Resumen: El objetivo de este trabajo es, analizar la experiencia emocional en docentes de primaria los procesos de frustración en la labor docente. Por lo que, se analizaron entrevistas realizadas a una muestra de seis profesores regulares y de promotoría que trabajan en el programa de Convivencia Escolar en el Estado de México. En las entrevistas realizadas los docentes debían externaran emociones vividas durante los procesos administrativos inherentes a su función. Los resultados mostraron que, los profesores refieren diversas emociones y la más común es la frustración. Los significados generados aluden al logro pedagógico y al ajuste del comportamiento en el contexto escolar. Se discute sobre la tensión entre estos resultados y los principios de la educación armónica y pacífica y sobre las posibilidades que surgen de considerar las emociones como recurso para la comprensión y abordaje del desafío de avanzar hacia una educación libre de frustraciones.
Palabras clave: Docentes, Frustración, Instituciones educativas.
Abstract: The objective of this work is to analyze the emotional experience in primary school teachers, the processes of frustration in teaching. Therefore, interviews conducted with a sample of six regular and promotional teachers who work in the School Coexistence program in the State of Mexico were analyzed. In the interviews carried out, the teachers had to express emotions experienced during the administrative processes inherent to their function. The results showed that teachers report various emotions and the most common is frustration. The generated meanings allude to pedagogical achievement and behavioral adjustment in the school context. The tension between these results and the principles of harmonic and peaceful education is discussed, as well as the possibilities that arise from considering emotions as a resource for understanding and approaching the challenge of advancing towards an education free of frustrations.
Keywords: Teachers, Frustration, Educational institutions.
Artículos científicos
LA FRUSTRACIÓN EN DOCENTES DE EDUCACIÓN PRIMARIA COMO FACTOR EMOCIONAL DETONANTE DE CONFLICTOS EN LA ESCUELA
Recepción: 03 Marzo 2022
Aprobación: 03 Junio 2022
En este trabajo se analizaron las manifestaciones de la violencia contra los profesores desde una perspectiva institucional con el objetivo de profundizar en las diversas manifestaciones de la violencia y agresiones contra el cuerpo docente y ante todo de las manifestaciones agresivas de parte de los estudiantes que finalmente repercuten en los procesos de frustración en docentes de primaria.
Por otra parte, se analizó a la escuela como institución haciendo un breve recorrido histórico con la intención de encontrar sus características de organización, teniendo así el concepto de la escuela como un lugar en donde desde el primer momento se ponen en juego las problemáticas del poder y la obediencia, por tanto, su forma de operar es trasmitiendo saberes a través de ciertas características disciplinarias que se ligan a la historia del Estado, es decir, la institución escolar está implicada en las formas de dominación ampliamente ejercidas con supuesta legitimidad por el Estado.
La escuela es entonces la expresión de una situación social cultural que responde al proyecto de la modernidad y no esta ajena a expresiones de dominio y de poder, es entonces que, “la práctica de la educación en el seno de la institución comenzó tiempo antes con una serie de ordenes católicas que se encargaron de las primeras escuelas y de establecer los estándares para la práctica pedagógica” (Arenas, 2007), ejemplo de esto es que en el año de 1684 gracias al esfuerzo de Jean- Baptiste de La Salle se crea el instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas que tenía como principal propósito proveer educación básica gratuita junto con instrucción religiosa para los niños de la clase trabajadora.
El modelo propuesto por la orden religiosa fue rescatado por el gobierno Napoleónico y usado como referente de la educación pública, primero en Francia y posteriormente en muchos países protestantes, es así como la orden de la Salle al igual que otras ordenes, se encargaron de las primeras escuelas institucionalizadas buscando con esto la organización de la instrucción pública estandarizando el buen funcionamiento y la forma de aplicar la disciplina, sistematizando a través de la formación de los profesores, volviéndose la escuela un espacio en donde todo estaba bajo un patrón de estricto control en donde los educadores se obsesionaban el reportar cada momento transcurrido en la escuela volviendo a los estudiantes en una fuente importante de control (Arenas, 2007).
La pedagogía desarrollada por las órdenes religiosas abrió la posibilidad de controlar tanto al estudiante como al aula completa, es decir, la institución escolar, así, como el aula porta en su forma una serie de rasgos propios del rito religioso, incluyendo isomorfismos entre la figura del profesor y la del sacerdote, así, como de la sacralidad de las santas escrituras y los programas y contenidos oficiales que se deben transmitir a los estudiantes.
