” (Margulis, 1992; Margulis et al., 2002; Margulis, 2003).
Margulis formuló lo que se conoce como «Teoría de la endosimbiosis serial», que formula:
La primera célula eucariota de la Tierra, aquella célula de la que provenimos todos los animales y las plantas, se formó mediante la fusión de tres bacterias preexistentes completas, con los genes de cada una incluidos, por supuesto. Una de esas bacterias aportó los andamios de microtúbulos, otras ciertas capacidades metabólicas peculiares y la tercera (que se sumó más tarde a las otras dos) se convirtió en las actuales mitocondrias. Esa célula eucariota primigenia empezó a proliferar, y una de sus descendientes sufrió aún otra experiencia traumática: se tragó a una bacteria fotosintética de la que provienen los actuales cloroplastos (En Sampedro, 2002, p. 6).
Esta teoría señala la evolución biológica como –la diversificación de todos los seres vivos a partir de un único ancestro común (o unos pocos)– concepción que está ampliamente aceptada por la comunidad científica. Lo anterior está soportado por un sinnúmero de datos y evidencia, aportados meticulosa y sistemáticamente por la comunidad científica a lo largo de los últimos dos siglos (Chávez, 2013; Carrapiço, 2010; Carrapiço, Pereira y Rodrigues, 2007; Chapman and Margulis, 1998).
Estos hallazgos, son importantes para la evolución (Carrapiço, 2012), porque significa que esta no se dio de manera aislada, por el contrario, se requirió de la simbiosis y cooperación entre varios seres vivos para modificar su propia estructura y de alguna manera, también modificar el entorno (Vural, Isakov y Mahadevanet, 2015; Hird, 2009).
Chavez (2013) propone un paralelo conceptual para diferenciar la endosimbiosis como proceso de la teoría sintética de la evolución, que se observa en la Tabla 5.
Una de las conclusiones más importantes de la síntesis propuesta por Chávez (2013) es la capacidad de la endosimbiosis seriada de ajustar los organismos a su entorno, con una alternativa saltacionista en las diferentes especies. Para los evolucionistas de las organizaciones las empresas deben permitir su adaptación al entorno mejorando e incrementando sus capacidades, lo cual puede ser ayudado a partir de la simbiosis entre las mismas organizaciones y o en procesos interorganizacionales (Gil Feixa y Olleta Tañà, 2007).
En este contexto, Mokyr (1990, 1997) señala que las nuevas ideas en las organizaciones constituyen ‘variaciones’ o ‘mutaciones’ de las ideas existentes, pero a diferencia de las mutaciones biológicas, estas no son mutaciones aleatorias, porque dependen del entorno organizacional y social y lo que se busca es su permanencia. El proceso de selección permite que solo las mejores ideas sobrevivan y que en algunos casos reemplacen o en otros coexistan con las ideas establecidas. Sacrificando en ocasiones las nuevas ideas en confrontación a las antiguas, las cuales son sustituidas.
La teoría de la endosimbiosis proporciona una nueva visión de los procesos evolutivos en los seres vivos, a partir de la fusión de dos seres vivos, surge la creación de uno totalmente nuevo que tiene la oportunidad de tener las ventajas adaptativas de sus antecesores. Esta visión puede resultar particularmente útil cuando se observan los procesos de innovación, no como procesos aislados, sino como procesos colaborativos que permiten encontrar diferentes alternativas a los procesos de desarrollo innovador (Ver Tabla 6).
Es importante establecer que las innovaciones deben integrarse en todos los niveles jerárquicos y que el desarrollo de las capacidades se dará mucho más completo en tanto más niveles organizacionales se encuentren incluidos, que admiten la suma de alternativas para el desarrollo. De acuerdo con Jacob (2007) y Aeca (2017) los desarrollos simbióticos permiten procesos cognitivos abiertos como un proceso de “bricolaje cognitivo” que conecta habilidades, conocimientos y otros recursos que no se habían integrado anteriormente, y que resultan muy oportunos para alcanzar soluciones creativas y útiles.
Para Arbonies (2007, p. 49) estos procesos biológicos aplicados a las organizaciones pueden desarrollarse en:
• Una evolución con el entorno: co-evolución;
• un cambio sustancial en la forma de entender la organización como algo físico, para pensar en una organización como fluido preparada para acometer la complejidad y los eventos inesperados;
• una implicación con el entorno en términos sociales, territoriales y emocionales;
• un uso intensivo de las tecnologías de la información y comunicación para establecer redes en una ecología innovadora;
• un liderato diferente que más que delegar o dar poder a las personas organizará relaciones y visiones compartidas.
Pensar las organizaciones de esta manera requiere un cambio de percepción de acuerdo con las capacidades individuales, de tal forma que la colaboración proporcione una simbiosis que pueda compartirse en diferentes unidades organizacionales y en entornos interorganizacional.
Finalmente, la propuesta de aplicación metafórica se proporciona en la Figura 2; en ella, se propone que la investigación básica y aplicada permitan integrarse con los nuevos conocimientos a partir del proceso de innovación que debe permitir reunir las diferentes teorías de diferentes áreas, ciencias, unidades organizaciones e incluso empresas en las diferentes innovaciones que se requieran dentro del entorno organizacional.
La endosimbiosis proporciona como metáfora una fuente de nuevo pensamiento, que permite entender los procesos innovativos en la naturaleza que finalmente se vuelven evolución, adaptación y mejora de capacidades para las especies que les posibilitan el cambio de su entorno. La alianza Inter- especies ocurrida hace muchos años demuestra que es más fácil un proceso de evolución a partir de la colaboración (simbiosis) que los procesos de competencia. Los procesos innovadores son un reto para las organizaciones, por eso se proponen modelos híbridos que permitan solucionar cada una de las necesidades creativas de las organizaciones.
Esta primera aproximación se convierte entonces, en una invitación al medio académico y productivo para pensar los procesos de innovación o la creación como procesos colaborativos en donde “el material genético- conocimiento” pueda ser compartido para alcanzar soluciones alternativas, diferentes y evolutivamente más estables.
Cómo citar este artículo: Montoya R, L.A., Montoya R, I.A., y Rojas Berrio, S.P. (2018). Innovación organizacional como un proceso de simbiogénesis, NOVUM, 1(9), p.p. 124 - 142.