Al poner en marcha las escuelas, las órdenes religiosas plasman en su forma la sacralidad propia del templo. Existe una estructura similar entre el espacio de la iglesia, la ritualidad de sus celebraciones - en particular, la misa y el ciclo del calendario litúrgico y las figuras simbólicas y de poder eclesial - el sacerdote -, y los elementos de la escuela: En este escenario se naturaliza la relación asimétrica entre sacerdote-profesor y fieles-estudiantes. “La figura del profesor encuentra sus raíces en la matriz eclesiástica de la escuela” (Noro, 2010).
Las estructuras y el isomorfismo iglesia-escuela se mantuvieron intactos, y sirvieron para organizar la educación y transmitir el proyecto de la modernidad. La obra “La letra con sangre entra”, también conocida como Escena de Escuela, fue pintada por Francisco de Goya alrededor del año 1780. En ella se observa cómo un profesor castiga físicamente a un pupilo mientras que otros, aparentemente ya castigados, están realizando tareas. El uso de la luz en la escena revela el foco de la atención del artista: el trato injusto a los niños, la violencia, la tortura en las Aulas de la época, y los efectos de disciplina y obediencia de los castigos, retratados en los niños ocultos en la oscuridad.
El castigo entonces, no era exclusivo de la escuela pues existió mucho antes de que las ordenes católicas se hicieran cargo de la educación formal, es entonces que las torturas tanto físicas como morales fueron aplicadas durante siglos principalmente por profesores y padres educadores en el entorno familiar dando como consecuencia que el abuso de estos castigos despertara en los menores el recelo hacia la escuela lo que nos permitirá analizar las llamadas reacciones defensivas pues “a pesar de las formas que asume, el castigo resulta inseparable de la escuela” (Herrera, 2013).
Dicho lo anterior, ahora se analizará más de cerca la violencia como retorno histórico lo que Freud denomina “retorno de lo reprimido” para dar cuenta del fenómeno de represión que, en su teoría que lleva el mismo nombre, Freud refiere que hay un dinamismo en este sentido y lo plantea desde el punto en el que considera que hay un debilitamiento en el sistema de censura o represión, es decir, este mecanismo no puede sostenerse con la fuerza con la que se originó dando pauta a que emerja lo que Freud llama el material reprimido o dicho de otra manera “retorno de lo reprimido” (Freud, 1914), en este punto Freud dice que, todo lo que ha sido reprimido tiende a regresar de algún modo y en algún momento.
Por otra parte, los movimientos instituyentes de grandes masas que adoptan proyectos transformadores en lo socio-político, resultan tan autoritarios como el que originó el movimiento que condujo a la revolución, viendo entonces un retorno de lo reprimido que no es ni más ni menos que el Estado que monopoliza el uso de violencia que fue cuestionado y destruido con los movimientos revolucionario e independista anhelando el deseo de orden y burocracia ante el desorden y el caos por los mismos revolucionarios que originalmente lo destruyeron, en este caso para analizar la violencia el concepto de “retorno de lo reprimido” (Freud, 1914), resulta bastante útil para esclarecer ciertas determinaciones históricas.
De manera que, al parecer existe cierta complicidad por parte del docente para llevar a cabo las imposiciones y dominación propuestas por parte del Estado al no establecer un límite ante tales situaciones sino todo lo contrario pues estas prácticas de tortura fueron proliferando y los castigos se fueron extendiendo a lo largo de la historia de la escuela y en diversas naciones no solo manifestándose en agresiones físicas por parte del maestro sino que también la violencia se manifestaba de manera psicológica y todo ello con el consentimiento de los mismos padres de familia mostrando así un alto grado de violencia, dando como consecuencia la represión de las inquietudes, preguntas intereses, anteponiendo la disciplina escolar presente como principal objetivo, es aquí en donde “se establece que, el poder “personal” que un sujeto cree poseer al ocupar un puesto de autoridad (padre, maestro, gobernante), es ilusorio, es porque, es la estructura la que asigna ese poder”, (Gerber, 1981).
Ante tal situación y pasado un periodo considerable de represión, llega el momento en que surge la queja generalizada acerca del mal comportamiento de los alumnos en torno a que éstos desafían a los profesores, les arrojan objetos, los amenazan e incluso en algunos momentos han llegado a agredir físicamente de manera individual y en grupo a los docentes, “como consecuencia de ciertas transformaciones en el mundo del trabajo, y algunas condiciones existentes en las instituciones en que se desempeñan los equipos docentes, se producen dificultades en su labor cotidiana, lo cual conduce a que sus integrantes experimenten sufrimiento”, (Foladori & Silva, 2016), entendiéndose tal situación como una reacción frente a la historia en que retorna de forma tácita y escasamente comprendida, el malestar acumulado a lo largo de varias generaciones.
Otro factor es el que compete a la presión familiar hacía los alumnos en el estricto sentido de haber culminado en su vida escolar siquiera la instrucción primaria por lo que, ven en sus hijos una posibilidad de realización personal, entonces como lo menciona (Freud, 1914) “el hijo/a debe cumplir los irrealizados sueños de los padres”.
En este sentido se analizará la figura del profesor-evaluador quién tiende a ser un factor que obstaculiza la realización personal, familiar y social, generando en el estudiante una intensa ira, limitando visualizar que el profesor a su vez es violentado por un sistema que le impone infinitos controles por una burocracia impuesta mediante la institucionalidad que declara la guerra en este grupo entre pares, “han sido múltiples las investigaciones que se han preguntado por las emociones de los estudiantes y de los docentes, pero más de los primeros que de los segundos”, (Becker, 2015).
“Cabe cuestionarse la violencia de los estudiantes hacia los profesores desde las determinantes institucionalidades transgeneracionales y sociales” (Foladori & Silva, 2016), se cuestionan ante las agresiones hacia los profesores como una manifestación de las violencias que retornan llegando al origen mismo de la escuela, entendiéndose esta violencia como agresión en defensa ante las condiciones y maltratos históricamente sufridos, observándose también en esta violencia de los estudiantes, una venganza frente a los mecanismos de exclusión que existen en la institución escolar, “¿qué emociones aparecen en los docentes hacia sus alumnos para gestionar la disciplina?” (Funes, 2017).
De acuerdo con Hernández 2017 “investigó las habilidades emocionales de 30 profesores, de los cuales 15 creían que, si mejoraban sus habilidades emocionales, su práctica profesional se vería beneficiada, aunque solo 5 de ellos conocían técnicas para el desarrollo de la IE en la práctica docente, por lo que destacaron la importancia de desarrollar y promover las competencias emocionales en la formación docente” (Martinez, 2019).
Otra fuente de violencia hacia los profesores analizada en el presente trabajo es la del Estado que burocratiza su ejercicio sometiéndolos a condiciones que están fuera de su control como órganos reguladores del sistema estatal, así mismo, la entrega de planificaciones, diseño de instrumentos de evaluación lineamientos de lo que son las buenas prácticas docentes, sistema de evaluación de desempeño que miden el rendimiento de estudiantes mediante pruebas estandarizadas y otra serie de exigencias que debe de cumplir obligatoriamente el profesor, volviéndose la practica pedagógica una fuente de violencia hacia los docentes por parte de la institucionalidad en educación y por si fuera poco los maestros además, deben de responsabilizarse de los malos resultados de los estudiantes y responder de todo aquello que sale mal, en este sentido “se hace referencia a la “regulación de los afectos”, la cual se refiere a todos los esfuerzos por influir en la carga afectiva de una respuesta, incluyendo: 1) la regulación de la emoción; 2) la regulación del estrés, y 3) la regulación del estado de ánimo. Lo que comparten estos tres tipos de regulación es que tienen como meta el maximizar el placer o minimizar el dolor” (Cuevas, 2019).
Entonces, “el sufrimiento laboral que sufren los profesores muestra la explotación que los afecta, así, como las condiciones en que se desempeñan y las exigencias desmedidas del Estado” (Foladori & Silva, 2016), repercutiendo en el pronto abandono de la profesión debido a las afectaciones en la salud que se desprenden de la violencia y sufrimiento que afectan el desempeño de la profesión, “durante los últimos diez años se han producido muchos cambios que han dado como resultado docentes desilusionados que expresan sus preocupaciones, y que sacan a la luz el problema del estrés” (Cooper, 1997).
El sistema está orientado a la responsabilización del profesor siendo un sistema que violenta tanto a los estudiantes como a los profesores sometiéndolos a condiciones que van en desmedro de su autonomía impactando en el nivel de identidad, subjetividad y salud mental, no obstante, un factor que hay que considerar es el de la violencia que este sistema genera entre profesores sometiéndolos a altos niveles de competividad entre pares buscando el poder para la sumisión del otro entrando en juego las jerarquías institucionales que siempre harán uso de la violencia entre pares como medio para dividir y someter, “el conflicto entre roles es muy importante para los docentes, dado a que puede abarcar conflictos internos debido a las distintas expectativas que tienen los padres y las madres de los alumnos, el propio alumnado, los directores etc., y conflictos inter-rol, cuando los maestros tienen que asumir distintas funciones dentro de la escuela” (Cooper, 1997).
El siguiente factor de violencia hacia los profesores es el que compete a los padres de familia denominados apoderados ya que siendo el sector que costea la educación de los alumnos, delegan cierta autoridad como padres en los profesores convirtiéndose esta situación en una serie de fundamentos por ambas partes para respaldar la postura que a cada uno compete en el proceso enseñanza aprendizaje pues, los maestros argumentan ser los especialistas en educación mientras que los padres de familia sostienen que son los principales responsables de la educación de sus hijos permitiéndoles malos comportamientos o fomentándolos aún más, todo esto encausado en la interminable lucha de poderes en busca del sometimiento del otro. Siendo que, “la figura del profesor debe encarnar intrínsecamente a la autoridad en forma previa a la misma interacción educativa. De este modo, el mantenimiento del orden, traducido en contrarrestar, contener o sancionar los problemas disciplinarios, se convierte en la tarea principal (manifiesta o implícita) del trabajo de los docentes en el aula” (Batallán, 2003).
Por consiguiente, considero necesario que las diferentes formas de violencia a las que está sometido el cuerpo docente deben analizarse para proponer alternativas que fortalezcan la cooperación y los procesos de reflexión garantes de un trabajo con sentido, puesto que, actualmente el profesor ya no es visto socialmente como el que presta un gran servicio a la sociedad y al Estado, sino que, proyecta la imagen de una especie de parásito social sujeto a una serie de expresiones que constituyen el reflejo de una imagen devaluada que socialmente se asigna a la función docente.
Por otra parte, al analizar las opiniones de diversos profesores, se puede percibir un cierto malestar, en virtud de que su labor no es reconocida ni por sus alumnos, directivos de una institución, autoridades educativas, ni por los padres de familia e instituciones sociales.
Un factor más de análisis ante la frustración docente es que tampoco existe un reconocimiento salarial e incluso los mecanismos de retabulación laboral siguen esquemas más de línea administrativa que de línea académica, agreguemos también que existe una cierta predisposición para magnificar los errores profesionales de los docentes frente a las dificultades que permitan reconocer sus aciertos y esfuerzos, entendiéndose los errores profesionales como resultado de la inexperiencia y a la presión a la que constantemente están sometidos los profesores al atender determinada cantidad de alumnos al día, como a la dinámica del proceso escolar que no tiene condiciones para detenerse y examinar lo que está sucediendo y cuanto un profesor está permanentemente obligado a actuar.
De manera que, en la labor docente el profesor se ve constantemente obligado a resolver situaciones, tomando decisiones y a actuar por lo que, tal presión sobre estas acciones crea mayor margen de error, es así, que la presión de actuar dificulta la posibilidad de la reflexión-acción e intercambiar experiencias de lo que se hace, se puede decir que el resultado de la acción educativa crea una situación global en donde la frustración puede convertirse en caldo de cultivo.
Por otra parte, se cree que el profesor tiene una responsabilidad directa en las deficiencias, desaciertos o errores que aparecen en el proceso enseñanza aprendizaje catalogándolo de tradicional contradictoriamente pretendiendo que encabece una transformación en la educación ante la necesidad de que existan otros procesos en la educación mismos que orienten a su cambio y modernización. Sylvia Schmelkes (1995) es partidaria de que, “la mejora en la calidad de la educación depende más de la calidad de las personas que se desempeñan como docentes que de los planes y programas de estudio” (Schmelkes, 2001).
Esta investigación utiliza un paradigma cualitativo, a través del método exploratorio descriptivo, se trata de un estudio ubicado en una institución en el municipio de Chicoloapan en el Estado de México. Entre marzo de 2021 y junio de 2022.
El objetivo de este trabajo será estudiar la emoción de los docentes y cómo ésta impacta negativamente en la comunicación así, como en la labor que desempeña con los alumnos y en general con la comunidad escolar con la que socializa. En este marco se define como unidad de análisis a la organización social denominada institución. En nuestro caso, la población que conforma el “conjunto total de la unidad de análisis”, son los docentes internos y externos de la institución en la que me encuentro laborando. Lo que se refiere a la recolección de datos del personal interno, se aplicarán cuestionarios al director de la institución para conocer las políticas generales de la organización interna, las decisiones que se toman y el funcionamiento de la misma, también se entrevistará al colectivo docente con el fin de averiguar las acciones y estrategias para el funcionamiento de dicha institución y la atención de la descarga administrativa que es uno de los principales factores de frustración en los docentes.
La plantilla docente de la institución en donde se desarrolla el trabajo está conformada por seis docentes y un director. De los seis docentes tres son mujeres, tres docentes son hombres y el director también es del sexo masculino. Del total de maestros tres mujeres y el director cuentan con más de quince años de servicio mientras que el resto de la matrícula solo contamos con menos de trece años en la docencia.
La preparación con la que cuenta la plantilla docente es de licenciatura en educación, todos los maestros son egresados de Escuela Normal y solo tres docentes cuentan con una maestría concluida, la relación que se establece entre docentes y director es de mutuo respeto y apegado a la función que a cada uno compete.
Por otra parte, la escuela se encuentra ubicada dentro de una unidad habitacional en donde el acceso está muy controlado pues la mayor parte de la matrícula de alumnos que asiste a la escuela es de las comunidades cercanas y una parte menor de alumnos son residentes de la unidad.
Dentro de la unidad habitacional no se cuentan con establecimientos comerciales en los cuales se puedan consumir artículos de la canasta básica por lo que, las personas suelen trasladarse al centro del municipio que lo denominan el pueblo en donde se abastecen de lo indispensable para el día a día en términos de alimentos, artículos de papelería, ropa etc. La mayor parte de las personas suele caminar hasta el pueblo lo cual les lleva alrededor de veinte minutos, otras personas prefieren utilizar bicicleta o el servicio de taxi cuando lo hay.
El acceso a la ubicación de la escuela es mediante transporte público principalmente el cual no es suficiente pues, el tiempo que transcurre entre una unidad y otra es considerable ya que tarda alrededor de quince a veinte minutos en pasar y poderse trasladar a la avenida principal que es la Avenida México Texcoco, por lo que, una alternativa de transporte es el servicio de taxi aunque suele ocurrir la misma situación que con el servicio de combis pues, a veces, no hay unidades para poder transportarse.
Dicho lo anterior y para poder hacer un análisis en los procesos de frustración en docentes de primaria, me di a la tarea de hacer una entrevista a los docentes de la plantilla escolar y a los docentes de promotoría en educación física y artes en el que cada uno de ellos debería de responder acerca de las implicaciones que tienen los procesos administrativos inherentes a la labor docente y en específico, que externaran sus emociones ante la experiencia que implica este proceso en el desempeño de su función.
Para analizar más concretamente los resultados de la entrevista debo decir que de una muestra de seis docentes clasificándolos numéricamente del número uno al número seis, la docente número uno refirió que prácticamente estamos sometidos a procesos administrativos y burocráticos que solamente tienen la finalidad de hacernos perder el tiempo o mantenernos entretenidos y que dichos procesos suelen estresarla demasiado ya que regularmente estos procesos se realizan posterior al horario de la jornada por lo que los realiza en los tiempos en los que no tiene actividades con los integrantes de su familia o después de sus compromisos sociales lo que implica que termine a destiempo y desatienda las actividades organizadas en su grupo ya que se atrasa en la revisión de tareas, trabajos etc.
Cabe mencionar que la profesora número uno es una docente visceral que regularmente suele estar en contraposición de todos los procesos administrativos y de la organización interna de la escuela por lo que, regularmente debate y no respeta los acuerdos que se toman en plenaria o en consejo técnico. La docente se caracteriza por ser impositiva en todas las actividades que se programan en colectivo y cuando no se programan las actividades como ella sugiere muestra desinterés y apatía inclusive se torna irónica y difícilmente colabora, la docente tiene una experiencia laboral de más de 20 años de servicio, cuenta con una maestría concluida vive a cinco minutos de la escuela pero se caracteriza por llegar siempre tarde debido a que las obligaciones con sus hijos le impiden llegar a tiempo al centro de trabajo.
Por otra parte, el docente número dos coincidió en que estamos sometidos a procesos administrativos desgastantes y estresantes y que además de esto estamos a merced de las quejas de los padres de familia en cuanto al trabajo que desempeñamos dentro de los grupos pues, argumenta que a los padres de familia nada les parece y que solo lo vigilan para reportarlo en dirección escolar por diversos motivos relacionados con su desempeño académico en el grupo, esto personalmente le causa mucha frustración y emocionalmente lo tiene desestabilizado pues siempre está de mal humor o se encuentra predispuesto o a la defensiva ya que cualquier situación o comentario lo interpreta en contra de su persona o de lo que hace.
El docente número dos se caracteriza por ser visceral e inseguro en las actividades que realiza para socializar en el entorno, cuenta con trece años de experiencia en el servicio, tiene una maestría concluida y es muy organizado, pero es poco colaborativo y suele aislarse o desentenderse de sus obligaciones dentro del plantel, cabe mencionar que el docente número uno ejerce un alto grado de influencia negativa sobre el docente número dos.
El docente número tres refiere que los procesos administrativos pocas veces lo estresan pues cuenta con conocimientos en las TICS y eso le ayuda a realizar los procesos de una manera práctica y aunque invierte tiempo en ello no le molesta o lo estresa esta situación pues, el docente se caracteriza por ser muy tolerante y paciente en su función.
El docente número tres es muy sociable y amable, regularmente es muy colaborativo y participativo en los procesos y actividades de organización interna, tiene seis años de experiencia en el servicio, cuenta con una maestría concluida, su domicilio es cercano al centro de trabajo y regularmente suele llegar temprano, mantiene mucha comunicación con sus alumnos y las madres de familia de su grupo, dentro de la plantilla docente siempre tiene la mejor disposición ante las actividades que lleguen a programarse y se apega a los acuerdos establecidos.
La docente número cuatro refiere que efectivamente el trabajo administrativo suele estresarla muchísimo pues a veces son requerimientos que se solicitan con premura de tiempo causando estrés y desequilibrio emocional ya que dichos procesos suelen trabajarse fuera del horario escolar y ello implica que desatienda sus actividades del hogar pues tiene una niña pequeña que requiere de su atención y cuidado.
La docente número cuatro cuanta con una licenciatura en educación primaria, es egresada de una Escuela Normal ubicada en el municipio de Chimalhuacán por lo que, el traslado al centro de trabajo en más largo y requiere mayor inversión de tiempo aunque aun así, es de las docentes que se caracteriza por llegar temprano a la institución, la docente es de carácter visceral pero es objetiva, suele ser colaborativa y regularmente cumple cabalmente con la función que le compete dentro de la organización interna de la escuela, es participativa y sociable aunque, hay momentos en los que se fricciona con los padres de familia por ser impositiva pero en términos generales tiene buena disposición ante las actividades académicas y de organización interna.
El docente número cinco refirió que los procesos administrativos intervienen en el aspecto emocional ya que regularmente vivimos en constante estrés por entregar a tiempo o entregar lo mejor que se pueda los requerimientos solicitados en dirección escolar. La entrega de documentación en tiempo y forma genera un sentido de competencia entre los docentes de la plantilla escolar, misma que, los tiene en constante desgaste tanto físico como emocional llegando a repercutir en el desempeño de la labor docente pues el rendimiento ya no suele ser el mismo. El docente también comentó que es importante estar cubriendo los requerimientos administrativos, aunque, por otra parte, dijo estar convencido de que ésta es una manera de estar sometido a la entrega recepción de información que no es relevante en su totalidad pero que finalmente es un aspecto que forma parte de la labor del docente, aunque suela ser tedioso y hasta frustrante debido al tiempo que se debe invertir en estas actividades.
El docente número cinco cuenta con 21 años de experiencia en la docencia, siendo una persona muy respetuosa, amable y colaborativo en todo momento, a pesar de que su domicilio está lejos del centro de trabajo el profesor suele ser de los primeros en llegar a la institución caracterizándose por ser muy dinámico en sus sesiones de trabajo contagiando su estado emocional a los alumnos y compañeros docentes, el maestro es muy sociable y siempre tiene la mejor disposición de trabajar en todas las actividades programadas respetando los acuerdos establecidos en plenaria y a todos los docentes del plantel.
La docente número seis comentó que el trabajo administrativo suele ser bastante desgastante pues como la docente es nueva en la plantilla comentó que en su escuela anterior los docentes solían estar sometidos constantemente a procesos meramente burocráticos y administrativos o simplemente en procesos de propuestas administrativas por parte del Director escolar quien solía ser muy impositivo y exigente con este tipo de procesos lo cual, a la profesora le parece que este es un aspecto a considerar puesto que ante esta situación experimentó una serie de emociones que no podía expresar en ese momento pero, refirió que entre otros sentimientos que experimentó, la ira y la frustración fueron de los más frecuentes.
La docente cuenta con más de veinte años de experiencia en el servicio y suele ser muy participativa en las actividades de organización interna además de que asume con mucha responsabilidad y sobre todo con la mayor y mejor de las disposiciones los acuerdos establecidos en cuestión de organización interna de la escuela respetando en todo momento la actitud que asume el resto de la plantilla ante estas actividades mostrándose solidaria y colaborativa. La docente se caracteriza por ser muy enérgica con su grupo, pero muy objetiva.
Ante las situaciones anteriormente analizadas mediante las entrevistas que se realizaron a los docentes de la institución educativa en la que actualmente desempeño mi función docente, se puede percibir que los procesos administrativos inherentes a la función docente son un factor causante de estrés, desgaste físico, mental y sobre todo causante de frustración en la mayoría de los profesores entrevistados.
Lo expuesto a lo largo de este trabajo, permite arribar a las siguientes conclusiones:
En cuanto al concepto de frustración, derivado de la experiencia emocional a la que se encuentran sujetos los docentes de educación primaria al llevar a cabo un ejercicio profesional en el que se encuentran implícitos un sinfín de procesos administrativos y burocráticos con los que todo trabajador de la educación debe dar cabal cumplimiento siendo éste un factor determinante en el estatus emocional del docente, el cual repercute de manera negativa en la salud del servidor público menguando así, la calidad educativa que reciben los estudiantes, podemos definir qué; la frustración, es un estado emocional que puede detonarse de una serie de factores implícitos en el desempeño de la labor docente, originando, un bajo rendimiento en el ejercicio académico del profesorado debido al autoestima que se tiene de sí mismo restándole importancia al impacto que genera en la comunidad escolar este factor y el desempeño personal con los alumnos derivando como consecuencia de ello en problemáticas que difícilmente se resuelven de la mejor manera debido al estado emocional en el que se encuentra inmerso el docente originando que puedan tornarse dichos problemas en algunos de los casos en situaciones de violencia dentro del grupo y dentro de la comunidad escolar de alumnos.
El poder conocer los procesos que causan frustración en los docentes de educación primaria y que repercuten en conductas disruptivas generando conflictos escolares, son algunos de los resultados esperados mediante el desarrollo de la investigación. A partir de la experiencia obtenida en el desarrollo del trabajo de investigación, corroboré que cada docente tiene diversas maneras de interpretar y asimilar los procesos administrativos y pedagógicos implícitos en el proceso de enseñanza aprendizaje y no solo de manera interna sino también de forma externa, pues, los docentes encuestados refirieron situaciones diversas de su percepción en el ejercicio de su profesión.
Para poder comprender y regular estas emociones que implican el sentimiento de la frustración experimentada por el cuerpo docente en la institución en la que me encuentro laborando, es preciso analizar dichos procesos de frustración con la intención de hacer aportaciones que apoyen la visión que se tiene en cuanto a la organización estructural de las instituciones y los procesos administrativos inherentes al proceso enseñanza aprendizaje al que se encuentran sujetos dichos actores de la educación generando repercusiones en la salud mental emocional y por ende que se convierten en un generador de situaciones conflictivas dentro del entorno escolar.